Naturaleza virgen

Por: Por Daniela Estrada

Represas de la Patagonia quedan en suspenso
SON LOS PROYECTOS DEL CONSORCIO FORMADO POR ENDESA Y COLBÚN

La decisión del consorcio HidroAysén de suspender por nueve meses la tramitación ambiental del proyecto que busca construir cinco represas en la Patagonia Chilena fue sumamente festejada por una importante franja de la ciudadanía trasandina y sobre todo por las organizaciones no gubernamentales que observaban los proyectos.
"Estamos contentos, particularmente porque se reforzó nuestra opinión de que era un mal proyecto y un mal Estudio de Impacto Ambiental (IEA)", dijo a IPS, Sara Larraín, integrante del Consejo de Defensa de la Patagonia, un colectivo de 50 organizaciones chilenas y extranjeras contrarias a la iniciativa por sus impactos ambientales, sociales y turísticos.
La empresa solicitó finalmente a la Comisión Nacional del Medio Ambiente (Conama) de Aysén postergar hasta agosto de 2009 la tramitación del EIA, decisión que fue aceptada el mismo día por el organismo gubernamental.
 
Los proyectos
 
El consorcio HidroAysén, formado por las firmas generadoras Endesa y Colbún, pretende construir cinco megacentrales hidroeléctricas en dos ríos caudalosos de la austral región de Aysén, el Baker y el Pascua. La inversión estimada es de 3.200 millones de dólares.
Las centrales, que inundarían 5.910 hectáreas, pretenden inyectar 2.750 megavatios al Sistema Interconectado Central, que abastece a más de 90 por ciento de la población chilena. Para ello se requiere instalar un tendido eléctrico de 2.000 kilómetros, que atravesaría ocho regiones del país.
 
Cuestionamientos
 
El EIA correspondiente a las centrales fue presentado por el consorcio el 14 de agosto. El texto, de 10.500 páginas y un costo de 12 millones de dólares, fue confeccionado durante tres años por las empresas chilenas Poch y EPS y la sueca Sweco.
De los 36 servicios públicos que recibieron el proyecto, 32 formularon observaciones que se agruparon en el Informe Consolidado de Solicitud de Aclaraciones, Rectificaciones y/o Ampliaciones (Icsara).
Aunque el gobierno informó que fueron más de 3.000 las observaciones, la empresa aseguró haber recibido sólo 2.643.
La Conama de Aysén notificó a la empresa el 13 de noviembre que el plazo para responder el informe estaba cumplido, ante lo cual la empresa optó por pedir la suspensión en la víspera. Además, ya se cerró el proceso de participación ciudadana.
 
Revisiones
 
"Este es el proyecto de mayor envergadura y complejidad que ha enfrentado la institucionalidad medioambiental en Chile", declaró Hernán Salazar, gerente general de HidroAysén, en un comunicado de prensa.
"Como es de enorme relevancia para el futuro energético del país", la iniciativa "debe ser ampliamente conocida por los organismos técnicos, autoridades y la ciudadanía de Aysén y de Chile entero", añadió.
"En ese contexto, solicitar una suspensión es una alternativa enteramente habitual en este tipo de procesos y servirá para contar con el tiempo necesario para complementar la información del EIA", arguyó el ejecutivo.
 
Funcionarios comprometidos
 
La ministra de Medio Ambiente, Ana Lya Uriarte, señaló en octubre que el EIA no "estaba a la altura" de lo exigido, declaraciones que fueron morigeradas por otros funcionarios que se han manifestado proclives a la construcción de las represas, como los ministros de Energía, Marcelo Tokman, y el de Interior, Edmundo Pérez Yoma.
Tokman señaló que la "ruta crítica" del proyecto no eran las represas sino la línea de transmisión de 2.000 kilómetros, cuyo estudio ambiental será presentado el próximo año.
La empresa, en vez de hacer una autocrítica, cuestionó la idoneidad de los servicios públicos. El gerente general de Colbún, Bernardo Larraín Matte, señaló que, "si hacemos una analogía, el SAG (Servicio Agrícola Ganadero) usó una regla de una librería (para estimar la superficie inundada) e HidroAysén un instrumento de medición con precisión láser".
Antes de que la Conama notificara a la empresa del Icsara, la estatal Dirección de Aguas (DGA) ya había puesto en duda la factibilidad del proyecto al rechazar una solicitud de derechos de agua presentada por la empresa, tema que podría dirimirse paralelamente en los tribunales.
La DGA fue uno de los servicios públicos más lapidarios con HidroAysén.
"El estudio presentado a Evaluación Ambiental adolece de información relevante y esencial que permita: entender el proyecto; caracterizar correctamente las distintas componentes ambientales; predecir y evaluar sus impactos y en consecuencia verificar que el Titular se haga cargo de ellos".
 
"La información geológica, hidrogeológica, geomorfológica, y los estudios de riesgos naturales asociados a fenómenos geológicos, presentados en la Línea Base, son insuficientes para evaluar ambientalmente el proyecto", dice por su parte el Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin).
"Nos llamó la atención positivamente que hubiera tal consistencia y consenso entre los servicios públicos, que hicieron un tremendo trabajo. Este proceso sirvió para relegitimarlos. Ha habido una recuperación de la confianza", comentó Sara Larraín.
 
Debates necesarios
 
Sin embargo, el Consejo de Defensa de la Patagonia cuestionó que el gobierno decidiera continuar la tramitación del proyecto en vez de rechazarlo de plano, considerando que 11 servicios públicos concluyeron que el EIA "carece de información relevante y esencial".
En estos momentos, las represas están en el centro del debate nacional. Algunos actores plantean que, en caso de no materializarse la iniciativa, se pondrá en riesgo la seguridad energética de Chile, que importa 72 por ciento de la energía que consume en forma de gas, carbón y petróleo.
 
"HidroAysén es un proyecto estratégico, que pretende dotar a Chile de energía limpia, renovable y de menor costo, contribuyendo al desarrollo sustentable", argumenta la firma.
 
Peso social
 
Un sondeo encargado por la propia empresa, divulgado en octubre, indicó que 51 por ciento de los consultados estaban a favor de la construcción de las represas, mientras que 29 por ciento manifestó su desacuerdo.
Por otra parte, el 16 de este mes el diario local La Tercera afirmó que el reputado asesor de imagen contratado por el gobierno, el británico Simon Anholt, llegó a la conclusión de que las centrales van en contra del concepto que Chile quiere proyectar como país que protege su riqueza natural.
La tesis la habría planteado en una reunión privada que sostuvo con empresarios y líderes de opinión en Chile.
No obstante, los cálculos de la empresa indican que la decisión definitiva la tomaría el próximo gobierno que reemplazará al de Michelle Bachelet a partir del 11 de marzo de 2010.
"Mientras el proyecto no sea absolutamente rechazado y desechado como parte del futuro energético del país, el Consejo de Defensa de la Patagonia seguirá trabajando", adelantó Sara Larraín.
 
*Periodista IPS- Colaboración El Diario de Madryn

Paseos en kayak por los fiordos y las costas que rodean los glaciares.

El Puyuhuapi Lodge, flanqueado por bosques y cerros, se refleja en las heladas aguas.

Una excursión de trekking por la Reserva Nacional Cerro Castillo.

Un mundo de naturaleza casi salvaje, de belleza inexplorada en el sur chileno.
Una región casi inexplorada, casi mítica, casi soñada. Una tierra distante, en el corazón mismo de los suelos patagónicos, bañada por aguas heladas y por mares indómitos. Un sitio de imponentes glaciares, de vientos, montañas nevadas, lagos escondidos, de fiordos y ríos caudalosos. Virgen aún en muchos de sus rincones, la región de Aysén es un mundo de naturaleza casi salvaje, ideal para quienes buscan sitios apenas invadidos por la civilización. Algo más del cincuenta por ciento de su superficie corresponde a áreas protegidas, de las cuales cinco son parques nacionales, doce son reservas nacionales y dos son monumentos naturales.
COYHAIQUE Y SUS ALREDEDORES A la hora de recorrer la región y armar itinerarios, es imposible obviar la ciudad de Coyhaique como eje del viaje. Fundada en 1929 y emplazada en un hermoso valle de suaves lomadas, Coyhaique es la ciudad capital de la Aysén. Tranquila y casi bucólica, está amparada por el cerro Divisadero y rodeada de los ríos Simpson y Coyhaique. En un paseo por sus calles, vale la pena visitar el Museo Regional y la Feria de Artesanos, epicentro de artistas de toda la región que convergen hasta aquí con sus diferentes creaciones.
Saliendo de la ciudad y siguiendo la ruta que orilla el caudaloso río Simpson, se puede llegar a la Piedra del Indio, una roca viva tallada con el viento y el paso del tiempo que bien puede considerarse una de las postales inequívocas de la región. Hacia el noroeste, el visitante encontrará la Reserva Nacional Coyhaique, un sitio de espectacular belleza natural en el que se destacan los senderos y circuitos peatonales, la laguna Verde, los valles circundantes y puntos panorámicos especialmente instalados desde los que puede observarse la ciudad de Coyhaique, ubicada a menos de cinco kilómetros de distancia.
Algo más allá, la región ofrece el denso paisaje del lago Elizalde, que con su alargada fisonomía corre entre bosques de lengas y coihues de particular belleza, al tiempo que constituye un verdadero paraíso para los pescadores por la abundancia de truchas que se deslizan por sus aguas.
PUERTOS Y FIORDOS Al noroeste de Coyhaique, hay dos puntos también ineludibles para una visita: Puerto Aysén y Puerto Chacabuco. A ambos se llega desde Coyhaique bordeando el río Simpson en una ruta que permite, entre otras cosas, disfrutar de las hermosas vistas panorámicas del mirador Luis Marchant y las maravillosas caídas de aguas de las cascadas Velo de la Novia y de la Virgen.
Distante algo más de ochenta kilómetros de Coyhaique, Puerto Chacabuco es una de las poblaciones más importantes de la región y centro de su movimiento fluvial. Desde aquí, los turistas pueden realizar excursiones por ríos y mares, que constituyen una de las experiencias más inolvidables de un viaje a Aysén. Perderse por las aguas entre los bosques nativos y fundirse con el mar navegando fiordos y canales genera en el visitante sensaciones de pequeñez frente a la solitaria inmensidad y los paisajes sobrecogedores, como los que ofrece el Parque Nacional Laguna San Rafael (declarado Reserva Mundial de la Biosfera).
Por su parte, Puerto Aysén es un pequeño pueblo de poco más de quince mil habitantes cuyo principal ingreso proviene del turismo y la pesca, especialmente todo aquello derivado del salmón. Desde este puerto, ubicado en el interior mismo del fiordo de Aysén, los visitantes pueden realizar excursiones al Parque Aikén del Sur, que forma parte de una reserva ecoturística privada en un lugar de gran belleza natural.
INVITACION A LA AVENTURA Situada entre la región de Los Lagos en el norte y la región de Magallanes en el sur, Aysén ofrece numerosas alternativas para la aventura. A la hora de hacer un repaso, hay que comenzar por hablar de las varias opciones que hay para el trekking, una actividad que permite a los visitantes no sólo desandar senderos sino, además, conectarse con la naturaleza y el entorno geográfico. Los circuitos –con diferentes grados de dificultad– atraviesan planicies, zonas agrestes, áreas montañosas y bosques de tupida vegetación. Entre ellos, cabe destacar especialmente los de Parque Aikén del Sur y Reserva Nacional Río Simpson: no demandan un excesivo esfuerzo físico y llevan siempre a los caminantes por bellos parajes naturales.
En Parque Aikén del Sur hay tres rutas señalizadas que permiten descubrir la flora y fauna regional. Se trata de trayectos cortos, ideales para los viajeros entusiastas y sin mayores experiencias previas. La ruta más larga es la que une el Estero del Salto con el salto Barba del Viejo. Tiene una extensión de algo más de dos mil metros y se recorre en dos horas, aproximadamente. Otra posibilidad es tomar el camino al lago Riesco, un simpático sendero de 665 metros que bordea el fabuloso espejo de agua y serpentea por una colina. El salto Barba del Viejo es el sendero más corto en este parque privado, ya que tiene apenas 570 metros de extensión.
Por su parte, Reserva Nacional Río Simpson cuenta con dos senderos señalizados, uno de dos kilómetros y medio, y el otro de seis kilómetros. Ambos circuitos permiten descubrir los paisajes de esta área natural protegida que en sus 41.621 hectáreas de superficie posee bellezas naturales tales como la cascada La Virgen. El acceso a esta reserva, que se encuentra a treinta kilómetros de Puerto Aysén, se realiza por Puerto Chacabuco, con dirección a Coyhaique.
Por último, una opción que se ha ganado mucha popularidad en los últimos años es el llamado "Sendero Glaciares de Aysén", travesía de trekking que se realiza a través de glaciares y montañas prácticamente inexplorados y ha sido recientemente destacado por la revista norteamericana Outside (la publicación más importante a nivel mundial de turismo aventura) como uno de los mejores sitios de Sudamérica para la práctica de esta actividad. El Sendero funciona desde el año 2004 y consiste en un circuito equipado con seis campamentos donde se pasa la noche, bajo la modalidad refugio a refugio (sistema pionero en Chile). Vale destacar que es un trekking de alta exigencia, orientado a un perfil de turista que ya ha caminado por circuitos como los de Torres del Paine, Atacama o Bhutan, entre otros, y que quiere explorar lugares poco pisados por el hombre.
VERTIGO EN EL AGUA Si de kayak y rafting se trata, la región también ofrece numerosas alternativas acuáticas. Además del mar, donde se practica kayak en los fiordos y las costas que rodean los glaciares, los ríos que corren en la zona cercana a Puerto Aysén son una invitación a la aventura, especialmente por sus fuertes desniveles y sus poderosas corrientes. Pero, sin dudas, el gran atractivo es enfrentar el caudaloso río Simpson que fluye entre los valles de Coyhaique y Puerto Aysén y es el escenario más popular para la práctica de estos deportes.
En sus casi cuarenta kilómetros de extensión, el vertiginoso Simpson se caracteriza por sus inquietantes corrientes y su gran número de rápidos de clase III (dificultad media en la escala del rafting), por lo que no se necesita ser un experto para navegar en sus aguas. Allí, todos los años, se realiza el llamado Festival de Kayak de la Patagonia, un evento que invariablemente convoca a cientos de adeptos.
NATURALEZA AL POR MAYOR
El enorme territorio natural de la región de Aysén alberga gran cantidad de parques y reservas tales como: Reserva Nacional Lago Rosselot, Parque Nacional Queulat, Parque Nacional Isla Magdalena, Parque Nacional Isla Guambin, Reserva Nacional Guaitecas, Reserva Nacional Lago Carlota, Reserva Nacional Lago Las Torres, Reserva Nacional Mañihuales, Reserva Nacional Trapananda, Reserva Nacional Río Simpson, Monumento Natural Cinco Hermanas, Reserva Nacional Coyhaique, Monumento Natural Dos Lagunas, Reserva Nacional Cerro Castillo, Parque Nacional Laguna San Rafael, Reserva Nacional Jeinimeni, Reserva Nacional Tamango, Reserva Nacional Katalalixar y Parque Nacional Bernardo O'Higgins.
Fuente: www.pagina12.com.ar