Los pingüinos africanos tienen un lenguaje similar al de los humanos
Un equipo de investigadores de Francia e Italia ha descubierto que las llamadas de los pingüinos africanos (Spheniscus demersus) se ajustan a las formas lingüísticas utilizadas por los humanos. Esta especie de pingüino, que se encuentra en peligro de extinción, es conocido por sus llamadas distintivas, que algunos describen como si un “burro rebuznara”.
En el estudio publicado en la revista Biology Letters, los científicos describen las grabaciones vocales de estos pingüinos y lo que aprendieron de ellas: en total recolectaron y analizaron 590 vocalizaciones de 28 machos adultos que viven en zoológicos italianos.
El análisis de estas vocalizaciones reveló que las llamadas de los pingüinos se ajustaban a las dos leyes lingüísticas desarrolladas para explicar cómo funcionan los idiomas humanos.
Según los expertos, las personas y otros animales que se comunican de forma concisa tienen más probabilidades de tener éxito en tareas como el apareamiento, una habilidad que se transmite a la descendencia.
Comportamiento
El Spheniscus demersus suele acicalarse en las costas africanas para eliminar parásitos que se almacenan en el plumaje. Utilizan sus patas para acicalarse la cabeza y su pico para quitar residuos de diferentes partes de su cuerpo. No son animales agresivos, sin embargo, en algunas ocasiones suelen presentarse peleas donde realizan persecuciones con sus alas abiertas y utilizan sus picos como principal arma de defensa. Son muy vocales en sociedad, pues utilizan tres tipos de sonidos o llamadas que sirven para delimitar territorio y prevenir intrusos, atraer parejas, y finalmente para ser reconocidos por sus polluelos en etapas del cuidado de las crías.
En el estudio publicado en la revista Biology Letters, los científicos describen las grabaciones vocales de estos pingüinos y lo que aprendieron de ellas: en total recolectaron y analizaron 590 vocalizaciones de 28 machos adultos que viven en zoológicos italianos.
El análisis de estas vocalizaciones reveló que las llamadas de los pingüinos se ajustaban a las dos leyes lingüísticas desarrolladas para explicar cómo funcionan los idiomas humanos.
Según los expertos, las personas y otros animales que se comunican de forma concisa tienen más probabilidades de tener éxito en tareas como el apareamiento, una habilidad que se transmite a la descendencia.
Comportamiento
El Spheniscus demersus suele acicalarse en las costas africanas para eliminar parásitos que se almacenan en el plumaje. Utilizan sus patas para acicalarse la cabeza y su pico para quitar residuos de diferentes partes de su cuerpo. No son animales agresivos, sin embargo, en algunas ocasiones suelen presentarse peleas donde realizan persecuciones con sus alas abiertas y utilizan sus picos como principal arma de defensa. Son muy vocales en sociedad, pues utilizan tres tipos de sonidos o llamadas que sirven para delimitar territorio y prevenir intrusos, atraer parejas, y finalmente para ser reconocidos por sus polluelos en etapas del cuidado de las crías.
Reproducción de los pingüinos africanos
Los pingüinos africanos son monógamos y cavan nidos en los suelos arenosos, debajo de las piedras o en zonas de escasa vegetación.
Se reúnen en las colonias para llevar a cabo la reproducción y antes del apareamiento el macho realiza rituales de cortejo con movimientos y vocalizaciones para que la hembra lo acepte.
Los pingüinos africanos regresan todos los años al mismo lugar de nidificación, que se efectúa de marzo a mayo en Sudáfrica y de noviembre a diciembre en Namibia. Las hembras colocan regularmente dos huevos que serán incubados por un período aproximado de cuarenta días. En la incubación, el macho y hembra se turnan para alimentarse y proteger el huevo.
Al nacer, los polluelos pesan alrededor de cien gramos y son atendidos y alimentados durante los próximos treinta días. Mientras los padres buscan alimento, los pequeños se mantienen en “guarderías” junto con otros recién nacidos para protección y calor, ya que sus plumas no se desarrollan hasta los dos o cuatro meses.
Promedio de vida
Esta especie de pingüino tiene un promedio de vida en estado salvaje de máximo veintisiete años, siendo en cautiverio un poco más larga. Los principales factores de mortalidad son por depredación, impacto humano y fenómenos naturales.
Entre sus depredadores naturales se encuentran los lobos marinos, tiburones, orcas, mangostas y aves marinas que suelen alimentarse de huevos o crías.
Referencia: Livio Favaro et al. Do penguins’ vocal sequences conform to linguistic laws?, Biology Letters (2020). DOI: 10.1098/rsbl.2019.0589
Fuente: Ecoportal.net
Los pingüinos africanos son monógamos y cavan nidos en los suelos arenosos, debajo de las piedras o en zonas de escasa vegetación.
Se reúnen en las colonias para llevar a cabo la reproducción y antes del apareamiento el macho realiza rituales de cortejo con movimientos y vocalizaciones para que la hembra lo acepte.
Los pingüinos africanos regresan todos los años al mismo lugar de nidificación, que se efectúa de marzo a mayo en Sudáfrica y de noviembre a diciembre en Namibia. Las hembras colocan regularmente dos huevos que serán incubados por un período aproximado de cuarenta días. En la incubación, el macho y hembra se turnan para alimentarse y proteger el huevo.
Al nacer, los polluelos pesan alrededor de cien gramos y son atendidos y alimentados durante los próximos treinta días. Mientras los padres buscan alimento, los pequeños se mantienen en “guarderías” junto con otros recién nacidos para protección y calor, ya que sus plumas no se desarrollan hasta los dos o cuatro meses.
Promedio de vida
Esta especie de pingüino tiene un promedio de vida en estado salvaje de máximo veintisiete años, siendo en cautiverio un poco más larga. Los principales factores de mortalidad son por depredación, impacto humano y fenómenos naturales.
Entre sus depredadores naturales se encuentran los lobos marinos, tiburones, orcas, mangostas y aves marinas que suelen alimentarse de huevos o crías.
Referencia: Livio Favaro et al. Do penguins’ vocal sequences conform to linguistic laws?, Biology Letters (2020). DOI: 10.1098/rsbl.2019.0589
Fuente: Ecoportal.net