Las heridas de la Capa de Ozono siguen peligrosamente abiertas

El 17 de septiembre se celebró el día internacional para preservar esa vital franja de gas que recubre el planeta. Sin embargo no hay nada que celebrar ya que un estudio basado en mediciones de diversos satélites y sofisticados modelos químicos y climáticos, acaba de desmontar las estimaciones periodísticas sobre su recuperación previstas para la próxima década.

Félix Eduardo Gutiérrez

Las investigaciones sobre la química atmosférica realizadas por el ingeniero egresado de la Universidad Nacional Autónoma de México, con doctorado en la Universidad de Berkeley, Estados Unidos (EE. UU.), permitieron alertar al mundo sobre el peligro del adelgazamiento y destrucción de la capa de ozono, como consecuencia de la emisión de gases industriales y productos químicos sintéticos.
El hallazgo de Molina y de un grupo de científicos, advertía que el nivel de ozono estaba disminuyendo justamente sobre la Antártida y, en consecuencia, se estaba abriendo un agujero en esa franja frágil de gas que protege la tierra de los efectos nocivos de los rayos solares.
Precisamente para sensibilizar a la comunidad mundial sobre este grave problema que salía por primera vez a la luz pública y que amenazaba peligrosamente la vida del planeta, se instauró el 16 de septiembre como el Día Internacional de la Preservación de la Capa de Ozono.
La efeméride corresponde a una iniciativa del ecologista y promotor de las causas ambientales, el venezolano Erick Quiroga, que en 1993 presentó la propuesta como presidente del Club de Amigos de la Unesco en Venezuela, a la cancillería de su país, para que este la elevara ante la ONU con apoyo del Grupo Latinoamericano y del Caribe. La idea tuvo aceptación y fue aprobada por la Asamblea General en 1994.
La fecha recuerda la necesidad de continuar haciendo esfuerzos internacionales para frenar el deterioro de la capa de ozono, ya que a pesar de haberse dado pasos importantes como la firma del Protocolo de Montreal, que han contribuido a darle un freno al problema, el peligro sigue latente.
Se retrasará recuperación de la capa de ozono
De acuerdo con los resultados de las últimas investigaciones efectuadas, el agujero está cerrándose en su parte más amplia: la Antártida, pero el manto ozónico evidencia degradación en sus capas intermedias, pese a que se había estimado erróneamente que para el 2030, volvería a los niveles de 1980.
Un estudio basado en mediciones de diversos satélites, globos atmosféricos y sofisticados modelos químicos y climáticos, citados por el diario español El País, acaba de desmontar las estimaciones de recuperación de la capa previstas para la próxima década.
William Ball, científico de la Escuela Politécnica Federal de Zúrich (Suiza) y principal autor del estudio, afirmó que “los resultados de la investigación sugieren que, al principio los niveles de la capa de ozono comenzaron a subir, pero luego cayeron hasta los mismos que tenía en 1998”.
Al celebrarse el Día Internacional de la Preservación de la Capa de Ozono 2018, la Organización de las Naciones Unidas, la ONU, hizo un llamado a todo el mundo para continuar con el trabajo ejemplar de proteger la capa de ozono y el clima, en el marco del Protocolo de Montreal.
Mario Molina en una de las últimas entrevistas concedidas a la prensa internacional declaró: “El agujero de ozono se ha ido recuperando en los últimos años, pero es posible que esa recuperación se retrase por el impacto del cambio climático”.

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