La economía de la felicidad interna bruta


Por Sabina Alkire

El 2 de abril pasado, la Organización de las Naciones Unidas en Nueva York organizó una reunión de alto nivel sobre la felicidad y el bienestar. Concebida por el gobierno del Reino de Bután, y apoyada por 68 estados miembros, la reunión se llevó a cabo en medio de un turbulento ambiente dado por la crisis financiera mundial, el dramático cambio climático, la pobreza generalizada y el aumento de la neuroeconomía –factores que han sacudido el status quo y que han llevado la economía a una encrucijada.
La reunión fue convocada para catalizar los grandes esfuerzos de creación de un nuevo paradigma económico basado en la sostenibilidad y dedicado al bienestar humano, construido sobre el enfoque innovador de Bután que no apunta al crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) sino que a las ganancias en la Felicidad Interna Bruta (GNH por su sigla en inglés). La perspectiva holística de Bután toma en cuenta factores materiales, sociales, espirituales y medioambientales, medidos de acuerdo al índice GNH.
De hecho, el ejemplo de Bután entrega a la comunidad internacional una oportunidad única para reconsiderar el camino de la economía en función de facilitar el desarrollo humano en este mundo que compartimos. Tres temas deben ser abordados para conducir la futura discusión:
Primero, el enfoque debe centrarse en el panorama general. Por mucho tiempo, la economía ha ignorado las consideraciones éticas. Como Tony Atkinson señala en su artículo “La extraña desaparición de la economía del bienestar”, el análisis económico debe tomar en cuenta cómo las políticas propuestas ayudan a la gente a salir adelante. Actualmente, considerando que los gobiernos en el mundo están reduciendo sus presupuestos, la necesidad de una clara base moral para los responsables de la elaboración de políticas es más necesaria que nunca.
Esto de ninguna manera socava la prioridad que siempre se le debe dar a la erradicación de la pobreza y la indigencia. Por el contrario, porque las respuestas efectivas a la pobreza requieren de un foco constante en los movimientos sociales, en las preocupaciones culturales y medioambientales , y en el liderazgo político, la atención en el bienestar humano desempeña un papel importante en la reducción de las desventajas materiales.
El economista y filósofo Amartya Sen ha argumentado desde hace tiempo que los mercados, el comercio, y el crecimiento económico deben ser diseñados explícitamente para promover el bienestar humano. El crecimiento económico es un medio, el bienestar humano es el fin. Ha llegado el momento para que los líderes políticos y los grupos de la sociedad civil demanden a los economistas que tomen en cuenta el cambio climático y los aspectos más amplios del bienestar, junto con el crecimiento y la estabilidad financiera. Discutir un conjunto amplio de indicadores –uno que refleje de mejor manera los aspectos fundamentales- es el lugar para comenzar.
En segundo lugar, con el nuevo modelo económico deben venir nuevos instrumentos económicos, incluyendo modelos de políticas que permitan a los encargados de hacer políticas avanzar a sus objetivos de forma efectiva y les otorguen los medios para medir el progreso.
La comisión sobre la medición del desempeño económico y el progreso social, convocada en 2008 por el Presidente francés Nicolás Sarkozy, reflejó la demanda de la sociedad por estadísticas más precisas y mediciones que sean relevantes. La aprobación el año pasado por parte de la Asamblea General de la ONU de la resolución titulada “Felicidad: hacia un enfoque holístico del desarrollo”, presentado por Bután y apoyado por 68 países miembros, muestra que esta demanda es más grande que nunca.
Al mismo tiempo, las mediciones multidimensionales están creciendo en rigor y aceptación, debido a la oportuna recolección de datos, la investigación rigurosa, y las metodologías nuevas y emergentes. El siguiente paso debe ser desarrollar un marco de política-económica adecuado.
La nueva comisión establecida por Bután, que será dirigida por su Primer Ministro, debe generar los instrumentos técnicos necesarios para orientar la economía al bienestar humano en este mundo que compartimos. Esto puede empezar con las mediciones y continuar con las políticas. Ha llegado el momento de reunir y coordinar las recientes perspectivas económicas sobre motivación, preferencias, medición y modelación, y sentar las bases para un cambio sistemático, más que sintomático.
Sobre todo, la gente común debe pedir un cambio sistémico. Así como Daron Acemoglu del MIT escribió sobre los economistas después de la crisis financiera de 2008 en los Estados Unidos: “dejamos que las políticas y la retórica definieran la agenda de nuestro pensamiento acerca del mundo y, peor, tal vez, incluso para nuestro asesoramiento sobre políticas”. El economista inglés Nicholas Stern fue aún más lejos al afirmar que sus colegas se habían convertido en esclavos de políticos difuntos. Ambos economistas saben que el liderazgo no debe venir de los políticos o de la academia, sino que de un público más amplio.
La pregunta que debe responderse es cómo las ONG, comunidades religiosas, los medios de comunicación, los blogueros y los ciudadanos pueden ayudar a establecer una nueva agenda económica, crear un espacio político para la innovación, y mantener la demanda por el progreso.
El gobierno y el pueblo de Bután están mostrando el camino al mundo. El índice GNH y los instrumentos de política han ayudado a cambiar la noción de la medición y maximizado el bienestar humano en un concepto operacional. Siguiendo el ejemplo de Bután, la comunidad internacional debe apoyar a la comisión para negociar los detalles de las medidas, las cuentas, y los mecanismos financieros requeridos para un nuevo modelo económico basado en el bienestar de todos los ciudadanos del planeta.
La economía está a punto de cambiar, pero aún no está claro cómo. Lo que está claro es que el liderazgo moral e intelectual es esencial. La nueva comisión de Bután entrega una oportunidad valiosa para comenzar a construir una hoja de ruta para un nuevo modelo multidimensional de la economía del bienestar sostenible, fundada en el bienestar humano.
Artículo original publicado en inglés por Project Syndicate. - elciudadano.cl Imagenes: pandorai.com - http://gmtmas100.com

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