Bolivia / Tariquía: cuando la defensa de la Pachamama es compatible con el extractivismo de hidrocarburos

El actual gobierno de Luis Arce sigue obstinado en impulsar la explotación hidrocarburífera en la Reserva Nacional de Flora y Fauna Tariquía. Obviamente, este hecho provocará la incertidumbre en quienes solo recuerden al actual presidente de Bolivia recitando aquél bello alegato en defensa de la Pachamama, la Madre Tierra. Pero como veremos, por desgracia, tampoco se trata de un caso aislado: Los y las opositoras a la explotación hidrocarburífera en la Reserva Nacional de Flora y Fauna Tariquía, se despertaron este 29 de enero con una nueva amenaza de actividad petrolera con la incursión de camiones portadores de casetas prefabricadas para albergar operarios en la zona de San Telmo. Este bloque fue adjudicado a la petrolera brasileña Petrobras. Hoy, 6 de febrero, nos informan del inicio de la explotación en dicha reserva.

Martintxo Mantxo 

 
Pero hasta ahora, a diferencia de lo ocurrido en el bloque Astillero, las comunidades afectadas consiguieron frenar a las petroleras. Han sido años de marchas a la capital Tarija, y de campamentos y bloqueos indefinidos para impedir la entrada de la maquinaria. San Telmo se sitúa en el corazón de la Reserva de Tariquía. En este bloque ya se realizaron las exploraciones sísmicas correspondientes (2D y 3D) en 1998 y 2003.
El Comité Nacional de Defensa de la Reserva de Tariquía lleva meses movilizado previendo el inicio de la explotación. Ahora apuran las últimas opciones legales que les queda, en base a la vulneración de derechos colectivos tanto de las comunidades como de la ciudadanía de Tarija y Bolivia. En especial los derechos recojidos por la Constitución relativos a un medio ambiente sano que en este caso debe incluir la preservación de la Reserva Nacional de Tariquía. Porque además de gozar de esa protección, la Reserva de Tariquía es importante para la población por su riqueza ecológica. Pero en el caso del departamento y la ciudad de Tarija, por ser la zona que suministra de agua y también por ser una de las zonas de mayor producción agrícola.
Presentaron para ello una nueva Acción Popular el 31 de enero, con el objetivo de anular los contratos concedidos a Petrobras. Sin embargo estos fueron desestimados por la Sala Constitucional de Tarija. Sus vocales, los jueces Ernesto Mur y Heldy Calderón, adujeron que los derechos colectivos no son prioridad y que el ministerio de hidrocarburos ya realizó una consulta previa y un estudio de impacto medioambiental pertinentes, lo cual no es cierto. Los y las activistas proseguirán ahora el intento de Acción popular enviando la decisión a que sea revisada por el Tribunal Constitucional Plurinacional. Tampoco descartan el presentar una demanda en el ámbito internacional.

Incursión de infraestructura de petrobras en Tariquía este enero 2023.

Estos días también ha salido a la luz el plan de YPFB de explotar los yacimientos hidrocarburíferos de la cuenca del Madre de Dios: 12 trillones de pies cúbicos (TCF) asociados de gas y 5 billones de barriles de petróleo. El anuncio lo hizo el propio presidente de YPFB, la empresa boliviana que gestiona la actividad hidrocarburífera en Bolivia, Armin Dorgathen. Según él, la decisión fue tomada tras «constatar que la Cuenca del Subandino Sur llegó a un cierto grado de madurez». Nuevamente, este anuncio es acogido por el aspecto económico, capitalista o extractivista, ya que equivale a 475.000 millones de dólares. La cuenca del Madre de Dios corresponde con la Amazonía boliviana, una zona ambientalmente muy sensible y biodiversa. Allá el pueblo Cavineño ya fue afectado por la exploración previa (más información al final del artículo, en apartado sobre YPF), pero el anuncio tampoco explica como se intentará prevenir más daños a este pueblo y esos ecosistemas. Lo obvian entre otras razones porque no hay fórmula.
En ninguna de las informaciones publicadas se encuentra mención al posible impacto ambiental, pese a tratarse de una vasta zona no explotada previamente y que coincide con delicados ecosistemas selváticos amazónicos. Una exploración previa realizada en 2008, tampoco incluía impactos ambientales («Evaluación del Sistema Petrolífero de la Cuenca de Madre de Dios de Bolivia«).

La demagogia de Luis Arce y el MAS
El discurso de Luis Arce, como anfitrión del foro Reencuentro con la Pachamama que reunió a distintos presidentes, se hizo viral por sus planteamientos de la Pachamama o Madre Tierra (como él también se refirió) y contra el capitalismo. Éste tuvo lugar en 23-04-2021, medio año después de ser nombrado presidente, en un momento convulso, después del gobierno impuesto de Jeanine Áñez, para él tras la victoria, de euforia y reafirmamiento; y todavía en periodo de pandemia.
En su momento fue inspirador y auguraba un futuro de armonía con el medio ambiente, pro lo menos en ese país. Sin embargo, a casi dos años después de éste, podemos entender ese discurso como un gran ejercicio de propaganda; como más lavado verde del mismo tipo al que nos tienen acostumbradas las grandes empresas, sobre todo con el fin de ocultar los objetivos reales que son extractivistas, destructivos del medio ambiente y las comunidades; lleno de retórica (cita a la la Pachamama y Madre Tierra hasta en 33 ocasiones) y como conclusión, un caso más de demagogia a la que nos tienen acostumbrados los políticos.
No debemos olvidar que si bien Luis Arce, fue elegido presidente en noviembre de 2020, antes había sido ministro de Economía y Finanzas Públicas de Bolivia en los gobiernos del MAS (Movimiento al Socialismo) de Evo Morales, entre 2006 y 2017 (11 años) y posteriormente hasta su deposición en noviembre de 2019, con lo que Arce también fue responsable desde ese ministerio de la promoción de muchos proyectos extractivistas. Estos fueron la base para que la economía boliviana se restituyera en cierta forma con el gobierno de Evo Morales.
En este evento también se presentaron dos importantes propuestas de ley, una para tipificar los derechos de la naturaleza y otra contra el ecocidio. Pero esto no significa mucho si tenemos en cuanta que ya en 2010 se promulgó en Bolivia la Ley de los Derechos de la Madre Naturaleza, y en el 2016 y en el 2017 una Ley sobre el Ecocidio que criminalizaba la destrucción de ecosistemas. Sin embargo no existen casos de la implementación de ninguna de ellas: resulta muy difícil, ya que que como ente, la Naturaleza es incapaz de presentar un caso y si no existe voluntad real desde las instituciones. En este caso el gobierno, pese a introcucirlas, se ha mostrado totalmente indiferente usándolas para desviar la atención en su interés extractivista.

Mapa de conflictos por extractivismo con pueblos indígenas de Bolivia. (Los Tiempos)

En ese sentido se pronunciaron entonces distintas organizaciones sociales1 como como CONTIOCAP (Coordinadora Nacional de Defensa de los Territorios Indígenas Originarios Campesinos y Áreas Protegidas), que denunció al gobierno de Evo Morales “abanderándose como defensor de la Pachamama y de los pueblos indígenas” mientras impulsaba industrias de petróleo, mineras, hidroeléctricas, deforestación para agrocombustibles y producción ganadera».
El significado de la Madre Tierra o Pachamama para Luis Arce queda de manifiesto con su declaración ante el anuncio de existencia de un gran yacimiento de gas en el campo Margarita en diciembre de 2020, el pozo Boicobo, el cual lo calificó como de “regalo de la Pachamama en esta Navidad”. Éste será operado por Repsol de Bolivia, British Shell, y Pan American Energy.
Decir también que como en este caso de Tariquía, las y los opositores son tildados por el gobierno del MAS de enemigos del socialismo y el plurinacionalismo, enemigos del interés colectivo, del interés nacional, de seguir otros intereses (políticos o partidistas), o en el caso de organizaciones indígenas, de querer dividir al movimiento indígena monopolizado por el MAS. La demagogia indigenista y ambientalista del MAS cumple ese objetivo de adjudicarse unos valores desde los que descalifican y deslegitiman a los y las genuinas defensores.
Mientras, pese a estos intentos de difamación, la defensa de Tariquía está amparada por la Constitución boliviana y su legislación, así como por la Internacional, como bien apuntan los activistas del Comité Nacional de Defensa de la Reserva de Tariquía.

Marcha de Tariquía a Tarija (Foto: Igor Porcel)

Fuente:(Rebelión) Extracto de una nota mucho más extensa publicada en: https://aplanetainfo.wordpress.com/2023/02/06/tariquia-cuando-la-defensa-de-la-pachamama-es-compatible-con-el-extractivismo-de-hidrocarburos-2/
(Foto principal: Represión de bloqueo en Tariquía. Foto: Verdad con Tinta)

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