Maldito CO2
El documento destaca que precisamente el sector alimentario es uno de los más afectados por los efectos del cambio climático a escala global y, a su vez, es responsable del 25 por ciento de las emisiones de CO2 y del 70 por ciento del consumo de agua.
Las emisiones de dióxido de carbono (CO2) aumentaron en un 14 por ciento desde 1990 en España mientras que se redujeron en un 19 por ciento en el conjunto de Europa, según un estudio presentado este miércoles por ESADE y la Caja de Ingenieros, que apunta que las señales del cambio climático son cada vez más visibles y que probablemente se agudizarán en las próximas décadas. El trabajo 'La transición hacia una economía baja en carbono. Una mirada sobre El sector financiero y el sector alimentario', elaborado por el Instituto de Innovación Social de ESADE en colaboración con Fundación Caja de Ingenieros, señala que los fondos de inversión socialmente responsable (ISR) es una tendencia al alza en el sector financiero en España solo están domiciliados 16 fondos ISR, el 1% de Europa. El documento destaca que precisamente el sector alimentario es uno de los más afectados por los efectos del cambio climático a escala global y, a su vez, es responsable del 25 por ciento de las emisiones de CO2 y del 70 por ciento del consumo de agua. Además, el estudio muestra como el sector financiero considera que el cambio climático es un "riesgo sistémico", pero que también lo indica como una gran oportunidad por tres razones. La primera es que se multiplican las posibilidades para financiar las tecnologías de la economía baja en carbono ya que en la actualidad se invierten 600.000 millones de dólares anuales en energía solar y eólica, automóviles híbridos y lámparas LED. Asimismo, el estudio apunta que las estrategias de inversión incluyen cada vez más criterios de sostenibilidad. El informe revela que hay un auge de la inversión socialmente responsable (ISR), los bonos verdes y climáticos o la inversión de impacto. En tercer lugar, destaca que el impacto ambiental se tiene progresivamente "más en cuenta" en los índices financieros, las iniciativas que miden la huella de carbono o las grandes plataformas de datos financieros. El estudio revela que Europa es la región donde la ISR tiene más importancia ya que casi el 60 por ciento de los activos tiene en cuenta algún criterio de sostenibilidad. Sin embargo, refleja que en España este universo está todavía "poco desarrollado" aunque registra una tendencia al alza, ya que en 2014 estaban registrados 16 fondos ISR, es decir, aproximadamente el 1 por ciento de los fondos ISR europeos para un total de activos gestionados de 1.800 millones de euros. Este alza apunta que muchos de los fondos globales más innovadores se comercializan en España.
Las emisiones de dióxido de carbono (CO2) aumentaron en un 14 por ciento desde 1990 en España mientras que se redujeron en un 19 por ciento en el conjunto de Europa, según un estudio presentado este miércoles por ESADE y la Caja de Ingenieros, que apunta que las señales del cambio climático son cada vez más visibles y que probablemente se agudizarán en las próximas décadas. El trabajo 'La transición hacia una economía baja en carbono. Una mirada sobre El sector financiero y el sector alimentario', elaborado por el Instituto de Innovación Social de ESADE en colaboración con Fundación Caja de Ingenieros, señala que los fondos de inversión socialmente responsable (ISR) es una tendencia al alza en el sector financiero en España solo están domiciliados 16 fondos ISR, el 1% de Europa. El documento destaca que precisamente el sector alimentario es uno de los más afectados por los efectos del cambio climático a escala global y, a su vez, es responsable del 25 por ciento de las emisiones de CO2 y del 70 por ciento del consumo de agua. Además, el estudio muestra como el sector financiero considera que el cambio climático es un "riesgo sistémico", pero que también lo indica como una gran oportunidad por tres razones. La primera es que se multiplican las posibilidades para financiar las tecnologías de la economía baja en carbono ya que en la actualidad se invierten 600.000 millones de dólares anuales en energía solar y eólica, automóviles híbridos y lámparas LED. Asimismo, el estudio apunta que las estrategias de inversión incluyen cada vez más criterios de sostenibilidad. El informe revela que hay un auge de la inversión socialmente responsable (ISR), los bonos verdes y climáticos o la inversión de impacto. En tercer lugar, destaca que el impacto ambiental se tiene progresivamente "más en cuenta" en los índices financieros, las iniciativas que miden la huella de carbono o las grandes plataformas de datos financieros. El estudio revela que Europa es la región donde la ISR tiene más importancia ya que casi el 60 por ciento de los activos tiene en cuenta algún criterio de sostenibilidad. Sin embargo, refleja que en España este universo está todavía "poco desarrollado" aunque registra una tendencia al alza, ya que en 2014 estaban registrados 16 fondos ISR, es decir, aproximadamente el 1 por ciento de los fondos ISR europeos para un total de activos gestionados de 1.800 millones de euros. Este alza apunta que muchos de los fondos globales más innovadores se comercializan en España.

Fuente: CO2 - Imagen: Ecología Verde