Chile: Paralizan las Obras de la Mega Central Mediterráneo en la cuenca del río Puelo
A casi 3 años de interpuesta la primera denuncia en contra de la construcción ilegal del camino que conduce a las obras de la Mega Central Mediterráneo que se pretende construir en el Río Manso, Cuenca del Río Puelo, Comuna de Cochamó, (denuncia interpuesta en 2013 por Mauricio Fierro de la Ong GeoAustral) el Fiscal Instructor de la División de Sanción y Cumplimiento de la Superintendencia de Medio Ambiente, Camilo Orchard Rieiro, ha resuelto formular cargos, por elusión de proceso de calificación ambiental, en contra de la sociedad Inversiones y Rentas Los Andes S.A. (IRLA), relacionada con los dueños de la Central, que actualmente se encuentran ejecutando las obras del referido camino, y solicita al Superintendente de Medio Ambiente la adopción de medidas destinadas a detener su construcción (Res. Exenta Nº 1/Rol D-073-2015).
El camino ya tiene 20 km construidos y se encuentra a una distancia de 7 km de la bocatoma proyectada para la Central y a 1km del punto de devolución de sus aguas. Pese a que sus propietarios han negado reiteradamente que el propósito de la senda sea la construcción de la Central (Roberto Hagemann, socio de Mediterráneo, ha señalado que éste camino de millones de dólares es para generar conectividad con su Fundo, eludiendo por esta vía su sometimiento a evaluación ambiental), la verdad es que sin éste camino de acceso el inicio de las obras es imposible, puesto que no existe otra vía de acceso.
La Resolución del Fiscal instructor, que considera la infracción como gravísima, se basa en que el camino debió ingresar a evaluación ambiental por que se emplaza en una zona de interés turístico, es decir en un área bajo protección oficial.
Rodrigo Condeza Presidente de la Corporación Puelo Patagonia señaló que: “Si bien nos alegra la Resolución, lamentamos profundamente su retraso. El camino de IRLA ya ha provocado enormes daños al paisaje, al bosque y a la fauna debido a la tala, las tronaduras y al desmoronamiento de los taludes. Seguiremos trabajando para que los autores de los daños asuman su responsabilidad, reparen íntegramente el desastre ambiental ocasionado y, se respete en el futuro la vocación de desarrollo de estos territorios y sus comunidades en base a conductas amigables con el ambiente.”
Recordemos que los habitantes de Puelo acusan a Mediterráneo de haber abusado de su influencia en las autoridades para pavimentar la aprobación del proyecto, aprobación que se ratificó por el Comité de Ministros de fecha 2 de Noviembre último, pese a que adolece de graves irregularidades, omisiones y deficiencias que no fueron resueltas durante el proceso de evaluación, y que aún hoy, continúan sin solución. La envergadura de las acusaciones abarca desde la supresión de mala fe de antecedentes relativos a especies nativas por parte de las consultoras que participaron en la elaboración del proyecto, la omisión de análisis de los eventuales riesgos para la vida de las personas por tratarse de una zona de frecuentes aludes, la negativa reiterada de estudiar especies en peligro de extinción como el alerce, el huillín, e incluso el huemul. Especialmente grave resulta ser que no se ha realizado el proceso de consulta indígena a que obliga la Resolución 169 de la OIT, aún cuando en el lugar habitan al menos 4 familias pertenecientes a nuestros pueblos originarios.
El proyecto de la Central contradice la Estrategia de Desarrollo Regional de la Región de Los Lagos 2009-2020, que supone valorar, fomentar y reforzar iniciativas tendientes a la protección de la biodiversidad, la preservación de ecosistemas y el uso sustentable del territorio regional; el fortalecimiento y mejoramiento de áreas protegidas públicas y privadas existentes, además de fomentar la inclusión de nuevas áreas al sistema, la declaración por parte del Servicio Nacional de Turismo (SERNATUR) de la Zona como de Interés Turístico (ZOIT) además de que se trata de la Reserva de la Biosfera de la UNESCO denominada “Bosques Templados Lluviosos de Los Andes Australes”.
Fuente: Corporación Puelo Patagonia - Foto: Bosque nativo arrasado por camino ilegal.