Shell, Gazprom y la Fundación Clinton lucran con el mercado de compensación de emisiones




Autor: David Avendaño


Algunas de las mayores empresas del mundo en petróleo, minería, automoción y gas ganarán millones de dólares gracias a los planes de protección forestal impulsados por la ONU, según un informe de Amigos de la Tierra Internacional.

Según el IPCC, al menos un 20% del total de las emisiones de gases de efecto invernadero proceden de la deforestación. Para reducir esa cifra, la ONU creó el Programa REDD asignando a los bosques un valor monetario calculado en su capacidad de almacenar carbono. Así, culquiera puede ‘comprar’ un bosque, obteniendo a cambio derechos de emisión de carbono que puede usar o revender a un precio que se fija en los mercados bursátiles y que ahora está en torno a los 10 dólares por tonelada de emisión.

Un ejemplo, Shell se unió a Gazprom y la Fundación Clinton para invertir en el proyecto de Rimba Rey, un cenagal turbero de 100.000 hectáreas en Indonesia. Proteger este terreno evitará supuestamente la emisión de 75 millones de toneladas de carbono a la atmósfera durante 30 años. Por tanto, el trío inversor podrá vender derechos por valor de 750 millones de dólares. El resultado es que la contaminación será finalmente producida en algún otro lugar del mundo y las empresas, en este caso petrolíferas, ganarán una fortuna por no hacer nada. Especulación ‘verde’.

¿Y los bosques serán protegidos? Lamentablemente, tampoco. Si ya el sistema sienta las bases para privatizar los bosques y selvas, como advierte Amigos de la Tierra, amenzando claramente la supervivencia de las poblaciones indígenas, que no serían propietarios de sus tierras, el sistema esconde una trampa mortal.

Para ilustrar esta trampa, un ejemplo que ya ha sucedido: de nuevo en Indonesia, la corporación Sinar Mas taló bosques primarios provocando una severa destrucción ecológica. A continuación, usó la tierra que ella misma arrasó para plantar palma aceitera. A cambio, por la reforestación, recibió derechos de compensación. Más carbono vertido a la atmósfera, una selva convertida en terreno de cultivo y más dinero para los contaminadores. Un sistema perfecto para seguir destrozando el planeta con una pretexto ‘verde’.

Y aún hay un tercer vericueto legal que permitirá a las motosierras seguir su labor: las definiciones de ‘bosque’ y ‘terreno degradado’. La ambigüedad y subjetividad de la interpretación de cuando el uno se ha convertido en el otro queda al arbitrio de los gobiernos. Si deciden declarar que una selva está deteriorada y le rebajan la calificación a ‘terreno degradado’, podrá ser talada a conciencia y replantada con… palma aceitera. Y cobrar los derechos de emisión, como hizo Sinar Mas. ¿Nos ponemos a contar los gobiernos que no serían honestos con la calificación de sus bosques? Greenpeace ya ha denunciado a Indonesia por usar esta triquiñuela que le reportaría 1000 millones de dólares.

En el COP16 de Cancún éste será uno de los temas candentes que deberán ratificarse, aunque hay que tener pocas esperanzas de que los acuerdos que allí se cierren sean hechos realmente en pro de mejorar el mundo. Más al contrario, una de las prioridades de EEUU es lograr que la administración del Fondo Mundial para el Clima (el que gestiona el dinero que se concede a los países en desarrollo para evitar que contaminen) sea cedida al Banco Mundial. Y ya sabemos quiénes manejan los hilos de este organismo. Por si nadie había recaído en ello, la misión americana en Cancún cae bajo la responsabilidad de Hillary Clinton. ¿Recuerdan el trío que iba a ganar 750 millones vendiendo emisiones? La Fundación Clinton, entre ellos.

Poco tiene que ver con las selvas tropicales este tierno bosque, pero la máquina que lo tala es tan terriblemente eficiente que ilustra perfectamente la velocidad con que arrasamos lo que tarda años en crecer:


Ilustraciones: Evolución de los precios de los derechos de emisión de CO2

Evolución de las zonas selváticas de la Isla de Borneo

http://www.laaldeaglobal.com/category/medio-ambiente/

Entradas populares de este blog

Científicos declaran oficialmente el fluoruro (flúor) como una neurotoxina

Francia: ‘Mi orina contiene glifosato, ¿y la tuya?’ Denuncia contra el polémico herbicida

Japón decidió deshacerse de todos los hornos de microondas en el país antes de finales de este año