Monsanto confunde innovación y salud


En declaraciones a Europa Press, el director de Sostenibilidad para Europa y Oriente Medio, Carlos Vicente, estima que la decisión de la Eurocámara "socava la innovación y el mercado único" porque se podrán prohibir productos seguros basándose en consideraciones no científicas sino de carácter político e ideológico. 

La decisión del Parlamento Europeo de dar libertad a los Estados para prohibir organismos modificados genéticamente (OGM) ya aprobados por la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) es una "señal de stop para la industria de la innovación" que repercutirá negativamente a Europa, según Monsanto. En declaraciones a Europa Press, el director de Sostenibilidad para Europa y Oriente Medio, Carlos Vicente, estima que la decisión de la Eurocámara "socava la innovación y el mercado único" porque se podrán prohibir productos seguros basándose en consideraciones no científicas sino de carácter político e ideológico. "Se envía una señal negativa a las industrias innovadoras que quieren invertir en investigación en Europa, al tiempo que los agricultores pierden una herramienta para hacer una agricultura más sostenible y seguir compitiendo a nivel internacional. Después de 18 años de cultivos transgénicos se ha demostrado que son tan seguros como sus homólogos convencionales y pueden proporcionar beneficios para los agricultores, los consumidores y el medio ambiente", ha manifestado. Además, ha criticado que el marco jurídico de la UE para estos cultivos adoptado en 2001 con una Directiva no se haya aplicado correctamente "nunca" por falta de voluntad política y ha precisado su crítica en que los plazos para las aprobaciones "no se respetan". De este modo, ha recordado que hay 23 productos con un informe favorable de la EFSA pendientes de aprobación, de los que 18 la aprobación no es de cultivo, sino de importación, algo de lo que depende la competitividad de los ganaderos europeos frente a sus competidores de Asia, África o América, un sector al que cree que con esta decisión "se está poniendo en riesgo importante" ya que se importa casi el 50 por ciento del maíz que se consume en la UE. A su juicio, las empresas del sector opinan que el hecho de que la UE no apoye la ciencia y la biotecnología que comenzó en Europa, es un "elemento perjudicial para la innovación, la inversión y la confianza de los consumidores". Con todo, ha afirmado que la apuesta de Monsanto por Europa "sigue siendo firme" y "fuerte" con las tecnologías a disposición de los agricultores, pero ha reclamado un marco regulatorio "predecible, fiable" para que los transgénicos "seguros" se autoricen allí donde los agricultores lo demanden. Vicente ha insistido en reclamar un criterio científico y no ideológico, pero ha lamentado que en la actualidad ese no es el criterio de Europa. "Si ese marco cambia volveremos a traer esos cultivos (la empresa dejó de comercializarlos en la UE hace un año)", ha apuntado, aunque ha añadido que si en las próximas fechas no hay un marco adecuado, Monsanto seguirá haciendo esfuerzos en Europa para estar presentes, pero con un portafolio de productos limitado y que va "en detrimento de la competitividad de los agricultores". En este contexto, ha recordado que en España, que es el país con mayor superficie de cultivo de maíz genéticamente modificado, se sembraron en 2014 un total 131.537,67 hectáreas, que representa el 31,6 por ciento del total del maíz que se cultiva en España y que se concentra en comunidades autónomas como Aragón, Cataluña, Extremadura o Andalucía. Mientras, en Castilla y León, Galicia o Cantabria, que cultivan un tercio del maíz en España no lo siembran ya que no tienen plaga del taladro. 

Fuente Europa Press
---------------
¿Semilla podrida?: Monsanto registra una fuerte reducción de sus beneficios
RT

Monsanto, el polémico gigante de venta de semillas, ha experimentado una caída del 34% de sus ganancias den el primer trimestre fiscal respecto al año anterior, debido, en parte, a su menor área de siembra con maíz en Sudamérica.

La empresa Monsanto, conocida por su maíz, soja y otras cosechas genéticamente modificadas, así como por el popular herbicida Roundup, anunció que sus beneficios por ventas netas cayeron hasta los 2.900 millones de dólares en el trimestre que concluyó el 30 de noviembre de 2014, frente a los 3.100 millones obtenidos en el mismo periodo del año anterior, mientras que las ventas de semillas de maíz y cosechas transgénicas cayeron un 12%, informa Reuters.
Las ganancias totalizaron 243 millones de dólares en el trimestre o 50 centavos por acción, respecto a los 368 millones de dólares, o 69 centavos por título el año anterior.
Monsanto ha sido objeto de críticas en muchas partes del mundo por su intento de monopolizar la venta y el uso de semillas. En México productores de maíz y científicos se esfuerzan en impedir que el Gobierno autorice a transnacionales como Monsanto el cultivo de granos transgénicos del maíz, uno de los alimentos básicos en ese país. Los activistas ya han iniciado una campaña en Internet para recaudar fondos para cubrir los gastos relacionados con las acciones judiciales.

Entradas populares de este blog

Científicos declaran oficialmente el fluoruro (flúor) como una neurotoxina

Francia: ‘Mi orina contiene glifosato, ¿y la tuya?’ Denuncia contra el polémico herbicida

Japón decidió deshacerse de todos los hornos de microondas en el país antes de finales de este año