Endesa fracasa con su proyecto hidroeléctrico en la Patagonia
La ministra de Medio Ambiente chilena afirma que los planes presentados por la multinacional eléctrica “no están a la altura”
Activistas y escaladores de la organización ecologista Greenpeace han descolgado una enorme pancarta de la sede madrileña de la multinacional eléctrica española ENDESA. Los ecologistas exigen a Endesa que abandone sus planes de construir cinco grandes presas en la Patagonia chilena.
El Estudio de Impacto Ambiental (EIA) presentado por Endesa para su proyecto energético Hidraysén en la Patagonia chilena ha recibido numerosas críticas de las más altas instituciones del país sudamericano. La mayoría de las opiniones coinciden en que el estudio no es riguroso ni completo.
Entre las abundantes críticas algunas se refieren a la falta de precisión sobre el número de hectáreas inundadas o la cuota máxima de inundación; extensión de bosque afectada; o deficiencias en la calidad de la cartografía.
De las 36 instituciones gubernamentales y ambientales chilenas implicadas en la Evaluación, 32 han rechazado el proyecto Hidroaysén y han presentado más de mil observaciones al Estudio de Impacto Ambiental (EIA). Incluso la ministra de Medio Ambiente de Chile, Ana Lya Uriarte, denunció que el Estudio de Impacto presentado por las promotoras del proyecto “no está a la altura” de la evaluación.
Las empresas Endesa y Colbún pretenden construir en los ríos patagónicos Baker y Pascua cinco grandes presas hidroeléctricas que inundarían, en caso de llevarse a cabo el proyecto, casi 6.000 hectáreas de territorio de alto valor ecológico. El proyecto afectaría a Parques Naturales y áreas protegidas. Además, debe ir acompañado de la construcción de la red de transmisión eléctrica de más larga del mundo, con más de 2.000 kilómetros de longitud para transportar la energía desde la Patagonia hasta Santiago.
Greenpeace se opone a este proyecto por sus enormes impactos ambientales, y está realizando una campaña de protesta contra el mismo. Por ello, el pasado 27 de julio activistas de la organización desplegaron una enorme pancarta en la fachada de la sede de Endesa en Madrid para pedirle a la eléctrica que abandone su plan de construcción de las represas en una zona casi virgen.
Según la ministra de Medio Ambiente de Chile, ante la insólita situación de la escasa calidad del Estudio presentado por las empresas promotoras quedan dos únicas opciones: que la empresa retire voluntariamente el Estudio o que lo mantenga.
“El proyecto Hidraysen nunca podría salir adelante si se siguen criterios técnicos y ambientales. Esperamos que Endesa retire el proyecto, y que la presión política no convierta mañana en bueno lo que hoy es inaceptable”, ha asegurado Juan López de Uralde, director de Greenpeace España.
Fuente: http://www.agroterra.com/
Activistas y escaladores de la organización ecologista Greenpeace han descolgado una enorme pancarta de la sede madrileña de la multinacional eléctrica española ENDESA. Los ecologistas exigen a Endesa que abandone sus planes de construir cinco grandes presas en la Patagonia chilena.
El Estudio de Impacto Ambiental (EIA) presentado por Endesa para su proyecto energético Hidraysén en la Patagonia chilena ha recibido numerosas críticas de las más altas instituciones del país sudamericano. La mayoría de las opiniones coinciden en que el estudio no es riguroso ni completo.
Entre las abundantes críticas algunas se refieren a la falta de precisión sobre el número de hectáreas inundadas o la cuota máxima de inundación; extensión de bosque afectada; o deficiencias en la calidad de la cartografía.
De las 36 instituciones gubernamentales y ambientales chilenas implicadas en la Evaluación, 32 han rechazado el proyecto Hidroaysén y han presentado más de mil observaciones al Estudio de Impacto Ambiental (EIA). Incluso la ministra de Medio Ambiente de Chile, Ana Lya Uriarte, denunció que el Estudio de Impacto presentado por las promotoras del proyecto “no está a la altura” de la evaluación.
Las empresas Endesa y Colbún pretenden construir en los ríos patagónicos Baker y Pascua cinco grandes presas hidroeléctricas que inundarían, en caso de llevarse a cabo el proyecto, casi 6.000 hectáreas de territorio de alto valor ecológico. El proyecto afectaría a Parques Naturales y áreas protegidas. Además, debe ir acompañado de la construcción de la red de transmisión eléctrica de más larga del mundo, con más de 2.000 kilómetros de longitud para transportar la energía desde la Patagonia hasta Santiago.
Greenpeace se opone a este proyecto por sus enormes impactos ambientales, y está realizando una campaña de protesta contra el mismo. Por ello, el pasado 27 de julio activistas de la organización desplegaron una enorme pancarta en la fachada de la sede de Endesa en Madrid para pedirle a la eléctrica que abandone su plan de construcción de las represas en una zona casi virgen.
Según la ministra de Medio Ambiente de Chile, ante la insólita situación de la escasa calidad del Estudio presentado por las empresas promotoras quedan dos únicas opciones: que la empresa retire voluntariamente el Estudio o que lo mantenga.
“El proyecto Hidraysen nunca podría salir adelante si se siguen criterios técnicos y ambientales. Esperamos que Endesa retire el proyecto, y que la presión política no convierta mañana en bueno lo que hoy es inaceptable”, ha asegurado Juan López de Uralde, director de Greenpeace España.
Fuente: http://www.agroterra.com/