Elecciones en El Salvador: no hay propuestas importantes en materia ambiental
Se aceptan ofertas
“La derecha en El Salvador es sinónimo de fortalecer y agilizar la destrucción de nuestro territorio. Está muy claro en el país cuál es el NO”, dijo el presidente de CESTA – Amigos de la Tierra El Salvador, Ricardo Navarro.
Todo parece indicar que va a ganar la izquierda, agregó, y entonces “vamos a tener muchas tareas y conflictos para convencerlos de que no se puede desarrollar un país si no se considera la base de los recursos, la sustentabilidad ambiental”. Ninguna de las dos corrientes políticas dan signos de conciencia ambiental, lo cual preocupa a Navarro, que sin embargo establece diferencias entre ellas.
Este domingo se celebrarán elecciones nacionales en El Salvador, y Ana María Vázquez, de CESTA, entrevistó al dirigente ecologista a nombre de Radio Mundo Real. La activista nos comparte además una cuña radial del capítulo salvadoreño del Movimiento de Víctimas, Afectados por el Cambio Climático y Corporaciones (MOVIAC), preparada para las elecciones de este 2 de febrero.
Navarro explicó que la derecha en el país está representada por el Partido ARENA (Alianza Republicana Nacionalista), ahora de oposición y que tiene como candidato al empresario Norman Quijano, y la izquierda por el oficialista Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), que postula a la presidencia al ex guerrillero Salvador Sánchez Cerén. Los otros partidos aparecen sin chances, dijo Navarro
En su opinión, el sistema político económico planetario no es sustentable y está llevando a la humanidad a la destrucción. “¿Qué significaría esto para El Salvador? Deberíamos estar estableciendo estrategias de sobrevivencia, o sea, cómo en algunas décadas vamos a garantizar que haya agua, alimentos, medicinas, un mercado local. Nada de esto está contemplado por ningún partido”, se lamentó.
“La derecha para nosotros significa un fortalecimiento del actual sistema político económico, de lo que está llevando a la destrucción a nuestra civilización”, aseguró Navarro, y agregó que en El Salvador eso “ha significado una concentración de los recursos en pocas manos, incluyendo prácticas al margen de la ley” durante anteriores gobiernos del Partido ARENA. El objetivo ha sido, dijo, “incrementar las ganancias de las corporaciones”. “Eso representa el actual Partido ARENA. Para nosotros es muy claro el NO, al Partido ARENA hay que decirle NO, eso no se puede”.
No obstante, Navarro argumentó que con el FMLN también hay problemas, porque no tiene claras cuáles deben ser las condiciones ambientales a considerar en un plan de gobierno.
El presidente de CESTA y ex presidente de Amigos de la Tierra Internacional, federación ecologista con organizaciones de base en cerca de 80 países, manifestó que le gustaría que Sánchez Cerén sea elegido presidente este domingo. “Pero yo creo que a partir del 1 de junio, que es cuando él tomaría posesión, habría que presionarlo, porque no se puede confiar en el FMLN, sino que hay que presionar para que haga las cosas en la forma que deben hacerse, sobre todo en situación ambiental”, acotó.
Navarro mencionó varios aspectos ambientales que le preocupan a CESTA. Uno es el uso intensivo de agrotóxicos en la agricultura, que vinculó con la trepada de las enfermedades de insuficiencia renal en el país. ARENA ya manifestó su apoyo al uso de agrotóxicos, al tiempo que el FMLN dijo que votaría para prohibirlos pero luego no lo hizo, explicó Navarro. “Uno de los desafíos es convertir a la agricultura en algo que sea sustentable, que no siga envenenando a la gente”.
Sobre la minería, el ecologista salvadoreño subrayó que la izquierda siempre ha dicho que no está a favor de la minería, “pero la cosa es que no toma cartas decisivas”, como “prohibir la minería metálica”. “Por eso hay que ejercer la presión que sea necesaria” para que se prohiba esa actividad.
Navarro hizo mención también a Fomilenio, un programa de trabajo del gobierno de El Salvador, que tiene una institución a cargo que lleva el mismo nombre y que tiene la financiación del gobierno estadounidense. Fomilenio se promociona en su web oficial como un mecanismo para reducir “la pobreza de la zona norte a través del crecimiento económico”.
No obstante, el principal referente de CESTA explicó que el gobierno de Estados Unidos está presionando y atando su otorgamiento de fondos a la implementación de reformas a la ley de asociaciones público-privadas, con el fin de que las corporaciones del agua puedan dominar ese sector. “Recursos como el agua no se debe permitir que sean propiedad de las corporaciones. Ellas quieren meterse en la educación, la salud y a veces hasta en la seguridad”, dijo. “Creo que la izquierda debería estar firme en no permitir más reformas a esa ley de asociaciones público-privadas, si de mi dependiera hasta habría que abolir esa ley. Y si el gobierno de Estados Unidos no quiere apoyar en esas condiciones al gobierno de El Salvador, pues yo creo que hay que darles las gracias”. “(...) La soberanía de nuestros países debe guardarse”, sentenció.
Para Navarro es importante que El Salvador fortalezca un mercado local. “Nosotros tenemos un problema y es que tenemos la economía dolarizada. Deberíamos hacer cambios para tener nuestra propia moneda. Deberíamos tener relaciones con las economías del Sur”, dijo, al tiempo que defendió la creación de una moneda latinoamericana para los intercambios comerciales. En ese sentido, consideró importante fortalecer la relación de El Salvador con América Latina. “Perfectamente podríamos intercambiar bienes entre Centroamérica y Sudamérica. A veces algunos recursos, a veces algunos bienes terminados, servicios inclusive”, dijo también.
Sobre el final de la charla el ecologista volvió a manifestar un rotundo rechazo al Partido ARENA. “La derecha es un NO clarito”. Sin embargo, dijo que no entiende cómo la izquierda “no ha asumido la realidad ambiental”, y consideró que ese sector político “tiene una deuda con la población”. Mencionó especialmente el cambio climático, la erosión de la diversidad y la acidez de los océanos, “que son verdaderamente alarmantes”. “(...) Me causa sorpresa y un poco de lamento ver que la izquierda no asume esto”, cerró.
Imagen: oilwatchmesoamerica.org
(CC) 2014 Radio Mundo Real 10 años
“La derecha en El Salvador es sinónimo de fortalecer y agilizar la destrucción de nuestro territorio. Está muy claro en el país cuál es el NO”, dijo el presidente de CESTA – Amigos de la Tierra El Salvador, Ricardo Navarro.
Todo parece indicar que va a ganar la izquierda, agregó, y entonces “vamos a tener muchas tareas y conflictos para convencerlos de que no se puede desarrollar un país si no se considera la base de los recursos, la sustentabilidad ambiental”. Ninguna de las dos corrientes políticas dan signos de conciencia ambiental, lo cual preocupa a Navarro, que sin embargo establece diferencias entre ellas.
Este domingo se celebrarán elecciones nacionales en El Salvador, y Ana María Vázquez, de CESTA, entrevistó al dirigente ecologista a nombre de Radio Mundo Real. La activista nos comparte además una cuña radial del capítulo salvadoreño del Movimiento de Víctimas, Afectados por el Cambio Climático y Corporaciones (MOVIAC), preparada para las elecciones de este 2 de febrero.
Navarro explicó que la derecha en el país está representada por el Partido ARENA (Alianza Republicana Nacionalista), ahora de oposición y que tiene como candidato al empresario Norman Quijano, y la izquierda por el oficialista Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), que postula a la presidencia al ex guerrillero Salvador Sánchez Cerén. Los otros partidos aparecen sin chances, dijo Navarro
En su opinión, el sistema político económico planetario no es sustentable y está llevando a la humanidad a la destrucción. “¿Qué significaría esto para El Salvador? Deberíamos estar estableciendo estrategias de sobrevivencia, o sea, cómo en algunas décadas vamos a garantizar que haya agua, alimentos, medicinas, un mercado local. Nada de esto está contemplado por ningún partido”, se lamentó.
“La derecha para nosotros significa un fortalecimiento del actual sistema político económico, de lo que está llevando a la destrucción a nuestra civilización”, aseguró Navarro, y agregó que en El Salvador eso “ha significado una concentración de los recursos en pocas manos, incluyendo prácticas al margen de la ley” durante anteriores gobiernos del Partido ARENA. El objetivo ha sido, dijo, “incrementar las ganancias de las corporaciones”. “Eso representa el actual Partido ARENA. Para nosotros es muy claro el NO, al Partido ARENA hay que decirle NO, eso no se puede”.
No obstante, Navarro argumentó que con el FMLN también hay problemas, porque no tiene claras cuáles deben ser las condiciones ambientales a considerar en un plan de gobierno.
El presidente de CESTA y ex presidente de Amigos de la Tierra Internacional, federación ecologista con organizaciones de base en cerca de 80 países, manifestó que le gustaría que Sánchez Cerén sea elegido presidente este domingo. “Pero yo creo que a partir del 1 de junio, que es cuando él tomaría posesión, habría que presionarlo, porque no se puede confiar en el FMLN, sino que hay que presionar para que haga las cosas en la forma que deben hacerse, sobre todo en situación ambiental”, acotó.
Navarro mencionó varios aspectos ambientales que le preocupan a CESTA. Uno es el uso intensivo de agrotóxicos en la agricultura, que vinculó con la trepada de las enfermedades de insuficiencia renal en el país. ARENA ya manifestó su apoyo al uso de agrotóxicos, al tiempo que el FMLN dijo que votaría para prohibirlos pero luego no lo hizo, explicó Navarro. “Uno de los desafíos es convertir a la agricultura en algo que sea sustentable, que no siga envenenando a la gente”.
Sobre la minería, el ecologista salvadoreño subrayó que la izquierda siempre ha dicho que no está a favor de la minería, “pero la cosa es que no toma cartas decisivas”, como “prohibir la minería metálica”. “Por eso hay que ejercer la presión que sea necesaria” para que se prohiba esa actividad.
Navarro hizo mención también a Fomilenio, un programa de trabajo del gobierno de El Salvador, que tiene una institución a cargo que lleva el mismo nombre y que tiene la financiación del gobierno estadounidense. Fomilenio se promociona en su web oficial como un mecanismo para reducir “la pobreza de la zona norte a través del crecimiento económico”.
No obstante, el principal referente de CESTA explicó que el gobierno de Estados Unidos está presionando y atando su otorgamiento de fondos a la implementación de reformas a la ley de asociaciones público-privadas, con el fin de que las corporaciones del agua puedan dominar ese sector. “Recursos como el agua no se debe permitir que sean propiedad de las corporaciones. Ellas quieren meterse en la educación, la salud y a veces hasta en la seguridad”, dijo. “Creo que la izquierda debería estar firme en no permitir más reformas a esa ley de asociaciones público-privadas, si de mi dependiera hasta habría que abolir esa ley. Y si el gobierno de Estados Unidos no quiere apoyar en esas condiciones al gobierno de El Salvador, pues yo creo que hay que darles las gracias”. “(...) La soberanía de nuestros países debe guardarse”, sentenció.
Para Navarro es importante que El Salvador fortalezca un mercado local. “Nosotros tenemos un problema y es que tenemos la economía dolarizada. Deberíamos hacer cambios para tener nuestra propia moneda. Deberíamos tener relaciones con las economías del Sur”, dijo, al tiempo que defendió la creación de una moneda latinoamericana para los intercambios comerciales. En ese sentido, consideró importante fortalecer la relación de El Salvador con América Latina. “Perfectamente podríamos intercambiar bienes entre Centroamérica y Sudamérica. A veces algunos recursos, a veces algunos bienes terminados, servicios inclusive”, dijo también.
Sobre el final de la charla el ecologista volvió a manifestar un rotundo rechazo al Partido ARENA. “La derecha es un NO clarito”. Sin embargo, dijo que no entiende cómo la izquierda “no ha asumido la realidad ambiental”, y consideró que ese sector político “tiene una deuda con la población”. Mencionó especialmente el cambio climático, la erosión de la diversidad y la acidez de los océanos, “que son verdaderamente alarmantes”. “(...) Me causa sorpresa y un poco de lamento ver que la izquierda no asume esto”, cerró.
Imagen: oilwatchmesoamerica.org
(CC) 2014 Radio Mundo Real 10 años