Riesgo elevado de un segundo terremoto en Japón superior a los 7 grados en los próximos días
Japón es un país devastado que no puede dejar atrás la ansiedad, el miedo a seguir soportando catástrofes. A la amenaza nuclear se le suma, ahora, el peligro de un segundo gran terremoto, tras fuertes réplicas y el gran temblor sufrido ayer.
La pesadilla parece no tener fin. Una rara sensación flota en el ambiente, de consternación por lo ocurrido mezclada con un gran temor ante lo que pueda pasar. ¿Y qué puede pasar ya, después del megaterremoto de 9.0 grados Richter y del brutal tsunami que noqueó al país el viernes pasado? No sólamente se teme una explosión en varias plantas nucleares, con el efecto radioactivo que eso supondría, al estilo de la catástrofe de Chernobil. Además, ante las fuertes réplicas que se están registrando, el fuerte temblor de esta mañana y la sacudida de 6.2 grados de este domingo en Honshu, la Agencia Meteorológica de Japón ha advertido hoy que existe una alta posibilidad de que el país sufra un seísmo en los próximos días que supere los 7.0 grados.
Las probabilidades de que esto suceda son del 70 por ciento, concretamente, se espera que suceda entre el 13 y el 16 de marzo por la mañana. De acuerdo con datos de la Agencia Meteorológica de Japón, réplicas de entre 2.0 y 5.3 grados en la escala Richter han sido incesantes, por lo que sería una temeridad bajar la guardia.
Si el miércoles no se ha producido este segundo terremoto, las probabilidades de que ello ocurra bajarán al 50 por ciento. Hay que cruzar los dedos, pero quizás haga falta algo más que suerte para conjurar el peligro.
Acostumbrados a sufrir los embates de la naturaleza, los japoneses están, sin embargo, traumatizados ante este cúmulo de desastres. Hasta ahora, se han contabilizado casi 1.600 muertos, más de 1.400 heridos, hay centenares de miles de evacuados y miles de personas permanecen aisladas.
Vía | www.lefigaro.fr Fotografía | Generationbass.com
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El terremoto en Japón movió la línea costera del país y alteró el balance del planeta
El terremoto que sacudió la costa noreste de la isla de Honshu del archipiélago japonés, movió la línea costera y provocó que las estaciones de posicionamiento global más cercanas al epicentro se moviesen hacia el este hasta casi cuatro metros. De acuerdo con Ross Stein, geofísico del Servicio Geológico de Estados Unidos citado por The New York Times, Japón es ahora más ancho que antes.
Como explica el diario, la zona cercana al epicentro se asienta sobre la placa tectónica de América del Norte, que cubre América del Norte, una parte del océano Glacial Ártico y el territorio siberiano al este de la Cordillera Verkhoyansk, en el norte de la Rusia asiática. La placa del Pacífico, que abarca la mayor parte del océano Pacífico y es la placa más grande del planeta, se está moviendo alrededor de 3,5 centímetros al año en dirección oeste-noroeste, y en ese movimiento se sumerge bajo la placa de América del Norte.
La mayoría de las veces, las dos placas tectónicas están pegadas y la placa de América del Norte es comprimida. A medida que esta compresión aumenta, la placa se dobla hacia arriba y la parte oriental de Japón es empujada lentamente hacia el oeste. Pero cuando el terremoto liberó la tensión acumulada por esta compresión, la tierra dio un salto atrás, hacia el este. El terremoto también desplazó el eje de figura de la Tierra, que es el eje alrededor del cual la masa de la Tierra está equilibrada.
Richard S. Gross, científico de la NASA, dijo que sus cálculos indican un cambio de 6,5 pulgadas en donde el eje de figura se cruza con la superficie del planeta. Así, ese eje de figura está ahora cerca del eje rotacional alrededor del que gira la Tierra, pero no exactamente alineado con éste. La rotación del planeta se aceleró debido al movimiento de su masa, lo que provocó que la duración del día 11 de marzo se redujese 1,8 millonésimas de segundo.
