Informe ‘El planeta en llamas’: La crisis climática atiza incendios forestales más peligrosos e incontrolables

Los trágicos incendios en Australia, Brasil y Siberia en los últimos meses podrían ser atribuidos a sucesos regionales y esporádicos sin relación ni motivo común pero en realidad, la reiteración y amplitud de este tipo de grandes fuegos forestales es una manifestación del problema global más que demostrado científicamente: la crisis climática. En España, los datos indican que la superficie forestal calcinada ha disminuido en los últimos años -posiblemente por una mayor acción de control y extinción- pero en cambio han aumentado los grandes incendios; aquellos que provocan daños más graves y son más difíciles de controlar porque se producen en situaciones muy adversas.

Joaquim Elcacho

La problemática global de los incendios forestales y el caso concreto de España, en relación a la crisis climática, son el objetivo principal del informe El planeta en llamas , presentado este 25 de junio por la organización WWF.
Observación des de satélite de los feugos en la costa este de Australia en 2019 
(EARTH OBSERVATORY HANDOUT / EFE)

“El informe de incendios de WWF analiza este año cómo el cambio climático está generando unos incendios muy peligrosos e incontrolables. La organización alerta de que los terribles incendios de 2019, como los del Círculo Polar Ártico o Australia, son una imagen del futuro y representan la “nueva normalidad” en muchas zonas del planeta. La solución global es actuar contra el cambio climático”, destaca esta organización ecologista en la presentación de su informe.
WWF alerta en este sentido de que “los incendios forestales y el cambio climático son dos caras de la misma moneda.
Las emisiones debidas a los incendios en 2019 supusieron un repunte a nivel global y se liberaron 7.800 millones de toneladas de CO2, el equivalente a unas 25 veces las emisiones totales de España en un año.
Paisaje tras un gran incendio en la zona de Porto Velho, Rondonia, Brasil (CARL DE SOUZA / AFP)

El informe ‘El planeta en llamas’ de recuerda que la combinación de olas de calor prolongadas, sequías acumuladas y baja humedad unida a una vegetación muy seca y bosques sin gestión está generando incendios mucho más rápidos y de una virulencia nunca vista.
Además, los períodos de riesgo se han alargado. Este es el caso de los incendios de Australia, con auténticas tormentas de fuego de más de 1.000ºC que acabaron con la vida de decenas de personas y de más de 1.200 millones de animales. Los incendios de la Amazonia o Indonesia tienen un claro trasfondo socioeconómico, el de la deforestación. El cambio de usos del suelo es el origen de estos incendios, principalmente debido al insostenible sistema alimentario predominante, causante del 75% de la deforestación mundial.
Récord de calor en el Ártico
Mención aparte merecen los incendios del Círculo Polar Ártico, donde se acaba de registrar récord de temperaturas con 38ºC, porque no hay precedentes en la historia por su intensidad, duración y latitud, indica WWF en la presentación de su informe
El Ártico se está calentando dos veces más rápido que el resto del planeta y, como consecuencia, se están generando incendios de alta intensidad.
Para facilitar el conocimiento del problema global WWF presenta ahora un mapa del fuego en una herramienta online que permite visualizar todos estos superincendios de 2019.
Situación en España
Los datos analizados por WWF indican que España se registran en los últimos años menos superficie forestal afectada por el fuego, con una reducción del 36% entre 2010 y 2019 en el número de fuegos respecto a la década anterior, y menos superficie quemada.
Sin embargo, destaca esta organización ecologista en su informe, “aumenta la proporción de los grandes incendios forestales (GIF) respecto al total de siniestros, en los que arde el 40% de la superficie total afectada”.
WWF destaca también que ha aumentado el riesgo de sufrir oleadas de incendios extremadamente impactantes, muy peligrosos para la población e imposibles de apagar. En 2017 este tipo de incendio vinculado al cambio climático dejó 107 víctimas mortales en Portugal y 4 en Galicia.
En Portugal la situación es aún más grave y es el país europeo más castigado por los incendios forestales, con un promedio anual de unos 17.000 incendios, un 35% más que en España.
El análisis de WWF destaca también la relación directa entre los incendios, la deforestación y las pandemias, porque la destrucción de los bosques, en especial los tropicales como la Amazonia, Indonesia o el Congo, posibilita que los seres humanos entren en contacto con poblaciones de fauna silvestre portadoras de patógenos. En este sentido, Naciones Unidas y WWF coinciden en el concepto One Health porque unos bosques bien conservados se convierten en la mejor vacuna contra zoonosis como el coronavirus.
(Bruno Kelly / Reuters)

Lourdes Hernández, experta en gestión de incendios en WWF España, asegura que: “Las políticas contra las llamas tienen que centrarse en una prevención integral, porque los incendios del futuro dependen de las medidas de prevención que apliquemos a partir de ahora. Es un error seguir confiando en las políticas de extinción para apagar fuegos ya que han demostrado ser ineficaces frente a los eventos extremos”.
Y añade: “En España urge la puesta en marcha de las ya aprobadas ‘Orientaciones estratégicas para la gestión de incendios forestales’ por parte del Gobierno central y las comunidades autónomas. Tenemos una oportunidad única para utilizar fondos de la reconstrucción económica y generar empleo en la gestión y adaptación al cambio climático de nuestra olvidadas masas forestales. Y así reducir la siniestralidad, promover y poner en valor paisajes más resistentes al fuego y mejor adaptados al cambio climático y minimizar el riesgo en las zonas de interfaz. A escala planetaria, urge luchar contra el cambio climático global y poner freno a la deforestación y degradación de los bosques en los trópicos”, concluye Hernández.
Algunos datos de El Planeta en llamas
Europa: Todo Europa se está ‘mediterranizando’ y los grandes incendios forestales (GIF) han dejado de ser la excepcionalidad para empezar a ser la norma.
Amazonia: Algo más del 18% de la selva amazónica original ha sido destruida.
Indonesia: El 99% de los fuegos tiene origen humano y están vinculados a procesos de deforestación y cambios de uso del suelo para aceite de palma, papel y pasta de celulosa.
África central: La agencia espacial EEUU lo define como un ‘continente en llamas’ porque concentra el 70% de los focos de incendio del mundo.
California: Una pesadilla. El año 2019 se declaró el estado de emergencia por la evacuación de más de 200.000 personas y se devastaron cerca de 100.000 hectáreas.
Chile: Las tormentas de fuego devoraron 86.000 ha en 2017.
Australia: Durante cuatro meses ardieron de manera extrema más de 12 millones de hectáreas, con un gran número de fallecidos y tremendos daños ambientales. En uno de los años más cálidos que se recuerda en el país, por primera vez no ardieron pastizales, sino bosques húmedos templados no acostumbrados al fuego, que llegó a alcanzar temperaturas de 1.000ºC.

Fuente: https://www.lavanguardia.com/natural/20200625/481946580980/la-crisis-climatica-atiza-incendios-forestales-mas-peligrosos-e-incontrolables.html - Imagen de portada: Trabajos de extinción en Nowra (australia), en diciembre de 2020 (SAEED KHAN / AFP)

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