El oro africano. Saqueo, tráfico y comercio internacional


Francia – El libro « El oro africano. Saqueo, tráfico y comercio internacional", de Gilles Labarthe*, (L'or africain. Pillages, trafics et commerce internacional) es una excelente investigación escrita dedicada a revelar los aspectos ocultos de la explotación del oro en Sadiola, Malí, con un enfoque sobre el papel de los paraísos fiscales y las multinacionales europeas y estadounidenses, demostrando que se trata de un auténtico saqueo. La obra describe los movimientos de resistencia en Malí, en el resto de África y en el mundo, que se oponen a esta explotación descontrolada de los recursos.
Fuente: Survie Oxfam traducido por Caty R.

El oro olvidado de África
El libro de Gilles Labarthe, una de las pocas obras sobre este asunto, es una mirada crítica sobre un sector prácticamente sin ley, lo que ha originado una carrera contrarreloj entre las compañías extractoras, para ver quién consigue enriquecerse más y más deprisa, antes de las esperadas reacciones de los damnificados.
A partir del ejemplo de la mina de oro de Sadiola, en Malí y de la investigación del documentalista Camille de Vitry sobre las consecuencias para el ser humano y para el medio ambiente, este libro propone una amplia mirada sobre los protagonistas de la explotación del oro en África y las redes y circuitos económicos que utilizan, con el fin de desenmascarar el saqueo de las riquezas del continente africano.

África, continente estratégico
El libro nos introduce en la explotación del oro africano que, con 600 toneladas al año, representa alrededor de la cuarta parte de la producción anual de todo el mundo. El libro nos lleva a Sadiola y Morila (Malí), a Ghana, Sudáfrica o Botsuana, para constatar el cinismo de las compañías mineras y sus «métodos de explotación heredados del apartheid». Las consecuencias medioambientales vinculadas a la utilización del cianuro y el mercurio para purificar el mineral son «inhumanas». A continuación el autor señala los sectores del comercio legal del oro, para descubrir los sectores paralelos, los tráficos transfronterizos, las sociedades off shore y el papel de los paraísos fiscales en el blanqueo de capitales, de los que el oro es uno de los principales vectores. Nos informa de que el Banco Mundial, supuesto promotor del desarrollo de los países africanos, es el principal inversor en la extracción del oro, que junto a un puñado de multinacionales estadounidenses, como Newmont Minin; canadienses, como IAMGOLD; inglesas o sudafricanas, como AngloGold, se llevan el 80% de los recursos auríferos del continente.

La avalancha hacia el oro
Hay que señalar que desde los años noventa, con el fin de la Guerra Fría y la liberalización de las economías africanas bajo las prescripciones del Banco Mundial y del Fondo Monetario Internacional, el sector minero del oro estalló literalmente.
La investigación nos lleva también a la República Democrática del Congo, donde los conflictos armados se abastecen directamente del tráfico del oro. El autor dedica un gran capítulo a las operaciones de los bancos suizos.
Más allá de la profunda investigación sobre un asunto complicado, la gran fuerza de este libro probablemente reside en el testimonio que ofrece a las futuras generaciones sobre la movilización de los habitantes de Sadiola y de muchas otras ciudades mineras de África.

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Entrevista a Gilles Labarthe autor de “El oro africano. Saqueo, tráfico y comercio internacional"

La explotación del oro en África. Características e intereses socioeconómicos.
¿Cuáles son los principales países productores de oro en África?
Principalmente Sudáfrica (con una media de 300 toneladas en los últimos años), Ghana (más de 75 toneladas), Malí (50 toneladas), Tanzania (ídem), Guinea y Zimbabue (de 10 a 20 toneladas según los años), la República democrática del Congo… en total más de 34 países africanos producen oro, llegando a una producción global de más de 600 toneladas al año, es decir, la cuarta parte de la producción anual de todo el mundo.
¿Por qué África sigue siendo un continente estratégico en el sector minero del Oro?
Africa posee la mitad de las reservas de oro mundiales catalogadas. Después del petróleo, el del oro es uno de los primeros mercados mundiales, que mueve alrededor de 65.000 millones de dólares al año. Las multinacionales de la extracción cada vez codician más a África: además de las importantes reservas de oro, la parte que devuelven a los Estados productores se infravaloró hasta el extremo (el 20%, e incluso el 0% como es el caso de una mina de oro en Botsuana).
Además, la mano de obra africana es muy barata; los movimientos sindicales se reprimen rápidamente y las normas sobre el medio ambiente no existen o son poco vinculantes. Resultado: el margen de beneficio que obtienen las grandes compañías mineras es mayor en Africa que en cualquier otro lugar del planeta.
¿Cuáles son las tres principales multinacionales del oro que actúan en África?
AngloGold (Sudáfrica), Barrick Gold (Canadá) y Newmont Mining (Estados Unidos). Estas tres compañías, apoyadas por la flor y nata de las altas finanzas internacionales, producen ellas solas cada año más de 500 toneladas de todo el oro extraído en el planeta. Regularmente reciben denuncias por contaminación a gran escala y violación de los derechos humanos.
¿Quiénes son los principales compradores en el mercado mundial?
Los principales compradores son los grandes bancos comerciales como el Royal Bank of Canada, J. P. Morgan, Union des Banques Suisses (UBS) o la francesa Société Générale. Estos bancos occidentales conceden importantes créditos a las multinacionales citadas para financiar la explotación industrial del oro en los yacimientos más importantes de África. Los créditos se garantizan sobre la producción de oro.
Tanto para los accionistas como para las grandes entidades bancarias, la industria del oro es una de las inversiones más rentables. Valor seguro por excelencia, el oro conserva un buen porvenir. Su cotización actual ha superado las cotas más altas. La demanda es importante, como siempre en épocas de crisis. Los atentados del 11 de septiembre de 2001 contribuyeron a reactivar esta avidez. La joyería y la relojería de lujo absorben una parte considerable de la producción.
¿Qué problemas sociales y medioambientales causa la extracción del oro?
El libro cita el ejemplo de las comunidades de Sadiola, al suroeste de Malí, que desde hace diez años denuncian la contaminación espantosa causada por la extracción industrial del oro por las multinacionales. Vertidos de aguas contaminadas, intoxicaciones por cianuro, normas de seguridad mal aplicadas, desplazamiento masivo de las poblaciones locales… Las mismas devastaciones sociales y medioambientales también se denuncian desde hace tiempo, tanto en Ghana como en Tanzania.
¿Quién va a pagar la factura social y medioambiental vinculada a la explotación industrial del oro? La suma de las degradaciones ecológicas y los ataques a la salud causados por la explotación de las minas de oro a cielo abierto -que son las más contaminantes- va a arruinar las regiones productoras para las generaciones futuras. Un informe estadounidense ya apunta la cifra de 55.000 millones de dólares para reparar los daños.
¿Qué denuncian actualmente la sociedad civil africana y las ONG internacionales?
Además de las devastaciones sobre el medio ambiente, se trata de luchar contra las injusticias sociales. La explotación del oro, que a menudo está asociada con actividades mercenarias, puede revelarse todavía más mortífera en regiones en conflicto, como las provincias del este de la República Democrática del Congo. El oro podría financiar movimientos armados, como informa la ONG de defensa de los derechos humanos Human Rights Watch (HRW). También es uno de los principales vectores del blanqueo de dinero a nivel internacional.
África ha producido mucho oro, pero sigue siendo pobre ¿Por qué?
Más del 80% de las zonas auríferas del oeste y el centro de África están actualmente en manos de un puñado de multinacionales. Las reformas de los códigos mineros en la mayoría de los países africanos productores desde finales de los años ochenta, por la presión de las instituciones financieras internacionales (FMI y Banco Mundial), condujeron a favorecer a las grandes compañías de extracción extranjeras.
El sector del oro sigue siendo muy corrupto. Por ejemplo, en solo diez años, Malí se convirtió en el tercer exportador de oro de África después de Sudáfrica y Ghana. Sus exportaciones de oro se triplicaron, superando las 56 toneladas en 2006. Y mismo tiempo, el país cayó en picada en el Índice del desarrollo humano de las Naciones Unidas, bajando a la categoría de uno de los tres Estados más pobres del mundo.
Las riquezas se redistribuyen mal. ¿Adónde van los beneficios? ¿Adónde se va el oro? Incluso los funcionarios malíes y los responsables oficiales del sector de las minas no tienen informaciones completas y transparentes por parte de las grandes empresas occidentales, sobre los volúmenes de extracción de los recursos auríferos nacionales. La campaña «publiquen lo que pagan», apoyada por trescientas ONG de todo el mundo, tiene como objetivo principal conseguir que las compañías extractoras (de petróleo, gas y recursos mineros) publiquen, de forma sistemática y transparente, el importe de los impuestos y cánones de cualquier tipo que pagan a los Estados.-

* Gilles Labarthe es un periodista independiente basado en Ginebra y Francia. Ha sido corresponsal del Swiss daily newspapers en París y actualmente es redactor de la agencia de noticias DATAS, asociación de periodistas independientes centrada en la responsabilidad social de las empresas, desarrollo ecológico y derechos humanos. Periodista de investigación especializado en África, ha escrito dos libros: Le Togo, de l'esclavage au libéralisme mafieux, sobre la dictadura, corrupción y redes de la mafia en Togo y L'Or africain. Pillages, trafics et commerce international.
Publicado por: www.noalamina.org

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