La maravillosa justicia canadiense
En Canadá si haces una fotografía de una foca mientras la matan serás arrestado, encarcelado y multado. Las penas máximas son de hasta un año de prisión y 100.000$ de multa. Además, cuando documentamos la matanza de focas el año pasado, nuestro barco Farley Mowat fue requisado y todavía sigue en manos del gobierno canadiense, sin cargos en su contra. Dos de nuestros oficiales, Alex Cornelissen y Peter Hammarstedt, fueron liberados bajo fianza de 5.000$ cada uno por cometer el crimen de ser testigos de la muerte de una foca en manos de un cazador. El cargo real es la violación de las “Regulaciones de Protección a la Foca” que convierten en ilegal el observar o documentar, sin el permiso del gobierno, como se mata a una foca.
Esta semana un cazador de focas fue declarado culpable de matar de forma inhumana a una foca. Ashley Gould, de 27 años natural de Anchor Point en Newfoundland, fue grabado machacando crías de focas con una pala y lanzándolas al barco aun con vida.
¿Qué tiene que de decir a esto la “Ley de Protección de las Focas”? El señor Gould fue hallado culpable de usar armas no autorizadas. La pena por aporrear crías de foca en la cabeza con una pala y tirar sus cuerpos con vida a la cubierta de la embarcación es una multa de 2.000$ y el señor Gould será suspendido durante el primer día de la caza de focas de 2009.
Una multa de 100.000$ y hasta un año de cárcel por hacer una foto a una foca mientras la mata un cazador y 2.000$ de multa por aporrearla en la cabeza con una pala.
Dicen que la justicia es ciega. En Canadá la justicia tiene sus ojos bien abiertos sin ver nada y es arrogantemente imbécil y muy enferma.
Fuente: Sea Shepherd Conservation Society
http://www.oceansentry.org/lang-es/menu-sea-shepherd/noticias/1618-canadian-justice-is-a-wonderful-thing.html
