Naturaleza en llamas: incendios y agronegocios en América del Sur

"En este informe se recogen específicamente las afectaciones acontecidas al bosque amazónico, los humedales del Pantanal, del delta del Paraná, La Segua en Ecuador, el Gran Chaco boliviano, paraguayo y argentino, el bosque seco chiquitano, el Cerrado brasileño, las sierras cordobesas. Incluimos además un texto sobre incendios en el cinturón verde del Distrito Metropolitano de Quito – Ecuador, y un estudio sobre los impactos en la salud de los incendios en el Delta del Paraná en Argentina. Estos grandes incendios han tenido un efecto en la vida de diversas comunidades locales, incluyendo comunidades quilombolas y asentamientos de la reforma agraria (en el caso de Brasil), pueblos indígenas, comunidades de pescadores artesanales (en el caso de los humedales), comunidades campesinas y otras comunidades locales; siendo uno de los casos más dramáticos las comunidades en aislamiento voluntario; pobladores ancestrales del Gran Chaco, donde el agronegocio avanza agresivamente sobre su territorio tradicional, haciendo uso del fuego".

Por Naturaleza con Derechos y Acción Ecológica


INTRODUCCIÓN
El fuego ha sido utilizado por las comunidades humanas desde hace milenios, como lo demuestran estudios paleoecológicos, basados en carbón vegetal y polen. Sin duda, los primeros homínidos eran conscientes de los incendios de las sabanas, y con el tiempo el fuego se incrustó en el comportamiento humano. Hoy es evidente que el control de incendios ha tenido un impacto importante en el curso de la evolución humana, incluida nuestra biología, pues nos ha ayudado desde el Pleistoceno a proporcionar una dieta de alta calidad.

Lo que hace diferente el manejo tradicional del fuego a los actuales incendios, es la magnitud y la intención. Como veremos en los trabajos que presentamos en esta publicación, en los últimos años, pero de manera especial en 2019 y 2020, los incendios en América del Sur han alcanzado niveles dantescos, y han tenido la intención de convertir ecosistemas naturales o zonas dedicadas a la producción soberana de alimentos, en territorios del monopolizados por el agronegocio.
El agronegocio incide en estos incendios de dos maneras. De una manera directa, pues los provoca con el fin de degradar ecosistemas con valor ecológico para luego ocuparlos. El caso más dramático es el del llamado “Día del Fuego”, convocado por el agronegocio para propiciar su expansión en la Amazonía brasileña. Indirectamente, el agronegocio destruye de tal manera el equilibrio ecológico de los ecosistemas, que fuegos causados o espontáneos son muy difíciles de controlar, lo que se exacerba con el cambio climático.
Frente a esta tragedia, varias organizaciones de América del Sur, nos convocamos para exponer nuestras preocupaciones sobre el incremento de los incendios en bosques, humedales y otros ecosistemas naturales, y su relación con el agronegocio al Relator Especial de las Naciones Unidas sobre los Derechos Humanos y el Medio Ambiente David R. Boyd, y que ahora recogemos en esta publicación.
Este estudio muestra cómo la expansión del monocultivo de la soja, la ganadería y la industria camaronera, la ocupación inmobiliaria se hace a costa de bosques amazónicos y secos tropicales, humedales y otros ecosistemas naturales, son la principal causa desencadenante de los incendios ocurridos en el año 2020, en plena pandemia del COVID-19.
En este informe se recogen específicamente las afectaciones acontecidas al bosque amazónico, los humedales del Pantanal, del delta del Paraná, La Segua en Ecuador, el Gran Chaco boliviano, paraguayo y argentino, el bosque seco chiquitano, el Cerrado brasileño, las sierras cordobesas.
Incluimos además un texto sobre incendios en el cinturón verde del Distrito Metropolitano de Quito – Ecuador, y un estudio sobre los impactos en la salud de los incendios en el Delta del Paraná en Argentina. Estos grandes incendios han tenido un efecto en la vida de diversas comunidades locales, incluyendo comunidades quilombolas y asentamientos de la reforma agraria (en el caso de Brasil), pueblos indígenas, comunidades de pescadores artesanales (en el caso de los humedales), comunidades campesinas y otras comunidades locales; siendo uno de los casos más dramáticos las comunidades en aislamiento voluntario; pobladores ancestrales del Gran Chaco, donde el agronegocio avanza agresivamente sobre su territorio tradicional, haciendo uso del fuego.
Hay muchos responsables por estos incendios, incluyendo los grandes complejos de soja, ganadería, madera e infraestructura asociada (puertos, carreteras, ferrocarriles). Los actores de la cadena de la carne incluyen ganaderos, empresas multinacionales de carne de res, la industria camaronera, las instituciones financieras internacionales, supermercados, cadenas de comida rápida. Muchos cuentan con la complicidad de los gobiernos locales y nacionales, por lo que son los responsables directos o indirectos de esta destrucción.
Es importante que tomemos conciencia de esta realidad para que desde cualquier espacio en el que estemos, demandemos que cesen los incendio asociados a la expansión del agronegocio. En esta publicación presentamos casos de Argentina, Brasil, Bolivia, Paraguay y Ecuador.


Naturaleza con Derechos y Acción Ecológica
Fuente: Naturaleza con Derechos

 

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