México: Vivir de la pesca cuando recala el sargazo

El panorama para los pescadores de Playa del Carmen, en Quintana Roo, se torna tan marrón como el sargazo que se observa en la franja costera y cuyo recale masivo se intensificó previo a Semana Santa, a tal grado de que tan sólo durante el primer fin de semana de abril se recolectaron 3 mil 300 toneladas de la macroalga, de acuerdo con reportes de las autoridades estatales.

Por Manuel Valdivia

En esta región caribeña −conocida por su mar azul turquesa y blanca arena, que atrae al año a miles de turistas−, viven de la pesca alrededor de 450 familias que se ven afectadas con la llegada del sargazo, comenta José Gómez Burgos, secretario general de la Cooperativa de Pescadores de Playa del Carmen.
Y es que a las habituales jornadas y altas temperaturas (entre 28º C y 40º C máximas durante primavera) se suman las dificultades para los pescadores, porque debido a la inmensa cantidad de sargazo que se acumula, no hay zonas en la playa donde puedan atracar las embarcaciones y deben meterse al agua, lo que hace más difícil la captura.
“La operación de las embarcaciones se vuelve más difícil. Las complicaciones que se tienen por cómo funcionan los motores fuera de la borda las hace más vulnerables a su descomposición, más si permanecen mucho tiempo estancadas o estáticas”, expresa el secretario general de la cooperativa mientras observa los trabajos que se realizan para recoger el alga que está llegando por millones al Caribe mexicano.
Bajo estas condiciones en que el aire huele a putrefacto por la descomposición de las algas, la pesca en las orillas es imposible, “porque todas las especies que pudieran estar cerca (sardinas, mojarras y cordobanes, entre otras) se alejan de la zona o mueren, no hay quien sobreviven a esa condición”, señala Gómez Burgos.
A una década de que el fenómeno del sargazo comenzó a ser una problemática para el Caribe mexicano, según reportes de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), para los pescadores es un asunto en que las autoridades ya deberían saber cómo actuar y prevenir, “porque ya sabemos con qué vientos llega y la temporada en la que arriba”.
Estos conocimientos a los que se refiere José tienen que ver con las investigaciones de Estados Unidos que ubicaron la procedencia de la macroalga de una zona llamada Región de Recirculación del Noreste del Ecuador (NERR, por sus siglas en inglés), localizada al norte de Ecuador, entre África y Brasil.
Para el pescador, quien tiene tres décadas viviendo en Playa del Carmen, la zona de mayor recale es Playa Recodo, debido a las construcciones que han redefinido algunas corrientes, además del amplio muelle y el aumento de cruceros.

“Eso es demasiado para un recale normal en una ciudad urbana donde el turismo es notorio en la costa y donde, precisamente, la ciudad está enfrente del muelle, entonces, los especialistas nunca han tomado en cuenta esas posiciones y tenemos el otro muelle a poco más de un kilómetro, por lo que se hace una herradura perfecta; todo va lastimando a la duna”, explica.
Para Burgos, vivir de la pesca en un futuro será más complicado si los gobiernos no aplican medidas pertinentes, porque todas las grandes inversiones y preocupaciones están dirigidas al turismo. Es algo lógico, “cuando la gente ya no viene porque está el sargazo, entonces las economías de las regiones van colapsando, pero lo importante es que sabemos que esto afecta tanto a los que nos visitan como a los que trabajamos y vivimos aquí”.

Fuente: Desinformémonos