Se necesitan voluntarios para refrescar la naturaleza




Juan Alonso 

Quienes dejen de usar sus autos regalarán aire puro
Los que no renueven sus aparatos pintarán de alegría los pájaros
Cuantos coman los frutos del campo que tienen a la vista evitarán las estelas de petróleo que hacen los lejanos
Aquellos que opten por departamentos pequeños harán grandes otra vez los hielos de los polos
Todos los que cierren fábricas inútiles guardarán esa energía para la post-historia de los niños por nacer
La duda es cuántos acudirán a salvar la Tierra de quemarse
¿Cuántos santos aceptarán un sacrificio por sus hermanos pobres?
La invitación está escrita
en los arrecifes, los osos nadando sin hielo,
en campos de cultivo secos
y todos los convocados saben leer

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