EL PRINCIPIO DEL FIN DEL AGUA
Escrito por Mariano J. Aguilar
Estamos observando con asombro, como sobre cuatro Provincias Argentinas, se produce un efecto no deseado, que es la ausencia de agua. Aquello que se preconizaba como apocalipsis, originado en ideas de ambientalistas “verdes”, que se los frenaba por querer “propugnar la detención del desarrollo, y la parálisis del avance tecnológico”, se presenta hoy como la primera realidad revelada, consecuencia de una equivocada política de estado, que nos muestra el resultado erróneo del camino recorrido y elegido hasta ahora, dejándonos al desnudo así, sin más, ante la primer mueca del estentóreo presente “la falta de agua” dentro de nuestro prolífico y generoso territorio. Estamos hoy ante el umbral de graves inconvenientes, de cuyo origen es también cierto, que incumbe a todo el concierto de las naciones, pero donde nosotros estamos en déficit desde siempre en nuestra propia casa. Hemos omitido tomar políticas que prevean la provisión de falta de agua como ahora, y que desde hace mucho tiempo eviten actividades que provoquen el “cambio climático”, o que desmonten sin cortapisas nuestra “antigua forestación vegetal”, permitiendo sin contralor la excesiva emisión de dióxido de carbono, rematando últimamente el desaguisado ambiental, con el veto presidencial a la ley de protección de los glaciales, efectuada sin mas que para proteger el negocio de muy pocos y contaminar de millones de litros de agua y derretimiento de glaciares por la explotación minera. El calentamiento global parece no tener lugar como preocupación estatal. Todo esto en definitiva, fomenta el actual modelo de desarrollo, que no contempla en su cometido, los criterios ambientales en general, y los climáticos particularmente. Sin embargo estamos aún en tiempo de rectificar conductas y políticas, se necesita de inmediato llevar a cabo un giro copernicano, elegir un camino diferente, para no tener que estar en pocos años comprando agua en países vecinos para beber. Estamos aún a tiempo rectifiquemos y planifiquemos desde el ambiente.
Mariano J. Aguilar
Director Ejecutivo
AAdeAA
