COP29 HiCOPresía
Cómo aprovecha Europa la cumbre del clima para renombrar el gas «sostenible» de Azerbaiyán: Tras presionar a Azerbaiyán para que aumente la producción de gas destinado a la exportación, la UE aprovecha la COP29 para “maquillar de verde el combustible fósil y su propia imagen climática”. A partir de documentos inéditos, analizamos la hipocresía de la UE, cuyos objetivos climáticos y de defensa de los derechos humanos se ven superados por las exigencias de seguridad energética y el lavado verde.
Corporate Europe
La COP29 de Azerbaiyán estará repleta de combustibles fósiles, pero no necesariamente por las razones obvias. Celebrada en un Estado petrolero en el que el 90% de las exportaciones son combustibles fósiles, la historia que se oye habitualmente en los medios de comunicación y en la sociedad civil mundial es que el régimen autoritario planea aumentar su producción de gas en un tercio durante la próxima década. Recientemente se descubrió que Elnur Soltanov, director ejecutivo de la COP29, utilizaba su cargo para discutir posibles acuerdos futuros sobre petróleo y gas. Mientras tanto, su Presidente, Ilham Aliyev, ha calificado las reservas de combustibles fósiles del país de «regalo de los dioses».
Sin embargo, oímos hablar mucho menos del principal cliente de Aliyev: los Estados miembros de la Unión Europea. Aunque proclama públicamente su propia eliminación progresiva de los combustibles fósiles, la UE está impulsando de hecho la expansión del gas de Azerbaiyán -y encubriendo los abusos de los derechos humanos en el país- en nombre de la seguridad energética nacional. Es el resultado de la búsqueda de fuentes alternativas al gas ruso tras la invasión de Ucrania. La UE intenta justificar su hipocresía diciendo al mundo que el gas fósil azerí puede etiquetarse como «de bajas emisiones». Y qué mejor lugar para contar esa historia que la COP29, si tan sólo consiguiera que Azerbaiyán aceptara.
A través de documentos obtenidos mediante solicitudes de libertad de información, Corporate Europe Observatory expone cómo la UE presionó con éxito a Azerbaiyán para que se adhiriera al Compromiso Mundial Voluntario sobre el Metano (el metano es un potente gas de efecto invernadero que constituye entre el 70 y el 90 % del gas fósil), y ahora planea utilizar la COP29 para mostrar su compromiso con la reducción de las fugas de metano. De este modo, la UE puede afirmar que sus importaciones de gas fósil son «menos contaminantes», mientras que Soltanov puede afirmar que su país produce «petróleo y gas sostenibles». La hipocresía climática de la UE está presente en toda la cumbre de la ONU.
Soñando con el gas azerí «menos contaminante»
El gas fósil se compone principalmente de metano, un potente gas de efecto invernadero más de 80 veces peor para el calentamiento global que el dióxido de carbono en un periodo de 20 años. El metano se filtra a la atmósfera durante la perforación, el transporte y el almacenamiento del gas fósil, lo que significa que su uso puede ser tan perjudicial para el clima como quemar carbón, o incluso peor cuando se licua y se transporta.
Una investigación publicada en 2021 demostró que para mantener el aumento medio de la temperatura global por debajo de 1,5 ºC, tal y como se acordó en el Acuerdo de París, la mayoría de las reservas conocidas de combustibles fósiles deberían dejarse bajo tierra. Ese mismo año, la Agencia Internacional de Emisiones (AIE) afirmó que, para cumplir los compromisos del Acuerdo de París, no deberían construirse nuevas infraestructuras de combustibles fósiles. Por tanto, la UE no debería haber pedido a Azerbaiyán que duplicara sus exportaciones y ampliara el gasoducto a Europa, como hizo en 2022 tras la invasión rusa de Ucrania.
Para cuadrar el círculo, la UE necesitaba que Azerbaiyán se adhiriera al Compromiso Global sobre el Metano, de carácter voluntario, y que la petrolera nacional SOCAR se sumara a su Asociación 2.0 sobre el Metano en el Petróleo y el Gas, específica del sector (véase el Epígrafe 1: El Compromiso Global sobre el Metano). En lugar de planificar la eliminación progresiva de la producción de gas, podrían acordar reducir las fugas al tiempo que aumentan la producción, simplemente adhiriéndose a un plan voluntario dependiente de los autoinformes de la industria sin supervisión independiente. De ser así, la UE podría etiquetar el gas azerí como de «bajas emisiones» y afirmar que estaba cumpliendo sus objetivos climáticos y siendo coherente con el Acuerdo de París.
La UE lleva presionando para que Azerbaiyán se una al Compromiso Global sobre el Metano (GMP) desde al menos 2022, pero sin éxito. Cuando ambos anunciaron que duplicarían la capacidad del controvertido megaseoducto del Corredor Meridional de Gas (SGC) de Bakú a Italia,1 la Presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, declaró: «Animo encarecidamente a Azerbaiyán a que se adhiera [al GMP]», para que la UE sea «coherente con nuestras responsabilidades sobre el clima».
Cuando se anunció que Bakú acogería la COP29 en diciembre de 2023, las cosas se habían vuelto más urgentes. La inminente legislación de la UE sobre emisiones de metano exigiría que todos los países exportadores tuvieran normas similares a las de la UE, por lo que era realmente necesario que Azerbaiyán y SOCAR se adhirieran.
Creación de un mercado para el gas de bajas emisiones
A finales de febrero de 2024, la Comisión Europea hizo una propuesta concreta de actividades conjuntas en la COP29. Además de ofrecer un Diálogo Ministerial sobre la triplicación del despliegue de energías renovables y la duplicación de la eficiencia energética (acordado en la COP28), que parecía formar parte de un esfuerzo más amplio para «reverdecer» la imagen de Azerbaiyán, sobre el metano los dos «podrían tener una historia de liderazgo conjunto que contar» durante las negociaciones y podrían «mostrar la cooperación y el progreso… en el marco del Compromiso Global sobre el Metano». En la propuesta, la UE afirmaba que la adhesión podría abrir nuevas oportunidades financieras para Azerbaiyán: «La UE aspira a establecer un mercado global para el petróleo y el gas con menos emisiones» en el que aquellos que tomen medidas «sean recompensados por el mercado» gracias a que los importadores como la UE elijan de quién importan «en función del impacto medioambiental» (ver imagen inferior).
Cualquiera que lea este documento podría pensar que la UE está incentivando la producción azerbaiyana de petróleo y gas al afirmar que podría obtener una prima gracias a los PGE. La UE parece haberse convencido a sí misma de que, al adherirse a un compromiso voluntario sobre el metano basado en la desacreditada autodeclaración de la industria para abordar las fugas a corto plazo (véase más abajo: El Compromiso Mundial sobre el Metano), la producción de gas pasaría a ser respetuosa con el medio ambiente, y ahora su importación se alinearía con los objetivos climáticos mundiales.
En realidad, el GMP proporciona un brillo verde a empresas como SOCAR, BP y el operador italiano de gasoductos Snam -todos ellos accionistas del Corredor Meridional de Gas- mientras siguen perforando en busca de gas o transportándolo. Estas empresas pueden utilizar esta nueva legitimidad para afirmar que son parte de la solución y que tienen un lugar en la mesa, incluso definiendo lo que es y lo que no es una eliminación progresiva de los combustibles fósiles, y asegurándose de que no significa actuar hoy.
En la COP28 del año pasado, a la que asistió un número récord de grupos de presión de los combustibles fósiles, se acordó «abandonar los combustibles fósiles». Pero según el ex Comisario de Energía de la UE Andris Piebalgs, que ha estado muy implicado en los planes de la UE sobre el metano, así como en el Observatorio Internacional de Emisiones de Metano (IMEO), ese compromiso en realidad nunca significó detener la producción inmediatamente. Más bien significaba que la industria del petróleo y el gas debía reducir rápidamente sus emisiones de metano atajando las fugas.
De cerca
Pocos días después de enviar la propuesta de actividades conjuntas, la Comisión Europea prosiguió su campaña de presión en persona en la Conferencia Anual de Aplicación OGMP 2.0 celebrada en Madrid. Organizada por Repsol, la conferencia reunió a representantes de más de 125 productores de petróleo y gas y a reguladores nacionales y regionales. Los documentos revelan que la Comisión invitó expresamente a la conferencia a una persona del Departamento de Energía de Azerbaiyán (cuyo nombre se ha suprimido) para que ejerciera presión sobre ellos. Azerbaiyán anunció su adhesión al GMP inmediatamente después de la conferencia. Durante su estancia en Madrid, la Comisión también trabajó sobre SOCAR, a cuyo vicepresidente ofreció «apoyo político» si la empresa se unía al OGMP 2.0, además de proponer la COP29 «como lugar para seguir trabajando sobre el metano». Las actas de una llamada realizada en mayo de 2024 entre la Comisión y el Viceministro de Energía Orkhan Zeynalov (que sustituyó a Mukhtar Babayev cuando éste se convirtió en Presidente designado de la COP29) revelan que SOCAR se adhirió posteriormente, haciéndose pública la noticia ese mismo mes de agosto.
Llevarlo a la COP
Con la adhesión de Azerbaiyán y SOCAR al GMP y al OGMP 2.0 respectivamente, la primera parte del plan de la UE había concluido. La siguiente fase consistía en hacer de la COP29 el escenario en el que mostrar su gas «menos contaminante» para justificar la expansión de las importaciones.
«Aparte de su papel en la COP29, Babayev es Ministro de Ecología y, como tal, responsable directo de la acción nacional sobre el metano»
Informe de la Comisión Europea preparado para el Director General Juul Jørgensen
La Comisión Europea ya había identificado al Presidente de la COP29, Mukhtar Babayev -que pasó 24 años en SOCAR-, como su hombre clave en materia de metano. «Aparte de su papel en la COP29, Babayev es Ministro de Ecología y, como tal, está directamente a cargo de la acción nacional sobre el metano», decía un informe preparado para la Directora General de la DG de Energía, Juul Jørgensen, antes de su reunión con Babayev a finales de junio de 2024. Durante su encuentro en la Mansion House de Londres, la UE volvió a insistir en que Azerbaiyán (y SOCAR) tenían «una gran historia energética que contar».
La propuesta concreta de la UE fue que SOCAR, «como nuevo miembro», organizara una mesa redonda de directores ejecutivos de OGMP 2.0 en la COP29, con el apoyo de la UE y del Observatorio Internacional de Emisiones de Metano (IMEO – véase el Epígrafe 1: El Compromiso Mundial sobre el Metano). También ofrecieron a Azerbaiyán la oportunidad de mostrar sus planes en la Reunión Ministerial del GMP, un prestigioso evento (véase la imagen de abajo). Según las notas de la reunión, Babayev encontró las propuestas «muy interesantes».
Para que su plan funcionara, la UE necesitaba que Azerbaiyán apostara fuerte por la reducción de las emisiones de metano procedentes del petróleo y el gas en la COP29 y defendiera públicamente las iniciativas. A pesar de algunas reticencias iniciales, el plan parece haber tenido éxito. En la reunión de junio, Babayev recalcó a Jøregensen que el metano sería «una prioridad clave en los debates previos y durante la COP». Desde reuniones ministeriales de alto nivel y actos técnicos con la AIE hasta conferencias y presentaciones de BP y SOCAR durante la Semana de Acción por el Clima de Bakú, la lucha contra el metano procedente de la industria del petróleo y el gas se convirtió en un tema clave en los preparativos de la COP29. En la propia COP, el GMP estará muy presente a través de más actos de alto nivel y reuniones ministeriales organizadas por su secretaría, gracias en parte a la UE y a sus esfuerzos con Azerbaiyán.
Cabe destacar que, mientras que la Dirección General de Clima de la UE (DG CLIMA) lidera las negociaciones globales, con el mandato de perseguir una «eliminación progresiva de la energía procedente de combustibles fósiles», ha sido la Dirección General de Energía (DG ENER) la que ha liderado muchas de las actividades de la COP29 centradas en la aplicación de decisiones previas de la COP, así como la carga de presión del GMP. De hecho, ha estado a cargo el mismo Grupo de Trabajo (TF3) encargado de encontrar nuevos suministros de gas tras la invasión rusa de Ucrania. Los documentos muestran que en las reuniones para planificar las actividades de la COP29, el TF3 también discutía las licitaciones para nuevos suministros a través del Corredor Meridional de Gas. Por parte azerí, el Vicepresidente de SOCAR también estuvo presente en múltiples llamadas entre TF3 y el Ministerio de Energía, en las que se discutían los planes de la COP29 y los suministros de gas de la UE. La COP29 siempre iba a girar en torno a los combustibles fósiles, a pesar de los esfuerzos de la DG ENER por reorientar su relación con Azerbaiyán hacia las energías limpias.
HiCOPresía de la historia de la UE en la COP29
En Bakú, la UE contará al mundo su historia sobre la transición hacia el abandono de los combustibles fósiles. Tiene previsto organizar una mesa redonda ministerial sobre el tema en la COP29, en la que compartirá sus lecciones sobre «el valor añadido de una transición que sea justa, equitativa, segura y asequible »2
En lugar de defender su propio abandono rápido de los combustibles fósiles y ayudar a Azerbaiyán a hacer lo mismo, la UE está presionando al país para que aumente la producción etiquetando su gas como «de bajas emisiones». Como es lógico, Azerbaiyán ha seguido su ejemplo. Cuando el director ejecutivo de la COP29, Soltanov, fue grabado en secreto por periodistas encubiertos que se hacían pasar por inversores energéticos ficticios, les ofreció participar en un acto sobre «inversiones sostenibles en petróleo y gas» a cambio de patrocinar las conversaciones. También se le grabó diciendo que el gas era un «combustible de transición» y que la COP29 consistía en «abandonar los hidrocarburos de forma justa, ordenada y equitativa». Todas estas son cosas que la UE ha normalizado.
La UE afirma que está abandonando los combustibles fósiles a medio plazo, pero sus necesidades de seguridad energética a corto plazo están encerrando a otros países en décadas más de producción de combustibles fósiles. Éste es el caso de Azerbaiyán, donde la ampliación de las perforaciones de gas y del Corredor Meridional de Gas (si se lleva a cabo) requiere inversiones a largo plazo3, aunque la UE no esté dispuesta a pagar la factura (véase el Epígrafe 2: ¿Puede Azerbaiyán satisfacer la demanda europea de gas?). También será el resultado de la «carrera por el gas» de la UE en África. Esto no sólo mantiene las relaciones neocoloniales basadas en el extractivismo energético, la externalización de las emisiones y los impactos localizados, sino que también frena las transiciones en otros lugares. Y dado que las emisiones en cualquier lugar tienen un impacto en todas partes, parece especialmente miope y contraproducente en la lucha contra el cambio climático, una lucha que la UE debería liderar dado su papel histórico como uno de los mayores contribuyentes a la acumulación de gases de efecto invernadero en la atmósfera. La UE está socavando aún más la transición hacia una energía limpia, tanto a nivel nacional como mundial, al legitimar el papel de la industria de los combustibles fósiles en su configuración. Esto se hace mediante la defensa de iniciativas voluntarias ineficaces como el GMP y el OGMP 2.0 (véase el Epígrafe 1: El Compromiso Global sobre el Metano), así como llevándolas físicamente a las conversaciones sobre el clima. El año pasado, la UE y sus Estados miembros llevaron a más de 130 grupos de presión de combustibles fósiles a la COP28, y la propia Comisión Europea invitó a altos ejecutivos de BP, Eni y Exxon. Este año, cientos de grupos han escrito a los gobiernos europeos para pedirles que no traigan a grupos de presión de combustibles fósiles a la COP29.
El escaso interés de Europa por asegurarse el acceso al gas azerbaiyano también ha supuesto encubrir el régimen autoritario de Ilham Aliyev y su familia. Según Freedom House, Azerbaiyán es uno de los países menos libres del mundo, y los que se manifiestan son encarcelados (véase el Epígrafe 2: ¿Puede Azerbaiyán satisfacer las demandas europeas de gas?). Su «extrema represión de la ciudadanía» no ha hecho más que empeorar con la celebración de la COP29. Sin embargo, la Comisión Europea sigue refiriéndose públicamente a Azerbaiyán como su socio «digno de confianza», «fiable» o «importante», incluso después de que limpiara étnicamente la región de Nagorno-Karabaj a finales de 2023.
Conclusión
Gracias a sus esfuerzos de presión a lo largo de todo el año, la Unión Europea ha conseguido convertir la COP29 en el escenario perfecto para renombrar el gas azerbaiyano como «de bajas emisiones» en el marco de la Asociación Mundial del Metano y, de este modo, maquillar de verde sus propias importaciones de gas. Pero con ello no sólo se ha puesto a la industria del petróleo y el gas en condiciones de definir el ritmo y la escala de la transición para abandonar los combustibles fósiles, sino que se ha permitido a los anfitriones de la COP29 y al resto de los que forman parte de la Asociación Metano Petróleo y Gas 2.0 etiquetar su producto como «petróleo y gas sostenibles».
Al intentar cuadrar el círculo entre sus necesidades de seguridad energética a corto plazo y sus objetivos climáticos, la UE ha abierto una puerta que puede que no vuelva a cerrarse fácilmente, sobre todo con la elección de Donald «drill, baby, drill» Trump. Ha inaugurado una nueva era de expansionismo de los combustibles fósiles con una fachada verde que debería dañar irreparablemente su credibilidad como líder climático, así como defensor de los derechos humanos. Sin embargo, dada la atención que los principales medios de comunicación y la sociedad civil prestan a las payasadas descaradamente favorables a los combustibles fósiles del líder autoritario de Azerbaiyán, es posible que la UE salga con su reputación intacta. Mientras fluya el gas y lleguen los beneficios, el Presidente Aliyev estará más que encantado de soportar las críticas, deteniendo arbitrariamente a los y las opositoras nacionales que se atrevan a alzar la voz.
Epígrafes:
1 El compromiso mundial sobre el metano La Unión Europea y Estados Unidos lanzaron el Compromiso Global sobre Metano (GMP, por sus siglas en inglés) voluntario en la COP26 de 2021, con el objetivo de reducir las emisiones de metano en un 30% para 2030 en comparación con los niveles de 2020. En marzo de 2024, 158 países lo habían firmado. Un elemento clave es la Oil and Gas Methane Partnership (OGMP) 2.0, un marco voluntario de autoinformes para la industria, que proporciona los datos al Observatorio Internacional de Emisiones de Metano (IMEO) dirigido por el PNUMA. Estas medidas se consideran fundamentales para aplicar el GMP, pero han sido objeto de duras críticas.La Agencia Internacional de la Energía (AIE) ha demostrado que la autodeclaración ha subestimado enormemente las emisiones de metano, con cifras reales un 70% superiores a las oficiales. Mientras tanto, la sociedad civil ha criticado al IMEO por su dependencia y sus estrechos vínculos con las empresas petroleras y gasísticas a las que se supone que debe verificar, así como por una falta total de transparencia que da aún más poder a la industria para informar de lo que quiera, afirmando que está deteniendo las fugas mientras aumenta la producción.Antes de la COP28 en Dubai, la Agencia de Investigación Medioambiental afirmó que el GMP «no está cumpliendo», mientras que los niveles de metano en la atmósfera «han seguido aumentando a un ritmo sin precedentes».
2 ¿Puede Azerbaiyán satisfacer la demanda europea de gas? Tras la invasión rusa de Ucrania en febrero de 2022 y la decisión de encontrar fuentes alternativas de gas, la UE se dirigió a Bakú. El Memorando de Entendimiento (MoU) firmado en julio de ese año acordó duplicar la capacidad del Corredor Meridional de Gas (SGC) de 10.000 a 20.000 millones de metros cúbicos al año para 2027. En la actualidad, el SGC abastece a ocho países europeos, pero otros se están uniendo.4 Para satisfacer la demanda, SOCAR se ha comprometido públicamente a aumentar la producción en un tercio, y Aliyev afirma que es «porque Europa necesita más».Sin embargo, en 2022 el prestigioso economista azerbaiyano especializado en energía Gubad Ibadoghlu puso en duda este compromiso, afirmando que «probablemente no habrá un aumento significativo de la producción en Azerbaiyán antes del final de la década actual», y cuestionando también que la ampliación de las infraestructuras necesarias se completara a tiempo, ya que aún no se han asegurado las inversiones, y mucho menos comenzado, debido a que la UE se niega a firmar contratos a largo plazo5
Aliyev ha calificado las afirmaciones que cuestionan la capacidad de su país para abastecer a Europa de «absolutamente infundadas» y parte de una campaña para socavar a Azerbaiyán. Un año después, Ibadoghlu fue detenido por cargos falsos y, en el momento de redactar este informe, seguía encarcelado.
Azerbaiyán ya tiene dificultades para cumplir sus compromisos de exportación a Europa. A finales de 2022 empezó a comprar gas ruso para cubrir su consumo interno mientras exportaba su propio gas a Europa, lo que se conoce como intercambio de gas. Esto también puede resultar necesario para satisfacer la futura demanda europea, ya sea un intercambio de gas o simplemente la reventa de gas ruso. Esto socavaría el objetivo fundamental de abastecerse de gas de Azerbaiyán: alejarse del gas ruso y no proporcionarle fondos para continuar la guerra en Ucrania.
Aunque Azerbaiyán ha hecho algunos ruidos acerca de la construcción de energías renovables para sustituir el gas a nivel nacional, existe la preocupación de cómo este movimiento es parte del «lavado verde» de la limpieza étnica de la región de Nargono-Karabakh que se promociona en la COP29 como una «Zona de Energía Verde».
Notas a pie de página
1 El Corredor Meridional de Gas se extiende a lo largo de 3.200 km desde Azerbaiyán hasta Italia, pasando por Georgia, Turquía, Grecia y Albania. A pesar de haber sido tachado de desastre para el clima y los derechos humanos, con protestas generalizadas a lo largo de la ruta propuesta, se completó y comenzó a transportar gas comercialmente en 2019. https://counter-balance.org/news/the-sou
2 En su propuesta inicial a Azerbaiyán para realizar actividades conjuntas en la COP29, la UE sugirió establecer un diálogo mundial sobre la transición hacia el abandono de los combustibles fósiles. Se ofreció a contribuir «desde la perspectiva de un bloque que está legalmente obligado a lograr la neutralidad climática para 2050, que cuenta con medidas políticas para facilitar una profunda descarbonización en esta década crucial, que está trabajando para lograr un mayor compromiso para la próxima década, y que se está comprometiendo con vecinos y socios clave, incluida la República de Azerbaiyán, para promover sinergias en nuestros respectivos enfoques. El diálogo es una oportunidad para subrayar el valor añadido de una transición que sea justa, equitativa, segura y asequible».
3 El Corredor Meridional de Gas original se completó con contratos en vigor de 25 años con compradores europeos: https://www.euractiv.com/section/azerbaijan/opinion/why-southern-gas-corridor-is-a-chance-for-energy-efficiency/. El Oxford Institute of Energy Studies predice que los inversores necesitarán contratos a largo plazo de al menos 10-15 años para financiar la ampliación del Corredor Meridional de Gas: https://www.oxfordenergy.org/wpcms/wp-content/uploads/2024/01/Expansion-of-the-Southern-Gas-Corridor-NG180.pdf.
4 Italia es el mayor comprador, y Grecia, Bulgaria, Rumanía, Hungría, Serbia, Eslovenia y Croacia reciben gas. Aliyev anunció tres países más, sin especificar cuáles: www.bloomberg.com/news/articles/2024-09-06/azerbaijan-in-talks-to-send-gas-to-three-more-european-countries
5 A pesar de presionar a Azerbaiyán para que produzca y exporte más gas, la UE se niega a firmar los contratos de gas a largo plazo que permitirían obtener capital, alegando que hacerlo sería incompatible con sus objetivos climáticos, y que «corresponde a las empresas y no a los gobiernos nacionales» financiar el SGC www.ft.com/content/99772c5e-6506-4331-82f3-90d9b6911ed5. Aliyev ha pedido a la UE que «ponga fin a esta hipocresía» https://president.az/en/articles/view/66533 - Fuente: Planeta azalea.org - Imaghen de portada: Presidente Aliyev. (Ilustración: Gil Wannalertsiri, Freedom House)