Hay una “normalidad” a la que no podemos volver

A esta altura, mientras los muertos se cuentan de a miles y las economías crujen, también se acumula evidencia que relaciona un hecho con el otro: No puede disociarse el drama sanitario que vivimos, con los impactos que el modo de producción y consumo dominante ejerce sobre los ecosistemas y el sistema climático. Por lo tanto la salida exitosa de este desastre tiene que incluir cambios profundos en nuestro modo de estar en el mundo. En nuestro país (Argentina) eso implica dejar de impulsar el extractivismo. En lo sanitario el gobierno nacional que encabeza Alberto Fernández tomó medidas acertadas y plantea que es falso contraponer el cuidado de la salud y el de la economía frente a las presiones de sectores corporativos por levantar la cuarentena. Sin embargo todas las actividades extractivas han quedado exceptuadas de ella y así, mientras millones permanecemos en nuestras casas y barrios, continúan el desmonte (más de 2.000 hectáreas desde mediados de marzo), la prospección y explo...