Bolivia: “Agua para la vida” - La lucha del Ayllu San Agustin de Puñaca
“Agua para la vida” es un documental que retrata la lucha del Ayllu San Agustín de Puñaca, un territorio indígena ubicado en Oruro, Bolivia, que históricamente ha enfrentado impactos devastadores en el agua, el suelo, el aire y la salud de sus habitantes, como consecuencia de la contaminación por metales pesados provenientes de la actividad minera: Ayllu es una organización política y territorial ancestral conformada por comunidades. El Ayllu San Agustín de Puñaca está compuesta por 4 comunidades: Puñaca, Yuracarí, Pitcoya e Iswaya.
Por: Noalamina.org
En 2021, las comunidades presentaron una Acción Popular ante el
Tribunal de Justicia para exigir que los responsables —la empresa
estatal minera Minera Huanuni, así como las autoridades nacionales y
subnacionales— tomen medidas concretas para garantizar los derechos y
reparar los daños causados al Ayllu. “Se denunció la falta de control y fiscalización del Estado sobre los vertidos de las empresas mineras que operan alrededor de este territorio indígena, los cuales han generado durante décadas contaminación ambiental, acumulando metales pesados en los suelos (cultivos y forraje), fuentes de agua, aire, que está afectando gravemente a los habitantes del territorio indígena.”
A pesar de los múltiples informes técnicos y científicos aportados y que evidencian esa realidad, el Tribunal de Justicia de Oruro falló, en primera instancia, desestimando la demanda. Pero posteriormente, el Tribunal Constitucional Plurinacional de Bolivia revocó esa primera resolución y reconoció mediante Sentencia Constitucional Plurinacional 1471/2022-S3 que los derechos al agua, a la salud, a la alimentación y a un medio ambiente sano de los habitantes del Ayllu San Agustín de Puñaca están siendo amenazados, y en consecuencia ordenó a las autoridades responsables “la realización de un estudio sobre el agua de la que se provisiona dicho colectivo indígena, con la finalidad de constatar si es apta o no para el consumo humano y uso agropecuario y dimensionar su repercusión en la salud de la población, a fin de que en su caso se asuman las acciones pertinentes para rehabilitar el uso del recurso hídrico”.
Este estudio -fisicoquímico, bacteriológico y de metales pesados- se ejecutó en 7 fuentes de agua (4 de consumo humano y 3 de uso agropecuario), obteniendo resultados que demuestran altos contenidos de metales pesados en las fuentes de agua por encima de los valores permitidos de la Normativa Boliviana 512, y de los estándares establecidos a nivel internacional. Dichos análisis fueron realizados por el Estado Boliviano a través del Ministerio de Medio Ambiente y Agua (MMAyA).
Sorprendentemente, y a pesar de esos resultados, el informe del Ministerio de Medio Ambiente y Agua concluye que “no existe contaminación generada por la mano del hombre”, en una clara muestra de manipulación de los resultados obtenidos por sus propias instancias. Posteriormente, el Tribunal Departamental de Oruro (que debía cumplir con las acciones pertinentes ordenadas por el Tribunal Constitucional, para rehabilitar el recurso hídrico del Ayllu), se ampara en esa conclusión del Ministerio de Medio Ambiente y Agua, evadiendo su responsabilidad como garante de derechos sin tomar medidas de remediación, y da por cumplida la Sentencia Constitucional Plurinacional, por resolución de fecha de 13 de septiembre de 2023.
Frente a la manipulación del informe por parte del Estado Boliviano, el Ayllu realizó análisis de metales pesados en el cuerpo humano de 20 comunarios del territorio de manera voluntaria, para dimensionarla repercusión en la salud de la población, y cuyos resultados muestran intoxicación por metales pesados, como el arsénico, plomo y cadmio, en concentraciones mucho mayores a los estándares de la Unión Europea.
Ante la resolución del Tribunal Departamental de Oruro, el Ayllu presenta un Recurso de Queja en el que se evidencian las contradicciones, omisiones y deficiencias del informe técnico del Ministerio de Medio Ambiente y Agua, junto con la evidencia de intoxicación por metales pesados en el cuerpo humano de los pobladores del Ayllu, además de las deficiencias de la resolución judicial que da por cumplida la Sentencia Constitucional Plurinacional. Hasta el momento, y pasado sobradamente el plazo establecido, el recurso ha quedado sin resolver y la remediación no se ha producido.
La situación ha sido denunciada ante la CIDH (Comisión Interamericana de Derechos Humanos) en su visita a Bolivia (29 de marzo 2023), quien emite un informe:
“Cohesión Social: el desafío para la consolidación de la Democracia en Bolivia” punto 216, determina que las afectaciones derivadas de daños ambientales han impactado derechos de pueblos indígenas, originarios campesinos y afrobolivianos. Una de ellas, las consecuencias de la contaminación del agua, y la desaparición del lago Poopó a causa de la minería en el Ayllu de San Agustín de Puñaca, Subcuenca Poopó, en Oruro.”
Es innegable la flagrante omisión de responsabilidades y la evidente falta de voluntad política para garantizar los derechos fundamentales de estas poblaciones, gravemente afectadas por operaciones mineras. Esta situación no solo vulnera los derechos humanos de las comunidades, sino que también refleja una negligencia sistemática por parte del Estado.
Con el objetivo de parar estos abusos que vulneran los derechos de las comunidades indígenas, el Ayllu solicitó una audiencia pública con la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) que se realizó hace un año (8 de julio de 2024), para que a través de la esta instancia internacional el Estado Boliviano tome acciones de medidas efectivas integrales de reparación y remediación del territorio a partir de un control riguroso a las operadoras mineras, la atención en salud especializada a los intoxicados por metales pesados y el acceso a agua en cantidad y calidad para consumo humano y actividades agropecuarias.
Sin embargo, hasta el momento, el Ayllu San Agustín de Puñaca continúa enfrentando una sistemática indiferencia por parte del Estado boliviano.
La resistencia del Ayllu es un testimonio vivo de dignidad, fuerza y lucha colectiva en defensa de su territorio y de su vínculo ancestral con la tierra. A pesar de la contaminación, las enfermedades y el abandono, la lucha del Ayllu sigue firme, sosteniendo con convicción la resistencia contra la injusticia y exigiendo el respeto a su derecho al agua, a un medio ambiente sano y a la vida.
El documental es una producción de IWGIA (International Work Group for Indigenous Affairs), con el apoyo de CENDA (Centro de Comunicación y Desarrollo Andino), que está disponible en español, inglés, francés y portugués.
IWGIA es una organización global de derechos humanos dedicada a promover y defender los derechos de los pueblos indígenas.
“Desde 1968, IWGIA ha cooperado con organizaciones indígenas e instituciones internacionales para promover el reconocimiento y la implementación de los derechos de los pueblos indígenas. IWGIA trabaja para apoyar a los pueblos indígenas a través de una sólida documentación, el desarrollo de capacidades y la defensa de derechos a nivel local, regional e internacional.”
CENDA es una organización cuya misión es fortalecer estrategias de vida propias de las comunidades campesinas, indígenas y sectores urbano-populares como alternativa al modelo capitalista. Y de este modo, “lograr una sociedad democrática con justicia social y ambiental que forja un desarrollo para la vida.”
Fuente: https://www.cenda.org/secciones/tierra-territorio-y-derechos-colectivos/item/972-la-cidh-atendera-la-denuncia-del-ayllu-punaca-por-las-afectaciones-de-la-contaminacion-minera - Publicado en: Noalamina.org