Combatiendo la contaminación, con aspirinas



Columna opinión de Cristián Opaso Periodista Colaborador de Fundación Terram -Chile

En Quintero-Puchuncaví, una de las zonas más contaminadas de Chile está teniendo lugar un proceso que parece muy interesante. Delegados de la comunidad, empresa privada y autoridades de gobierno, están poniéndose de acuerdo en cómo abordar el gravísimo problema ambiental de la zona, conocido por todos por el reciente -y tremendo- derrame de petróleo y los no tan lejanos episodios de los niños intoxicados de La Greda.

El proceso, conocido como CRAS, acrónimo del Consejo para la Recuperación Ambiental y Social, está implementándose bajo la orientación de un grupo de técnicos expertos -pagados con cifras millonarias por supuesto-que utilizando una sofisticada matriz lógica llevan varios meses analizando las situaciones deseadas, los obstáculos y soluciones, las brechas, y las estrategias y proyectos, divididos en operacionales y estructurales.
El plan, vendido como un adelanto en participación ciudadana y recuperación ambiental, sería replicado en otras zonas contaminadas del territorio, de las cuales hay bastantes para elegir. ¡Por fin! dirá usted, se empezará a tomar el toro por las astas, y que mejor que en la zona de Quintero-Puchuncaví, una de las primeras zonas fuertemente industrializadas -y contaminadas- del país.
Ojalá fuese así estimado lector, pero siento contarle que será todo lo contrario: el CRAS será un craso fracaso: no sólo porque a un traumatismo encéfalo-craneano o a una bronconeumonia no se le trata con Aspirinas, sino que, ¿es que aún no aprendemos?, ¡el zorro no es el mejor cuidador del gallinero!
Ambas condiciones, lamentablemente, se cumplen con el intento de implementación de los Consejos de Recuperación Ambiental y Social.
Comencemos por lo primero.
¿Alguien cree que las empresas que son responsables de contaminar con emisiones tóxicas -muchas veces cancerígenas- el aire, agua y suelos de las comunidades aledañas, de buenas a primeras van a reconocer sus responsabilidades y van a invertir las cifras multi-millonarias que se requieren para mitigar y eventualmente prevenir los daños al ecosistema y las personas? Es asunto de sentido común. Además, los habitantes de la zona lo saben muy bien, luego de los magrísimos resultados del Acuerdo de Producción Limpia al que se comprometieron hace algunos años las principales empresas del sector.
Para controlar la contaminación se debe hacer gestión usando las leyes y normas, planes de descontaminación, etc. ¡cuando las hay! También instalando estaciones de monitoreo y haciendo mucha fiscalización.
Pues bien otro de los actores que se sientan a la mesa, son las autoridades gubernamentales, que ni siquiera han sido capaces de que se implementen adecuadamente las pocas leyes que en Chile protegen el medio ambiente. Un par de ejemplos, para los que creen que exagero. En esta zona se implementó el primer Plan de Descontaminación del país y se declaró la primera zona saturada. El programa debiera actualizarse cada 5 años. O sea, debiese haberse puesto al día en 1998, o sea hacen 16 años. ¡Aún no se ha actualizado!
Otra brochecito (de lata). El año 2013 debió comenzar a operar la nueva norma para emisiones de las termoeléctricas en Chile D.S N° 13 del 2011. Pues bien, el gobierno recién está comenzando a implementar, en algunos sectores, esa norma.
¿Tendrán estas autoridades la voluntad de implementar las medidas que se necesitan urgentemente?
¿Realmente se necesitan más estudios y reuniones? ¡Creo no equivocarme cuando digo que no hay zona cuya contaminación (su extensión, sus efectos y sus causas), hayan sido más estudiadas en Chile.
Si sólo en años muy recientes (2012-2013) se elaboraron cuatro contundentes estudios, con el fin de implementar un Plan de Acción para la Gestión Ambiental por Potencial Presencia de Contaminantes en las Comunas de Concón, Quintero y Puchuncaví. Pues bien, con el cambio de gobierno y con la poco creíble justificación que se necesitaba mayor participación ciudadana, se dejó de elaborar el plan, se decidió implementar un Programa y para comenzar a hacerlo, se contrató a una empresa experta, con el fin de lograr estos acuerdos.
¿Y a quién se eligió para sistematizar este proceso? A Fundación Chile empresa que naciera con capitales de la ITT en los inicios de la dictadura militar y cuyos socios son hoy el estado de Chile y la transnacional minera BHP Billiton.
¿Una minera y el gobierno de Chile encargados de moderar y sistematizar acuerdos para, entre otras cosas, de una vez por todas cese la contaminación de la Fundición de Ventanas de Codelco?
¡Por favor!
Si de descontaminar se trata, hoy fecha en la que conmemoramos el Día Mundial del Medio Ambiente, que se comience por cumplir con las débiles leyes y normativa que tenemos y se opte por mejorarlas. Y se escuche de verdad a la gente de manera seria y vinculante, duélale a la empresa que le duela.

Cristian Opaso, Fundación Terram - Imagen: www.nodal.am

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