La economía del don brilla en Portugal
Adriana Pérez Pesce - Economía Solidaria
La economía del don (gift economy, en inglés) es una teoría social en la que los bienes y servicios se otorgan sin un acuerdo explícito. Algunos de sus principios son: que a mi vecino no le falte nada y que lo que hagamos hoy no sea recordado mañana, para que las acciones se basen en el respeto y el cuidado hacia la otra persona más que en el interés o la vanidad.
En algunas ocasiones se espera conseguir un bien o servicio del mismo valor que aquellos que estamos dando. Sin embargo, se considera que el verdadero espíritu de la economía del don consiste en dar sin esperar recibir nada a cambio.
“Trabajo en la red internacional de transición y también en la transición en mi pueblo. Un día me invitaron a una reunión en Londres con personas de todo el mundo para compartir ideas y experiencias sobre la economía del don. Allí, conocí al filósofo Charles Eisenstein y le propuse la idea de venir a Portugal a dar una conferencia. Un día del verano pasado, había tenido un día muy malo, había escuchado dramas personales de la gente en la iniciativa de transición de mi pueblo y me dí cuenta que no tenía sentido poner toda mi energia en organizar una conferencia en Lisboa, completamente desconectada del lugar donde vivo. Me di cuenta que quería poner mi esfuerzo en algo más real y cuando le comenté esto a Charles pensó que era una buena razón para hacer algo más parecido a la economia del don: en lugar de seleccionar un sitio que fuera de fácil acceso o cómodo para un tipo de participantes de una conferencia así, quería encontrar un don a un sitio que normalmente la gente deja de lado porque no tiene mucho que ofrecer, que es mi tierra. Mi tierra está en casi en el centro de Portugal, cerquita de España, no tiene fácil acceso, no tiene mucho para ofrecer pero decidimos celebrarlo aquí”.
De esta forma, Filipa Leao Pimentel comenta a Noticias Positivas el inicio de Ajudada, una plataforma que nace con la idea de crear un movimiento de transformación en los ámbitos local, nacional e internacional. Con la asistencia de cerca de 450 personas, el encuentro se celebró el 14, 15 y 16 de junio pasado en Portalegre, una ciudad portuguesa ubicada en la región del Alentejo.
Los organizadores y los participantes del evento tuvieron entre sus manos el desafío de explorar el potencial de la economía del don y encontrar respuestas a la siguiente pregunta: ¿qué podemos lograr cuando compartimos los recursos y capacidades que existen en nuestra comunidad para que todos tengan un papel activo en la creación de un futuro próspero?.
“Para nosotros lo más importante era que los tres días pudieran cubrir las diferentes capacidades del ser humano. Durante el primer día se habló sobre el concepto y la teoría de lo qué es la economía del don. La segunda jornada ha estado dedicada al corazón: compartimos lo que sabemos con toda la gente, independientemente de lo que vayamos a recibir después o no. Y el tercer día ha sido para las manos, para concretar qué proyectos queríamos hacer”, precisa Leao Pimentel.
En ese sentido, recuerda que la primera jornada se celebró en un sitio de la ciudad mientras que en la segunda hubieron 80 actividades repartidas por todo el pueblo y el tercer día se realizó una concentración en un jardín público y en una casa que recibieron de regalo. “La gente podía decidir qué quería hacer: si quedarse en la casa pintando, cosiendo, construyendo muebles o lo que quisiera”, explica.
Para conocer más sobre la experiencia de Ajudada, Leao Pimentel ha ofrecido una emotiva e interesante entrevista a Noticias Positivas. A continuación la compartimos con nuestros lectores:
Noticias Positivas: ¿Cómo fue el comienzo de Ajudada?
Filipa Leao Pimentel: En principio, éramos cuatro personas con el propósito de hacer algo único y especial. Queríamos que realmente fuera algo muy diferente. Era muy importante que todo lo que pasara tuviera una lógica conectada con la economia del don, en todos los aspectos. Y otra cosa muy importante era que esto no fuera solamente un evento sino un proceso de transformación local, de la comunidad, que el evento fuera solo un pasaje, un momento de un proceso más largo y que la energía puesta en el evento sea la misma que nos sirva para producir un cambio local, con una proyección internacional y que todo estuviera enmarcado dentro de lo que nosotros creemos que es la economía del bien común.
N+: ¿Nos puedes contar cómo ha sido el encuentro de junio?
F.L.P.: El encuentro ha sido una cosa maravillosa. Ha sido el combinar un período maravilloso de trabajo, mucha emoción en el proceso de organización, el proceso de transformación del grupo, la participación de la comunidad, la conexión entre personas que están en otros proyectos existentes y la creación de nuevos proyectos.
Yo creo que lo más importante era la idea de que toda la comunidad saliera a la calle a enseñar lo que tiene y sus valores, que a veces no están valorizados. Ha sido una especie de manifestación positiva que nos puso el espíritu en alto, diciendo: ¡Si lo que tenemos es abundancia!. Ha sido un período de mucha felicidad.
Hemos conseguido dar de comer a toda la gente sin la intervención de dinero y que todos tuvieran donde dormir. Ha sido increible, se ha sentido mucho la cohesión de grupo. Más allá de que estábamos nerviosos porque era la primera vez que hacíamos algo así, había una gran serenidad en la gente. Hubo mucha gente muy emocionada, muchas sonrisas, muchos abrazos, mucha emoción…
N+: ¿Hubo alguna experiencia que te haya marcado más?
F.L.P.: Lo que más me ha marcado ha sido lo que ha dicho la gente después del encuentro: ‘ha sido como vivir tres días en el futuro, un futuro que nadie había pensado que era posible, tres días viviendo en una lógica que soñamos, de vivir en comunidad, de una manera fácil e independiente del dinero y de lo que somos’. Hay esperanza de que vamos a encontrar un sistema que nos traiga la verdadera felicidad. Ha sido emocionante y esperanzador ver como mi comunidad que parecía sin esperanza, se puso de pie y expresó sus capacidades de una forma tan positiva.
N+: ¿En qué parte del proceso se encuentran ahora?
F.P.: Como ha sido algo que se ha inventado, no teníamos un plan, estábamos completamente abiertos a una coorganización, queríamos que cada persona que participara de la organizacion, hiciera su sueño realidad. Ahora tenemos una casa y un coche que nos han regalado y tenemos todo el futuro para decidir si queremos continuar como un movimiento, si queremos repetir o qué tipo de proyectos vamos a continuar.
Hemos hecho una reunión y elaborado un manifiesto para que el alcalde pueda hacer con nosotros un protocolo para la casa para la comunidad, quizás con algunas organizaciones representadas para que haya una estructura legal. Estamos escribiendo la esencia del movimiento, qué actividades se van a hacer en la casa de Ajudada y cuando la comunidad tenga una idea o un proyecto, puede proponerlo en el contexto de ajudada.
Ahora mismo estamos terminando con algunas cosas que faltan para abrir la casa. Será una gran felicidad porque será la comunidad la que decida qué hacer y el grupo organizador intentará hacer realidad los sueños de la gente.
DATOS DE CONTACTO:
http://www.ajudada.org/pt/default.html (en inglés o portugués)
(Imagen: Cortesía de Ajudada)
La economía del don (gift economy, en inglés) es una teoría social en la que los bienes y servicios se otorgan sin un acuerdo explícito. Algunos de sus principios son: que a mi vecino no le falte nada y que lo que hagamos hoy no sea recordado mañana, para que las acciones se basen en el respeto y el cuidado hacia la otra persona más que en el interés o la vanidad.
En algunas ocasiones se espera conseguir un bien o servicio del mismo valor que aquellos que estamos dando. Sin embargo, se considera que el verdadero espíritu de la economía del don consiste en dar sin esperar recibir nada a cambio.
“Trabajo en la red internacional de transición y también en la transición en mi pueblo. Un día me invitaron a una reunión en Londres con personas de todo el mundo para compartir ideas y experiencias sobre la economía del don. Allí, conocí al filósofo Charles Eisenstein y le propuse la idea de venir a Portugal a dar una conferencia. Un día del verano pasado, había tenido un día muy malo, había escuchado dramas personales de la gente en la iniciativa de transición de mi pueblo y me dí cuenta que no tenía sentido poner toda mi energia en organizar una conferencia en Lisboa, completamente desconectada del lugar donde vivo. Me di cuenta que quería poner mi esfuerzo en algo más real y cuando le comenté esto a Charles pensó que era una buena razón para hacer algo más parecido a la economia del don: en lugar de seleccionar un sitio que fuera de fácil acceso o cómodo para un tipo de participantes de una conferencia así, quería encontrar un don a un sitio que normalmente la gente deja de lado porque no tiene mucho que ofrecer, que es mi tierra. Mi tierra está en casi en el centro de Portugal, cerquita de España, no tiene fácil acceso, no tiene mucho para ofrecer pero decidimos celebrarlo aquí”.
De esta forma, Filipa Leao Pimentel comenta a Noticias Positivas el inicio de Ajudada, una plataforma que nace con la idea de crear un movimiento de transformación en los ámbitos local, nacional e internacional. Con la asistencia de cerca de 450 personas, el encuentro se celebró el 14, 15 y 16 de junio pasado en Portalegre, una ciudad portuguesa ubicada en la región del Alentejo.
Los organizadores y los participantes del evento tuvieron entre sus manos el desafío de explorar el potencial de la economía del don y encontrar respuestas a la siguiente pregunta: ¿qué podemos lograr cuando compartimos los recursos y capacidades que existen en nuestra comunidad para que todos tengan un papel activo en la creación de un futuro próspero?.
“Para nosotros lo más importante era que los tres días pudieran cubrir las diferentes capacidades del ser humano. Durante el primer día se habló sobre el concepto y la teoría de lo qué es la economía del don. La segunda jornada ha estado dedicada al corazón: compartimos lo que sabemos con toda la gente, independientemente de lo que vayamos a recibir después o no. Y el tercer día ha sido para las manos, para concretar qué proyectos queríamos hacer”, precisa Leao Pimentel.
En ese sentido, recuerda que la primera jornada se celebró en un sitio de la ciudad mientras que en la segunda hubieron 80 actividades repartidas por todo el pueblo y el tercer día se realizó una concentración en un jardín público y en una casa que recibieron de regalo. “La gente podía decidir qué quería hacer: si quedarse en la casa pintando, cosiendo, construyendo muebles o lo que quisiera”, explica.
Para conocer más sobre la experiencia de Ajudada, Leao Pimentel ha ofrecido una emotiva e interesante entrevista a Noticias Positivas. A continuación la compartimos con nuestros lectores:
Noticias Positivas: ¿Cómo fue el comienzo de Ajudada?
Filipa Leao Pimentel: En principio, éramos cuatro personas con el propósito de hacer algo único y especial. Queríamos que realmente fuera algo muy diferente. Era muy importante que todo lo que pasara tuviera una lógica conectada con la economia del don, en todos los aspectos. Y otra cosa muy importante era que esto no fuera solamente un evento sino un proceso de transformación local, de la comunidad, que el evento fuera solo un pasaje, un momento de un proceso más largo y que la energía puesta en el evento sea la misma que nos sirva para producir un cambio local, con una proyección internacional y que todo estuviera enmarcado dentro de lo que nosotros creemos que es la economía del bien común.
N+: ¿Nos puedes contar cómo ha sido el encuentro de junio?
F.L.P.: El encuentro ha sido una cosa maravillosa. Ha sido el combinar un período maravilloso de trabajo, mucha emoción en el proceso de organización, el proceso de transformación del grupo, la participación de la comunidad, la conexión entre personas que están en otros proyectos existentes y la creación de nuevos proyectos.
Yo creo que lo más importante era la idea de que toda la comunidad saliera a la calle a enseñar lo que tiene y sus valores, que a veces no están valorizados. Ha sido una especie de manifestación positiva que nos puso el espíritu en alto, diciendo: ¡Si lo que tenemos es abundancia!. Ha sido un período de mucha felicidad.
Hemos conseguido dar de comer a toda la gente sin la intervención de dinero y que todos tuvieran donde dormir. Ha sido increible, se ha sentido mucho la cohesión de grupo. Más allá de que estábamos nerviosos porque era la primera vez que hacíamos algo así, había una gran serenidad en la gente. Hubo mucha gente muy emocionada, muchas sonrisas, muchos abrazos, mucha emoción…
N+: ¿Hubo alguna experiencia que te haya marcado más?
F.L.P.: Lo que más me ha marcado ha sido lo que ha dicho la gente después del encuentro: ‘ha sido como vivir tres días en el futuro, un futuro que nadie había pensado que era posible, tres días viviendo en una lógica que soñamos, de vivir en comunidad, de una manera fácil e independiente del dinero y de lo que somos’. Hay esperanza de que vamos a encontrar un sistema que nos traiga la verdadera felicidad. Ha sido emocionante y esperanzador ver como mi comunidad que parecía sin esperanza, se puso de pie y expresó sus capacidades de una forma tan positiva.
N+: ¿En qué parte del proceso se encuentran ahora?
F.P.: Como ha sido algo que se ha inventado, no teníamos un plan, estábamos completamente abiertos a una coorganización, queríamos que cada persona que participara de la organizacion, hiciera su sueño realidad. Ahora tenemos una casa y un coche que nos han regalado y tenemos todo el futuro para decidir si queremos continuar como un movimiento, si queremos repetir o qué tipo de proyectos vamos a continuar.
Hemos hecho una reunión y elaborado un manifiesto para que el alcalde pueda hacer con nosotros un protocolo para la casa para la comunidad, quizás con algunas organizaciones representadas para que haya una estructura legal. Estamos escribiendo la esencia del movimiento, qué actividades se van a hacer en la casa de Ajudada y cuando la comunidad tenga una idea o un proyecto, puede proponerlo en el contexto de ajudada.
Ahora mismo estamos terminando con algunas cosas que faltan para abrir la casa. Será una gran felicidad porque será la comunidad la que decida qué hacer y el grupo organizador intentará hacer realidad los sueños de la gente.
DATOS DE CONTACTO:
http://www.ajudada.org/pt/default.html (en inglés o portugués)
(Imagen: Cortesía de Ajudada)