Un cambio de narrativa para un futuro hacia el bienvivir
“Y
parte de esto es venir con una nueva historia, una nueva imagen, una
nueva forma de acercarse a esto, y cambiar nuestro comportamiento de una
manera que nos lleve a un enfoque sostenible para nuestra civilización,
en oposición con un enfoque destructivo.” (
Edgar Mitchell, astronauta
del Apolo XIV)
Autonomía y Bienvivir
Como relataba en el anterior artículo sobre el día Internacional de la Madre Tierra, tomar conciencia sobre dos elementos estructurales, que metafóricamente se asemejan al binomio espacio-tiempo, podrían encaminarnos hacia un bienvivir. En aquel artículo hablaba sobre el efecto perspectiva, la experimentación transformadora que muchos astronautas sienten cuando observan la Tierra desde el espacio y su simbología para el bienvivir en la Tierra. En este artículo analizaré el segundo elemento, la narrativa que hilvana nuestro tiempo sobre la Tierra y como esta nos condiciona en nuestro malvivir o, al contrario, en nuestro bienvivir si somos conscientes de ella.
El cómico George Carlin irónicamente describe la narrativa o el marco en el que una gran parte de la población mundial estamos inmersos. Cambiar esa narrativa requiere un gran esfuerzo cognitivo y emocional que la mayoría de la gente no alcanza a vislumbrar pero que otra pequeña minoría individualmente (Vandana Shiva, Naomi Klein...) y a través de colectivos (Movimientos de transición, Comunes, Decrecimiento...) ya han empezado a recorrer. Muchos encontramos disonancias entre los mensajes y valores que dominan nuestra cultura con desagradables resultados que observamos como las crisis medioambientales, crisis sociales y crisis personales de nuestros allegados o de nosotros mismos. El difícil desafío consiste en pasar de esa cultura, que además se retroalimenta positivamente para subsistir a través de los grandes medios, películas y redes sociales, a una nueva cultura que, en principio, al estilo hipocrático, por lo menos no haga daño.
"Los marcos no pueden verse ni oírse. Forman parte de lo que los científicos cognitivos llaman el "inconsciente cognitivo" estructuras de nuestro cerebro a las que no podemos acceder conscientemente, pero que conocemos por sus consecuencias. (...) Cambiar de marco es cambiar el modo que tiene la gente de ver el mundo. Es cambiar lo que se entiende por sentido común. Puesto que el lenguaje activa los marcos, los nuevos marcos requieren un nuevo lenguaje. Pensar de modo diferente requiere hablar de modo diferente." (George Lakoff)
El lingüísta George Lakoff puede darnos ciertas claves para ese desafío. Los marcos y las metáforas condicionan nuestra historia y con ella influimos y somos influidos por los demás. Un análisis de la teoría de Lakoff sobre los marcos y las metáforas alargaría el artículo por lo que recomiendo buscar en internet sobre ello o bien leer alguno de sus libros. Personalmente recomiendo “No pienses en un elefante” y el ya clásico que escribió con Johnson “Metáforas de la vida cotidiana”
Como relataba en el anterior artículo sobre el día Internacional de la Madre Tierra, tomar conciencia sobre dos elementos estructurales, que metafóricamente se asemejan al binomio espacio-tiempo, podrían encaminarnos hacia un bienvivir. En aquel artículo hablaba sobre el efecto perspectiva, la experimentación transformadora que muchos astronautas sienten cuando observan la Tierra desde el espacio y su simbología para el bienvivir en la Tierra. En este artículo analizaré el segundo elemento, la narrativa que hilvana nuestro tiempo sobre la Tierra y como esta nos condiciona en nuestro malvivir o, al contrario, en nuestro bienvivir si somos conscientes de ella.
El cómico George Carlin irónicamente describe la narrativa o el marco en el que una gran parte de la población mundial estamos inmersos. Cambiar esa narrativa requiere un gran esfuerzo cognitivo y emocional que la mayoría de la gente no alcanza a vislumbrar pero que otra pequeña minoría individualmente (Vandana Shiva, Naomi Klein...) y a través de colectivos (Movimientos de transición, Comunes, Decrecimiento...) ya han empezado a recorrer. Muchos encontramos disonancias entre los mensajes y valores que dominan nuestra cultura con desagradables resultados que observamos como las crisis medioambientales, crisis sociales y crisis personales de nuestros allegados o de nosotros mismos. El difícil desafío consiste en pasar de esa cultura, que además se retroalimenta positivamente para subsistir a través de los grandes medios, películas y redes sociales, a una nueva cultura que, en principio, al estilo hipocrático, por lo menos no haga daño.
"Los marcos no pueden verse ni oírse. Forman parte de lo que los científicos cognitivos llaman el "inconsciente cognitivo" estructuras de nuestro cerebro a las que no podemos acceder conscientemente, pero que conocemos por sus consecuencias. (...) Cambiar de marco es cambiar el modo que tiene la gente de ver el mundo. Es cambiar lo que se entiende por sentido común. Puesto que el lenguaje activa los marcos, los nuevos marcos requieren un nuevo lenguaje. Pensar de modo diferente requiere hablar de modo diferente." (George Lakoff)
El lingüísta George Lakoff puede darnos ciertas claves para ese desafío. Los marcos y las metáforas condicionan nuestra historia y con ella influimos y somos influidos por los demás. Un análisis de la teoría de Lakoff sobre los marcos y las metáforas alargaría el artículo por lo que recomiendo buscar en internet sobre ello o bien leer alguno de sus libros. Personalmente recomiendo “No pienses en un elefante” y el ya clásico que escribió con Johnson “Metáforas de la vida cotidiana”
Etimología de Narrar
“Cuando uno sabe algo, lo quiere narrar. La palabra “narrar” viene del latín narrare (contar) y este se asocia con una raíz indoeuropea *gno presente en: conocer, ignorancia, noble, norma, nota, noticia y notario. (...) En concreto el verbo latino narrare es un denominativo formado a partir del adjetivo latino gnarus (conocedor, quien conoce) (...) En cualquier caso narrare en origen significa “hacer a uno conocedor” (de cualquier cosa). (Tomado de diccionario etimológico en internet)
Una vez conocido la etimología de narrar, veamos con algún ejemplo cuales son las narraciones con las que vivimos. Para ello, me valdré de dos marcos narrativos que propone David Korten en su libro “Change the Story, change the future: a living economy for a living Earth”. (Cambiar la narrativa, cambiar el futuro: Una economía de la vida para un planeta vivo)
La primera narrativa está inscrita en el marco “Tiempo es Dinero” y la segunda en el marco “Tiempo es vida”. En nuestra vida no son marcos excluyentes, ya que hay momentos en los que podemos estar en uno de ellos para pasar en el instante siguiente al otro. Lo que sí parece más real es que en nuestra cultura prevalece el primero dejando poco espacio para el segundo. Debido a las consecuencias sociales y medioambientales que el primer marco está ocasionando, sería necesario que el timón de una nueva cultura fuese circunscrito en un nuevo marco, un marco donde el tiempo es vida.
1- "Tiempo es Dinero"
"Vivimos en una nación donde los doctores destruyen la salud, los abogados destruyen la justicia, las universidades destruyen el conocimiento, los gobiernos destruyen la libertad, la prensa destruye la información, la religión destruye la moral y los bancos destruyen la economía." (Chris Hedges)
David Korten nos habla del marco económico que domina principalmente los medios de comunicación y con ello nuestra cultura. Es una simbiosis que se retroalimenta por ambas partes. Este es el marco narrativo en el que principalmente estamos viviendo. Él lo llama la narración del dinero y de los mercados sagrados. Esos fragmentos o estrofas que lo componen pudieran ser los pequeños memes que repitiéndose a lo largo del tiempo conforman finalmente ese gran marco donde el tiempo es dinero.
La narración del dinero y de los mercados sagrados
El tiempo es dinero. El dinero es riqueza. El consumismo material es el camino hacia la felicidad. La fabricación del dinero crea riqueza, impulsa el consumo para aumentar la felicidad, y es el propósito definido de individuos, negocios y de la economía. Los que ganan dinero son creadores de riqueza de la sociedad.
Los estilos de vida opulentos son una recompensa justa por su contribución. La pobreza es una consecuencia de la pereza. Los seres humanos son por naturaleza competidores individualistas. Esto es una bendición, ya que, liberado de una regulación distorsionada, la mano invisible de los mercados canaliza los fines de lucro individual y corporativo que maximizan el crecimiento económico y por lo tanto la riqueza y el bienestar de todos.
Del mismo modo que los ingresos de una persona es una medida de su valor y de su contribución a la sociedad, así también el beneficio de la corporación es la medida de su valor y su contribución. Como una entidad legal que agrega talentos e intereses para aumentar la eficiencia económica de los individuos dentro de ella, la corporación se considera adecuada para ser una persona en su propio derecho y con derecho a los mismos derechos que cualquier otra persona.
A medida que las empresas crean riqueza, los gobiernos la consumen. La función del gobierno debería limitarse a asegurar la defensa común, garantizar los derechos de propiedad y el cumplimiento de los contratos.
La desigualdad económica y los daños ambientales son un costo lamentable pero necesario e inevitable del crecimiento del PIB. El crecimiento del PIB, a su vez elimina la pobreza, impulsa la innovación tecnológica para liberarnos de nuestra dependencia de la naturaleza, y trae prosperidad universal y perpetua para todos. No hay ninguna alternativa viable a una economía de libre mercado con fines de lucro. (David Korten)
2- "Tiempo es Vida"
"¿No le gustaría ser capaz de renunciar a todas sus pertenencias, y ganar la libertad y el tiempo que pierde en defenderlas?" Joan Manuel Serrat (A usted)
En cuanto al marco “el tiempo es vida”, según Korten, este lo componen una triada de narrativas. Empezando por la más grande, está la narrativa del “Universo vivo”, donde se circunscribe la narrativa de la “Tierra Viva” y por último se encuentra la narrativa de una “Economía de la vida” que está inscrita en la anterior. Al contrario que el marco anterior, la economía como proceso humano, es dependiente de la Tierra y no al contrario.
Narrativa 1: “Universo vivo”
La narrativa de un “Universo Vivo” reconoce y celebra la unidad de todo ser. Conecta los dominios de la ciencia y la religión y extrae la amplitud y profundidad de la experiencia y el conocimiento humanos. Revela el asombro y la complejidad de los procesos creativos, auto-organizados por los cuales el universo se desarrolla hacia una mayor complejidad, belleza, conciencia y posibilidad.
Respetados científicos escriben libros populares sobre la conciencia, la inteligencia y la necesidad de avanzar más allá del reduccionismo material en la ciencia. Los principales pensadores espirituales escriben libros y artículos sobre el activismo sagrado que conecta los puntos de vista de la investigación científica y espiritual. Las conversaciones interreligiosas van más allá de la búsqueda de la tolerancia religiosa mutua para reconocer, honrar, y sintetizar las aportaciones de diversas tradiciones espirituales con las contribuciones de la ciencia. La síntesis emergente señala desde la cosmología “Patriarcal Distante” la idea de que existe la agencia y el propósito en la creación. De la cosmología de la “Gran Máquina”, apunta a la idea de que hay orden y azar en la creación. De la cosmología de la “Unidad Mística” extrae los puntos de vista de que la materia es una construcción mental, la conciencia es el terreno unificador de la creación, que todos estamos conectados, y que el ego puede ser una barrera a la iluminación si no hay una alineación disciplinada con el propósito cósmico. (David Korten)
Narrativa 2: “Tierra Viva”
La narrativa de la “Tierra Viva” honra a la Tierra como una comunidad de vida y madre biológica de nuestras especies siendo creativa, adaptativa, resiliente, evolutiva y auto organizada. Se reconoce nuestra dependencia y nuestra responsabilidad de contribuir a la adaptación, procesos resilientes mediante los cuales, la comunidad de vida de la Tierra, captura, procesa y comparte energía, nutrientes, agua e información para mantener y mejorar las condiciones de la vida en la Tierra.
Elementos de esta narración de la “Tierra Viva” se encuentran en foros internacionales y locales. Con el liderazgo de las comunidades indígenas, grupos de la sociedad civil crearon una Declaración Universal de los Derechos de la Madre Tierra en la Conferencia Mundial de los Pueblos sobre el Cambio Climático y los Derechos de la Madre Tierra en Cochabamba, Bolivia, en 2010. Allí se incluye una declaración elocuente afirmando a la Tierra como una ser viviente. (Ver "Declaración Universal de los Derechos de la Madre Tierra.") (David Korten)
Narrativa 3: “Economía de la Vida”
La narrativa de una “Economía de la Vida” enmarca la cultura y las instituciones de una nueva economía que funciona en una asociación colaborativa con la naturaleza para mantener las condiciones esenciales para toda la vida. Se apoya y mejora los sistemas vivos de la Tierra. Proporciona oportunidades de vida para todas las personas. Es radicalmente democrática. Y avanza el viaje evolutivo de la “Tierra Viva”.
La narrativa de la “Economía de la Vida” es parte integral de los movimientos de rápido crecimiento de la “Nueva Economía”. La gente de negocios habla de la responsabilidad de la empresa para servir bien común. Los inversores hablan de un retorno que combina un rendimiento financiero modesto con los beneficios de vivir en una comunidad sana con un ecosistema saludable. Las homilías sobre la justicia económica del Papa Francisco alcanzan una enorme audiencia con verdades morales fundamentales. Grupos de liderazgo multirracial como Movimiento Generación avanzan un marco de una Tierra generativa entre los grupos de base. Recientes hallazgos en la ciencia afirman que nuestra salud depende de nuestra conexión con la naturaleza y una comunidad solidaria en la que la riqueza se distribuye equitativamente. Estamos aprendiendo que los actos de bondad traen alegría.
Economistas reflexivos proponen nuevos índices de rendimiento económico que reconocen los efectos perjudiciales del crecimiento económico en las personas y la naturaleza. Las comunidades locales se unen en alianzas nacionales e internacionales como la American Independent Business Alliance, la Business Alliance for Local Living Economies (BALLE), la New Economy Coalition y las ciudades en transición para reconstruir las economías locales basadas en empresas locales, conscientes medioambientalmente, de propiedad social. Medios de comunicación como YES! Magazine comparten las historias de posibilidad de tales iniciativas con una audiencia global en expansión.
Un amplio debate público ampliando combina estas ideas variadas en una gran síntesis narrativa que revela la interconexión inseparable de todo ser, la presencia y el poder creativo de una acción inteligentemente distribuida, y con un profundo propósito cósmico. La narración que emerge da a los seres humanos un significado profundo, presenta una visión convincente de las posibilidades humanas, e invita a nuestra participación activa para transformar esa visión en una realidad.
Al mismo tiempo, la narración del dinero y el mercado sagrados sigue perdiendo credibilidad. Los robots corporativos de la economía del dinero son mucho más vulnerables de lo que ellos – o nosotros – nos damos cuenta. (David Korten)
Nueva narrativa y pensamiento crítico
“La gente entendió el mundo por primera vez a través de relatos antes de empezar a pensar científicamente. La mitología es más antigua que la filosofía.” (Rolf Dobelli)
Como mencionaba en el anterior artículo, Daniel Kahneman nos indicaba que los humanos sufrímos de muchos sesgos y falacias cognitivas debido a nuestra estructura cerebral con dos modelos que actuaban en nuestro comportamiento; uno más emocional y otro más racional. Entre uno de esos sesgos no encontramos el sesgo de confirmación el cual describe nuestra tendencia a interpretar información que confirma nuestras preconcepciones.
"El noventa por ciento de la experiencia humana que no encaja en los patrones narrativos establecidos cae en el olvido." (Mason Cooley)
Desgraciadamente ante un marco o enfoque tan pernicioso social y medioambientalmente como en el que nos encontramos, el funcionamiento de nuestra estructura cerebral no nos hace muy proclives a los cambios, sino que nos mantiene al status quo o a seguir la corriente de la mayoría.
"La psicología cognitiva ha demostrado que la mente comprende mejor los hechos cuando estos están entrelazados en una estructura conceptual, tal como un relato, un mapa mental, o una teoría intuitiva. Los hechos que están desconectados en la mente son como las páginas de enlaces eliminados en internet: pudieran no existir ". (Steve Pinker)
En cuanto a las falacias nos encontramos entre otras a la falacia narrativa, expuesta por Nassim Taleb en el libro “El cisne negro” donde describía que vagas historias del pasado moldeaban nuestra visión del mundo y nuestras expectativas de futuro. No me caben dudas de que la narrativa descrita por David Korten sobre el dinero y los mercados sagrados encaja dentro de esas falacias. El cambio de narrativa es necesario, pero hay que tener prudencia ante cualquier nueva narrativa que la sustituya no sea que esta cause más daño que la anterior.
"La gente no piensa en términos de información, piensan en términos de narrativas. Pero mientras la gente se centra en la historia en sí, la información viene en el viaje". (Jonah Berger)
En mi opinión, algunas de las cualidades que debe tener cualquier proceso cultural de cambio en este mundo tan complejo, debería ser la inclusión y participación de toda la gente, una nueva educación para un mundo cambiante y complejo con potenciación de habilidades como la curiosidad (para abrirse a los sesgos de confirmación), la creatividad (para potenciar nuevas ideas y soluciones), la iniciativa (como modelo de aprender haciendo), el pensamiento multidisciplinar (para integrar la fragmentación en la que conviven las diferentes disciplinas) y la empatía (para salir de nuestro ego). Finalmente, junto con la educación, su pareja para una mayor consciencia, la ética, principalmente enfocada en valores universalistas.
Efecto perspectiva y nueva narrativa cosmológica y cultural en acción
"Este mundo en su totalidad ha de ser considerado una única comunidad de ciudadanos."
“Cuando uno sabe algo, lo quiere narrar. La palabra “narrar” viene del latín narrare (contar) y este se asocia con una raíz indoeuropea *gno presente en: conocer, ignorancia, noble, norma, nota, noticia y notario. (...) En concreto el verbo latino narrare es un denominativo formado a partir del adjetivo latino gnarus (conocedor, quien conoce) (...) En cualquier caso narrare en origen significa “hacer a uno conocedor” (de cualquier cosa). (Tomado de diccionario etimológico en internet)
Una vez conocido la etimología de narrar, veamos con algún ejemplo cuales son las narraciones con las que vivimos. Para ello, me valdré de dos marcos narrativos que propone David Korten en su libro “Change the Story, change the future: a living economy for a living Earth”. (Cambiar la narrativa, cambiar el futuro: Una economía de la vida para un planeta vivo)
La primera narrativa está inscrita en el marco “Tiempo es Dinero” y la segunda en el marco “Tiempo es vida”. En nuestra vida no son marcos excluyentes, ya que hay momentos en los que podemos estar en uno de ellos para pasar en el instante siguiente al otro. Lo que sí parece más real es que en nuestra cultura prevalece el primero dejando poco espacio para el segundo. Debido a las consecuencias sociales y medioambientales que el primer marco está ocasionando, sería necesario que el timón de una nueva cultura fuese circunscrito en un nuevo marco, un marco donde el tiempo es vida.
1- "Tiempo es Dinero"
"Vivimos en una nación donde los doctores destruyen la salud, los abogados destruyen la justicia, las universidades destruyen el conocimiento, los gobiernos destruyen la libertad, la prensa destruye la información, la religión destruye la moral y los bancos destruyen la economía." (Chris Hedges)
David Korten nos habla del marco económico que domina principalmente los medios de comunicación y con ello nuestra cultura. Es una simbiosis que se retroalimenta por ambas partes. Este es el marco narrativo en el que principalmente estamos viviendo. Él lo llama la narración del dinero y de los mercados sagrados. Esos fragmentos o estrofas que lo componen pudieran ser los pequeños memes que repitiéndose a lo largo del tiempo conforman finalmente ese gran marco donde el tiempo es dinero.
La narración del dinero y de los mercados sagrados
El tiempo es dinero. El dinero es riqueza. El consumismo material es el camino hacia la felicidad. La fabricación del dinero crea riqueza, impulsa el consumo para aumentar la felicidad, y es el propósito definido de individuos, negocios y de la economía. Los que ganan dinero son creadores de riqueza de la sociedad.
Los estilos de vida opulentos son una recompensa justa por su contribución. La pobreza es una consecuencia de la pereza. Los seres humanos son por naturaleza competidores individualistas. Esto es una bendición, ya que, liberado de una regulación distorsionada, la mano invisible de los mercados canaliza los fines de lucro individual y corporativo que maximizan el crecimiento económico y por lo tanto la riqueza y el bienestar de todos.
Del mismo modo que los ingresos de una persona es una medida de su valor y de su contribución a la sociedad, así también el beneficio de la corporación es la medida de su valor y su contribución. Como una entidad legal que agrega talentos e intereses para aumentar la eficiencia económica de los individuos dentro de ella, la corporación se considera adecuada para ser una persona en su propio derecho y con derecho a los mismos derechos que cualquier otra persona.
A medida que las empresas crean riqueza, los gobiernos la consumen. La función del gobierno debería limitarse a asegurar la defensa común, garantizar los derechos de propiedad y el cumplimiento de los contratos.
La desigualdad económica y los daños ambientales son un costo lamentable pero necesario e inevitable del crecimiento del PIB. El crecimiento del PIB, a su vez elimina la pobreza, impulsa la innovación tecnológica para liberarnos de nuestra dependencia de la naturaleza, y trae prosperidad universal y perpetua para todos. No hay ninguna alternativa viable a una economía de libre mercado con fines de lucro. (David Korten)
2- "Tiempo es Vida"
"¿No le gustaría ser capaz de renunciar a todas sus pertenencias, y ganar la libertad y el tiempo que pierde en defenderlas?" Joan Manuel Serrat (A usted)
En cuanto al marco “el tiempo es vida”, según Korten, este lo componen una triada de narrativas. Empezando por la más grande, está la narrativa del “Universo vivo”, donde se circunscribe la narrativa de la “Tierra Viva” y por último se encuentra la narrativa de una “Economía de la vida” que está inscrita en la anterior. Al contrario que el marco anterior, la economía como proceso humano, es dependiente de la Tierra y no al contrario.
Narrativa 1: “Universo vivo”
La narrativa de un “Universo Vivo” reconoce y celebra la unidad de todo ser. Conecta los dominios de la ciencia y la religión y extrae la amplitud y profundidad de la experiencia y el conocimiento humanos. Revela el asombro y la complejidad de los procesos creativos, auto-organizados por los cuales el universo se desarrolla hacia una mayor complejidad, belleza, conciencia y posibilidad.
Respetados científicos escriben libros populares sobre la conciencia, la inteligencia y la necesidad de avanzar más allá del reduccionismo material en la ciencia. Los principales pensadores espirituales escriben libros y artículos sobre el activismo sagrado que conecta los puntos de vista de la investigación científica y espiritual. Las conversaciones interreligiosas van más allá de la búsqueda de la tolerancia religiosa mutua para reconocer, honrar, y sintetizar las aportaciones de diversas tradiciones espirituales con las contribuciones de la ciencia. La síntesis emergente señala desde la cosmología “Patriarcal Distante” la idea de que existe la agencia y el propósito en la creación. De la cosmología de la “Gran Máquina”, apunta a la idea de que hay orden y azar en la creación. De la cosmología de la “Unidad Mística” extrae los puntos de vista de que la materia es una construcción mental, la conciencia es el terreno unificador de la creación, que todos estamos conectados, y que el ego puede ser una barrera a la iluminación si no hay una alineación disciplinada con el propósito cósmico. (David Korten)
Narrativa 2: “Tierra Viva”
La narrativa de la “Tierra Viva” honra a la Tierra como una comunidad de vida y madre biológica de nuestras especies siendo creativa, adaptativa, resiliente, evolutiva y auto organizada. Se reconoce nuestra dependencia y nuestra responsabilidad de contribuir a la adaptación, procesos resilientes mediante los cuales, la comunidad de vida de la Tierra, captura, procesa y comparte energía, nutrientes, agua e información para mantener y mejorar las condiciones de la vida en la Tierra.
Elementos de esta narración de la “Tierra Viva” se encuentran en foros internacionales y locales. Con el liderazgo de las comunidades indígenas, grupos de la sociedad civil crearon una Declaración Universal de los Derechos de la Madre Tierra en la Conferencia Mundial de los Pueblos sobre el Cambio Climático y los Derechos de la Madre Tierra en Cochabamba, Bolivia, en 2010. Allí se incluye una declaración elocuente afirmando a la Tierra como una ser viviente. (Ver "Declaración Universal de los Derechos de la Madre Tierra.") (David Korten)
Narrativa 3: “Economía de la Vida”
La narrativa de una “Economía de la Vida” enmarca la cultura y las instituciones de una nueva economía que funciona en una asociación colaborativa con la naturaleza para mantener las condiciones esenciales para toda la vida. Se apoya y mejora los sistemas vivos de la Tierra. Proporciona oportunidades de vida para todas las personas. Es radicalmente democrática. Y avanza el viaje evolutivo de la “Tierra Viva”.
La narrativa de la “Economía de la Vida” es parte integral de los movimientos de rápido crecimiento de la “Nueva Economía”. La gente de negocios habla de la responsabilidad de la empresa para servir bien común. Los inversores hablan de un retorno que combina un rendimiento financiero modesto con los beneficios de vivir en una comunidad sana con un ecosistema saludable. Las homilías sobre la justicia económica del Papa Francisco alcanzan una enorme audiencia con verdades morales fundamentales. Grupos de liderazgo multirracial como Movimiento Generación avanzan un marco de una Tierra generativa entre los grupos de base. Recientes hallazgos en la ciencia afirman que nuestra salud depende de nuestra conexión con la naturaleza y una comunidad solidaria en la que la riqueza se distribuye equitativamente. Estamos aprendiendo que los actos de bondad traen alegría.
Economistas reflexivos proponen nuevos índices de rendimiento económico que reconocen los efectos perjudiciales del crecimiento económico en las personas y la naturaleza. Las comunidades locales se unen en alianzas nacionales e internacionales como la American Independent Business Alliance, la Business Alliance for Local Living Economies (BALLE), la New Economy Coalition y las ciudades en transición para reconstruir las economías locales basadas en empresas locales, conscientes medioambientalmente, de propiedad social. Medios de comunicación como YES! Magazine comparten las historias de posibilidad de tales iniciativas con una audiencia global en expansión.
Un amplio debate público ampliando combina estas ideas variadas en una gran síntesis narrativa que revela la interconexión inseparable de todo ser, la presencia y el poder creativo de una acción inteligentemente distribuida, y con un profundo propósito cósmico. La narración que emerge da a los seres humanos un significado profundo, presenta una visión convincente de las posibilidades humanas, e invita a nuestra participación activa para transformar esa visión en una realidad.
Al mismo tiempo, la narración del dinero y el mercado sagrados sigue perdiendo credibilidad. Los robots corporativos de la economía del dinero son mucho más vulnerables de lo que ellos – o nosotros – nos damos cuenta. (David Korten)
Nueva narrativa y pensamiento crítico
“La gente entendió el mundo por primera vez a través de relatos antes de empezar a pensar científicamente. La mitología es más antigua que la filosofía.” (Rolf Dobelli)
Como mencionaba en el anterior artículo, Daniel Kahneman nos indicaba que los humanos sufrímos de muchos sesgos y falacias cognitivas debido a nuestra estructura cerebral con dos modelos que actuaban en nuestro comportamiento; uno más emocional y otro más racional. Entre uno de esos sesgos no encontramos el sesgo de confirmación el cual describe nuestra tendencia a interpretar información que confirma nuestras preconcepciones.
"El noventa por ciento de la experiencia humana que no encaja en los patrones narrativos establecidos cae en el olvido." (Mason Cooley)
Desgraciadamente ante un marco o enfoque tan pernicioso social y medioambientalmente como en el que nos encontramos, el funcionamiento de nuestra estructura cerebral no nos hace muy proclives a los cambios, sino que nos mantiene al status quo o a seguir la corriente de la mayoría.
"La psicología cognitiva ha demostrado que la mente comprende mejor los hechos cuando estos están entrelazados en una estructura conceptual, tal como un relato, un mapa mental, o una teoría intuitiva. Los hechos que están desconectados en la mente son como las páginas de enlaces eliminados en internet: pudieran no existir ". (Steve Pinker)
En cuanto a las falacias nos encontramos entre otras a la falacia narrativa, expuesta por Nassim Taleb en el libro “El cisne negro” donde describía que vagas historias del pasado moldeaban nuestra visión del mundo y nuestras expectativas de futuro. No me caben dudas de que la narrativa descrita por David Korten sobre el dinero y los mercados sagrados encaja dentro de esas falacias. El cambio de narrativa es necesario, pero hay que tener prudencia ante cualquier nueva narrativa que la sustituya no sea que esta cause más daño que la anterior.
"La gente no piensa en términos de información, piensan en términos de narrativas. Pero mientras la gente se centra en la historia en sí, la información viene en el viaje". (Jonah Berger)
En mi opinión, algunas de las cualidades que debe tener cualquier proceso cultural de cambio en este mundo tan complejo, debería ser la inclusión y participación de toda la gente, una nueva educación para un mundo cambiante y complejo con potenciación de habilidades como la curiosidad (para abrirse a los sesgos de confirmación), la creatividad (para potenciar nuevas ideas y soluciones), la iniciativa (como modelo de aprender haciendo), el pensamiento multidisciplinar (para integrar la fragmentación en la que conviven las diferentes disciplinas) y la empatía (para salir de nuestro ego). Finalmente, junto con la educación, su pareja para una mayor consciencia, la ética, principalmente enfocada en valores universalistas.
Efecto perspectiva y nueva narrativa cosmológica y cultural en acción
"Este mundo en su totalidad ha de ser considerado una única comunidad de ciudadanos."
(Marco Tulio Cicerón)
El documental “Mañana”, ganador en Francia del César al mejor documental recoge sinérgicamente esos dos elementos estructurales para el bienvivir.
Parafraseando a Ortega y Gasset, “Nosotros y nuestras circunstancias”, pudiera ser el nuevo lema para los procesos de cambio. Por una parte, las circunstancias “espaciales” han cambiado. Ya no somos pequeños pueblos distribuidos a lo largo de la Tierra con una tecnología simple que apenas modifica el medio. Somos más y con una tecnología más destructiva para la Tierra. El efecto perspectiva de la Tierra como nave espacial de toda la especie está conllevando acciones glocales (pensamiento global, actuando localmente) tal como se indica en los diferentes lugares visitados por los documentalistas. Por otra parte, las circunstancias “temporales” también están variando. Se empieza a girar hacia un marco donde “el tiempo es vida” con acciones que respetan un marco narrativo principalmente de “Tierra Viva” y “Economía de la vida”.
Libros en español recomendados para profundizar sobre esta temática:
- Autoconstrucción. La transformación cultural que necesitamos.(2015) Jorge Riechmann
- Rutas sin mapa. Horizontes de transformación ecosocial. (2016) Emilio Santiago Muiño
Parafraseando a Ortega y Gasset, “Nosotros y nuestras circunstancias”, pudiera ser el nuevo lema para los procesos de cambio. Por una parte, las circunstancias “espaciales” han cambiado. Ya no somos pequeños pueblos distribuidos a lo largo de la Tierra con una tecnología simple que apenas modifica el medio. Somos más y con una tecnología más destructiva para la Tierra. El efecto perspectiva de la Tierra como nave espacial de toda la especie está conllevando acciones glocales (pensamiento global, actuando localmente) tal como se indica en los diferentes lugares visitados por los documentalistas. Por otra parte, las circunstancias “temporales” también están variando. Se empieza a girar hacia un marco donde “el tiempo es vida” con acciones que respetan un marco narrativo principalmente de “Tierra Viva” y “Economía de la vida”.
Libros en español recomendados para profundizar sobre esta temática:
- Autoconstrucción. La transformación cultural que necesitamos.(2015) Jorge Riechmann
- Rutas sin mapa. Horizontes de transformación ecosocial. (2016) Emilio Santiago Muiño
Fuente: decrecimiento.info