Los graves perjuicios que ocasiona la liberación de especies exóticas en los ecosistemas
Estas especies pueden llegar de forma accidental e indirecta, pero también de forma intencionada a través de una mala práctica de ciertas actividades de caza y pesca, o de personas que compran animales exóticos para tenerlos como mascotas y pasado un tiempo deciden abandonarlos en el medio natural, como las cotorras argentinas o los galápagos de Florida.
La Dirección General de Medio Ambiente española, recuerda la importancia de evitar la introducción y puesta en libertad en espacios naturales de especies exóticas invasoras, que pueden ocasionar graves perjuicios a la biodiversidad, hábitats y ecosistemas de la Región, así como a ciertos aspectos de la economía, relacionados con la producción agrícola, ganadera y forestal.
Su impacto en el ambiente es grave, ya que puede perjudicar la estabilidad del entorno natural, pues pasado un cierto tiempo consiguen adaptarse al medio y colonizarlo, de forma que acaban desplazando a las especies autóctonas. El Boletín Oficial del Estado publicó este verano el Real Decreto 630/2013, de 2 de agosto, por el que se regula el Catálogo español de especies exóticas invasoras, que detecta las especies que presentan un mayor peligro para la biodiversidad y establece las medidas para prevenir su introducción, su control y posible erradicación.
CAPTURA DE UNA TORTUGA MORDEDORA
El personal técnico del Centro de Recuperación de Fauna Silvestre de El Valle, dependiente de la Consejería de Presidencia, capturó recientemente un ejemplar de tortuga mordedora americana (Chelydra serpentina) de grandes dimensiones en el cauce del canal de El Reguerón, próximo a la pedanía murciana de San José de la Vega.
El animal pesaba 16,5 kilogramos y su caparazón tenía un longitud de 43 centímetros. La exploración clínica desveló una fractura abierta en la parte delantera del caparazón que afectaba a la columna vertebral y una hipotermia marcada, al tiempo que los análisis mostraban un cuadro de anemia severa por hemorragia, debido a la fractura, y una infección avanzada.
Así, se trata de una especie exótica invasora que habita en zonas de aguas abundantes, sobre todo en fondos lodosos con mucha vegetación, que procede de zonas situadas entre el sur de Canadá y la costa tropical de Ecuador.
Se caracteriza por tener un caparazón aplanado con escudos dorsales rugosos y borde dentado, de color verde aceitunado y con una longitud de 50 a 60 centímetros. El plastrón es pequeño, en forma de cruz, con puente muy estrecho y de color amarillo.
Finalmente, tiene una cabeza voluminosa, un hocico en forma de pico, con mandíbula potente, y unas patas robustas y cola gruesa y larga. Cuando alcanzan mayor tamaño son animales de difícil manejo por su fuerza, rapidez y agresividad, capaces de lanzar un mordisco en segundos.
ep - Enviado por: ECOticias.com
La Dirección General de Medio Ambiente española, recuerda la importancia de evitar la introducción y puesta en libertad en espacios naturales de especies exóticas invasoras, que pueden ocasionar graves perjuicios a la biodiversidad, hábitats y ecosistemas de la Región, así como a ciertos aspectos de la economía, relacionados con la producción agrícola, ganadera y forestal.
Su impacto en el ambiente es grave, ya que puede perjudicar la estabilidad del entorno natural, pues pasado un cierto tiempo consiguen adaptarse al medio y colonizarlo, de forma que acaban desplazando a las especies autóctonas. El Boletín Oficial del Estado publicó este verano el Real Decreto 630/2013, de 2 de agosto, por el que se regula el Catálogo español de especies exóticas invasoras, que detecta las especies que presentan un mayor peligro para la biodiversidad y establece las medidas para prevenir su introducción, su control y posible erradicación.
CAPTURA DE UNA TORTUGA MORDEDORA
El personal técnico del Centro de Recuperación de Fauna Silvestre de El Valle, dependiente de la Consejería de Presidencia, capturó recientemente un ejemplar de tortuga mordedora americana (Chelydra serpentina) de grandes dimensiones en el cauce del canal de El Reguerón, próximo a la pedanía murciana de San José de la Vega.
El animal pesaba 16,5 kilogramos y su caparazón tenía un longitud de 43 centímetros. La exploración clínica desveló una fractura abierta en la parte delantera del caparazón que afectaba a la columna vertebral y una hipotermia marcada, al tiempo que los análisis mostraban un cuadro de anemia severa por hemorragia, debido a la fractura, y una infección avanzada.
Así, se trata de una especie exótica invasora que habita en zonas de aguas abundantes, sobre todo en fondos lodosos con mucha vegetación, que procede de zonas situadas entre el sur de Canadá y la costa tropical de Ecuador.
Se caracteriza por tener un caparazón aplanado con escudos dorsales rugosos y borde dentado, de color verde aceitunado y con una longitud de 50 a 60 centímetros. El plastrón es pequeño, en forma de cruz, con puente muy estrecho y de color amarillo.
Finalmente, tiene una cabeza voluminosa, un hocico en forma de pico, con mandíbula potente, y unas patas robustas y cola gruesa y larga. Cuando alcanzan mayor tamaño son animales de difícil manejo por su fuerza, rapidez y agresividad, capaces de lanzar un mordisco en segundos.
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