Brasil: afectados por Belo Monte denuncian “retrocesos” en concepciones del Poder Ejecutivo
Giro hacia atrás
Vitória do Xingu es un poblado brasileño, ubicado en el estado de Pará, que tiene poco más de 10 mil habitantes. El Movimiento de Afectados por Represas (MAB por su sigla en portugués) y las organizaciones locales de pescadores no admiten dobles lecturas: la construcción de la represa de Belo Monte afectará la economía de Vitória do Xingu, y los actores más vulnerables son aquellos con menor poder de incidencia, por ejemplo los trabajadores que se dedican a la pesca artesanal.
Toda esa introducción para decir lo siguiente: el gobierno brasileño concluyó que los habitantes de Vitoria do Xingu no entran en la categoría de “damnificados”, según admitieron recientemente jerarcas del consorcio brasileño Norte Energia, que construirá la hidroeléctrica y en el que participan entidades gubernamentales.
A través de una declaración pública divulgada el 17 de abril, el MAB denuncia que el no reconocimiento de los pobladores de Vitória do Xingu como afectados por Belo Monte implica un “retroceso” en relación a la postura que mantuvo, a finales de 2010, el ex presidente Luiz Inácio “Lula” da Silva.
En aquel momento, y con la polémica por Belo Monte ya instalada, el gobierno brasileño aprobó un decreto que definía al "damnificado" como todo aquel ciudadano cuya actividad económica se veía afectada por la puesta en marcha de un emprendimiento.
“En esa situación están los pescadores de Vitória do Xingu, quienes denuncian que la disminución del flujo de aguas perjudicará irreversiblemente su sustento” señala el MAB en su pronunciamiento.
Otra violación a los derechos humanos. De esa manera define entonces el MAB lo que está pasando con los pescadores de este poblado paraense.
Y también se dan paradojas. Según la organización, las consecuencias negativas desde el punto de vista social y ambiental de las usinas hidroeléctricas fueron comprobadas por la relatoría de una comisión especial ligada a la Presidencia de la República, y a pesar de eso el gobierno mantiene posturas excluyentes como en este caso.
“Estamos viviendo en Brasil un contexto de supuesto desarrollo económico, en el cual la energía, vista como mercancía, ha adquirido una importancia estratégica. Por eso, construir represas para producir energía eléctrica cada vez más es un tema de interés para las grandes empresas”, resumen desde el MAB.
Foto: es.globalvoicesonline.org (2012) Radio Mundo Real