La biodiversidad es ‘clave’ para reducir el impacto en los ecosistemas durante épocas de climas extremos
"Hemos sabido durante mucho tiempo que la biodiversidad tiene un efecto estabilizador sobre la productividad a lo largo del tiempo", afirma el autor principal Forest Isbell, director asociado de 'Cedar Creek Ecosystem Science Reserve' de la Universidad de Minnesota, en Estados Unidos, uno de los sitios de estudio.
Un estudio de 46 puntos en pastizales de Norteamérica y Europa concluye que la diversidad de plantas disminuye la afección al ecosistema de condiciones extremadamente húmedas o secas.
"Hemos sabido durante mucho tiempo que la biodiversidad tiene un efecto estabilizador sobre la productividad a lo largo del tiempo", afirma el autor principal Forest Isbell, director asociado de 'Cedar Creek Ecosystem Science Reserve' de la Universidad de Minnesota, en Estados Unidos, uno de los sitios de estudio. "Pero no hemos estado muy seguros de si eso es durante eventos extremos, después de ellos o ambos casos. Esta investigación mostró que diversas comunidades son más estables debido a que presentan resistencia durante los eventos climáticos extremos", agrega.
El estudio, publicado en la edición digital de este miércoles de 'Nature', contó con la participación de más de tres docenas de investigadores de Estados Unidos, Alemania, Reino Unido, Irlanda, Francia, Suiza, Países Bajos, República Checa y Japón.
Los investigadores comenzaron clasificando cada año de cada experimento en una escala de cinco puntos desde extremadamente seco a extremadamente húmedo. Luego, midieron la correspondiente productividad. Combinando los resultados entre los 46 sitios de estudio, encontraron que cuanto mayor es la biodiversidad vegetal, menor es la variabilidad en la productividad durante los eventos climáticos húmedos o secos.
En general, la productividad de las comunidades con sólo una o dos especies cambió un promedio de un 50 por ciento durante los eventos extremos, mientras que aquellas zonas con entre 16 a 32 especies se alteraron sólo la mitad de esa cantidad. Sin embargo, la biodiversidad no parece influir fuertemente en la rapidez con la que un sitio volvió a la normalidad en la productividad después de eventos húmedos o secos.
Isbell, que también es profesor adjunto en la Facultad de Ciencias Biológicas, dice que el equipo de investigación encontró los resultados un tanto inesperados. "Muchos de nosotros esperábamos que la biodiversidad a menudo promoviera tanto la resistencia durante los eventos climáticos como la capacidad de recuperación después de los sucesos climáticos", reconoce.
En cambio, la resistencia al cambio claramente triunfó sobre la resiliencia como el principal mecanismo a través del cual la biodiversidad ayuda a preservar la estabilidad del ecosistema en tiempos de cambio.