España lidera en Europa la cruel industria de la carne de caballo pese a que aquí (casi) nadie la come
Comer carne de caballo no es una práctica común en España. Sin embargo, es uno de los países que lidera esta industria en la Unión Europea. Se trata de un comercio proclive a riesgos y peligros para la salud y bienestar de los équidos, sometidos a situaciones de estrés, hacinamiento, hemorragias y otros daños. Así lo determinó la propia UE en un dictamen científico este mismo año. Países como Grecia, donde los caballos cuentan con el estatus de animal de compañía, este tipo de prácticas están prohibidas. Los animalistas reclaman en España acabar con este sector, cuya popularidad interna, si bien nunca ha sido destacada, se encuentra actualmente en descenso.
Adhik Arrilucea
Francia e Italia son los principales países europeos con tradición de consumo de este tipo de carne. Así lo destacan los datos del Eurostat y los indicadores económicos del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), consultados por Público. Pese a que España no tenga tradición de consumo, las estadísticas comunitarias apuntan a una posición destacada en su producción. "Es un importador neto de animales vivos de todo tipo de finalidad, y un exportador de animales vivos destinados a matadero, así como de carne de caballo", señala en su último informe anual sobre el sector equino la Secretaría General de Producciones Ganaderas y Cinegéticas.
De acuerdo con datos del Eurostat, España fue en 2024 el mayor país productor de carne de caballo, con 7.740 toneladas, y más de 28.000 cabezas sacrificadas. Le sigue Italia, con 6.080 toneladas de carne producidas y cerca de 24.000 sacrificios realizados durante el mismo período. De acuerdo con el MAPA, los últimos datos de producción estatal disponibles apuntan a "un descenso del 6,4% respecto al año anterior". No obstante, el ministerio reconoce que el sector "ha mantenido un comportamiento irregular en los últimos años, penalizado por su alto coste de producción y su consumo como producto secundario, alternativo a otras carnes".
Los riesgos de la industria cárnica de caballo
La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA, por sus siglas e inglés) publicó en enero de 2025 dos informes científicos: Bienestar de equinos en el sacrificio y Bienestar de equinos durante el sacrificio en las explotaciones. Ambos documentos tratan de identificar los posibles riesgos para el bienestar de estos animales y sus causas. Durante la fase de prematanza, los autores recogieron peligros relativos a la restricción de movimientos, estrés y lesiones derivados del manejo. Durante la llegada al matadero, también incluyeron aturdimiento y hemorragias, derivados de "trastornos gastrointestinales (úlceras), estrés térmico, lesiones, hambre prolongada, sed prolongada, problemas respiratorios, desasosiego, restricción del movimiento y sobreestimulación sensorial".
La Asociación Española para la Valorización de Envases (AEVAE) –entidad que gestiona el Sistema Colectivo de Responsabilidad Ampliada para residuos de envases agrarios– reconoce que existe una mayor demanda de prácticas sostenibles en el sector equino. Esto abarca tanto una reducción del impacto ambiental como una mejora del bienestar de los caballos. La organización asegura que esta industria se encuentra en fase de crecimiento y modernización en España y muestra un compromiso para avanzar en este camino.
El cofundador de Igualdad Animal Javier Moreno subraya en declaraciones a este medio que "el aturdimiento previo a la matanza suele fallar con frecuencia, lo que implica que muchos caballos están conscientes mientras son degollados, sufriendo dolor intenso". También indica que en largas distancias los équidos son transferidos en camiones hacinados, "lo que les provoca lesiones, fatiga, deshidratación y enfermedades asociadas al transporte". Asimismo, también señala en las exportaciones a otros países europeos que "soportan un transporte que puede ser extremadamente estresante y dañino para su salud".
Prohibir el sacrificio de caballos
En una solicitud de información realizada por Igualdad Animal a la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN), esta reveló que en España se mataron hasta 31.500 caballos para la producción de carne. La organización animalista también recuerda que existe un comercio clandestino con este producto. Así, en 2022 la Guardia Civil desmanteló una red que producía carne equina no apta para el consumo humano, con 35 personas detenidas. En el año 2017 también se desarticuló un grupo de 65 personas con los mismos fines.
La EFSA realizó una serie de recomendaciones para asegurar el bienestar de los équidos a lo largo de la cadena de valor. Entre ellas, mantener la temperatura interior del vehículo por debajo de los 25 °C durante el transporte, una densidad de carga no superior a 200 kg por metro cuadrado, utilizar rampas de descarga con pendientes suaves o emplear a cuidadores de caballos cualificados y formados en el comportamiento de los caballos. Sin embargo, Igualdad Animal aboga por seguir la estela de Grecia, que en 2020 prohibió el sacrificio de caballos al reconocerles la consideración de animales de compañía.
En el país heleno "se les reconoce como animales que deben ser protegidos de la explotación industrial", aclara Javier Moreno. Si España adoptara un estatus legal similar, el animalista indica que la matanza para producción cárnica dejaría de tener cobertura legal, "se reforzarían las sanciones contra el maltrato" y también "se podrían establecer sistemas de cuidado y protección continuados en lugar de ser tratados meramente como objetos". Igualdad Animal ha iniciado una campaña popular para poner fin a esta práctica en el Estado español, una iniciativa que ha recogido ya más de 400.000 firmas.
"Los consumidores tienen derecho a conocer la verdad que hay detrás de la carne de caballo. El Gobierno no puede seguir mirando hacia otro lado mientras miles de caballos sufren una muerte cruel en nuestro país y en las rutas de exportación", destaca Moreno en un comunicado. De este modo, la organización también reclama reforzar los controles veterinarios y perseguir con contundencia el comercio clandestino. Igualdad Animal concluye que, a la luz de la evidencia científica y las tramas descubiertas, las autoridades competentes deben poner fin "al sufrimiento de decenas de miles de caballos cada año".
Fuente: https://www.publico.es/sociedad/m-ambiente/espana-lidera-europa-cruel-industria-carne-caballo-pese-aqui-casi-nadie-come.html - Imagen de portada: Imágenes de caballos en una granja.Imagen Cedida / Igualdad Animal
