Argentina Minería / Cuidar el territorio, cuidar la infancia: tramas intergeneracionales en Fiambalá

La historia de Fiambalá está tejida con agua de deshielo, cultivos de vid y saberes que pasan de una generación a otra. Durante décadas, las comunidades que habitan este rincón del oeste catamarqueño sostuvieron economías campesinas con base en la agricultura familiar, el pastoreo caprino y el intercambio barrial. Pero en los últimos años, algo empezó a deshilacharse. Por Camila Parodi Fotos: Julio Carrizo (BePe) En el interior de Fiambalá, el paisaje parece resistir a aquello que la ciudad dejó avanzar. Entre los médanos amarillos y los altos cerros violetas, aparecen parrales tupidos, hileras de maizales y corrales con cabras que saltan entre las piedras. Desde arriba, la aridez impone respeto; abajo, brota la vida. Allí, en los pueblos del Bolsón de Fiambalá —como Medanitos, Saujil, La Ciénaga, Chuquisaca, Tatón o Antinaco— las formas de habitar conservan una relación con la tierra y con quienes la habitan. Formas de relacionarse que en el centro urbano de Fiambalá ya empieza a dilu...