La COP15 de Biodiversidad finalizó con un acuerdo de mínimos basado en falsas soluciones

La COP15 del Convenio de la Diversidad Biológica concluye con un nuevo Marco Mundial para la Biodiversidad basado en las falsas soluciones. El acuerdo, que ha sido forzado por la presidencia, ignora las objeciones de diferentes estados africanos, y no  sienta las bases para el cambio transformador que requiere abordar la crisis de biodiversidad.

Por Amigos de la Tierra

Denunciamos la gran influencia del lobby empresarial en las negociaciones que ha impedido tomar decisiones valientes y eficaces, sobre todo, para enfrentar la pérdida de biodiversidad en la escala y magnitud necesarias. El texto no establece ninguna regulación sobre las corporaciones y, en cambio, promueve medidas de lavado verde como las Soluciones basadas en la naturaleza, que permiten la destrucción del medio ambiente.
Si bien existen compromisos centrados en la conservación y restauración de la naturaleza, no se ha avanzado en la resolución de las causas que provocan la destrucción de las mismas. A su vez, desde la organización denunciamos que sigue promoviéndose la agricultura industrial a través de conceptos como “innovación” o “intensificación sostenible”.
A pesar de los puntos negativos, celebramos pequeñas victorias, como la no inclusión del concepto “naturaleza positiva”, que debe haberse contemplado profundizaría en la financiarización de la naturaleza y las compensaciones de CO2, o el reconocimiento explícito, en el texto, a las defensoras ambientales y los territorios indígenas, aunque es de lamentar que no se les reconozca una categoría específica en el objetivo de conservar las áreas protegidas. 

En general, es un acuerdo de mínimos, que no incide en un cambio de raíz y, por tanto, no resuelve las causas de pérdida de biodiversidad, no establece medidas vinculantes, ni tiene en cuenta las responsabilidades históricas de los estados. Es completamente insuficiente. Las crisis interrelacionadas que vivimos requieren de un cambio de modelo económico y esto debe verse en todas las políticas de este nivel.
Por este motivo continuaremos trabajando junto a las comunidades locales de todo el mundo, quienes están construyendo las alternativas necesarias para proteger la biodiversidad y conseguir una vida digna.

Fuente: Amigos de la Tierra

 

Entradas populares de este blog

Francia: ‘Mi orina contiene glifosato, ¿y la tuya?’ Denuncia contra el polémico herbicida

Sobre transgénicos, semillas y cultivos en Latino América

Antártida: qué países reclaman su soberanía y por qué