Evacuación en Fukushima tras detectarse humo en los reactores 2 y 3
JAPÓN | Suben los niveles de yodo radiactivo
Columna de humo en reactor 3 de Fukushima. | Ap
• Los niveles se sitúan en 965 bequerelios por kilo de agua, el triple de lo permitido
• La seguridad nuclear japonesa reconoce el riesgo de los trabajadores
• El Gobierno recomienda a la población de Litatemura no beber agua 'por precaución'
• Las autoridades de supervisión de calidad de China han ordenado controles de radiactividad a todos los alimentos importados desde Japón.
• La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha advertido de que la detección de contaminación radiactiva en los alimentos procedentes de las zonas más afectadas por la actual emergencia nuclear de Japón supone un problema "más grave de lo que se esperaba".
• "Claramente se trata de una situación grave", declaró a Reuters desde Manila el portavoz de la oficina de la OMS para el Pacífico Occidental, Peter Cordingley. "Es más grave de lo que se pensaba en los primeros días, cuando se creía que este tipo de problemas se limitaba a un radio de entre 20 a 30 kilómetros", añadió.
Afp | Osaka (Japón)
La Agencia de Seguridad Nuclear de Japón ha informado de que se ha avistado humo en el reactor 2 de la planta nuclear de Fukushima, después de que se detectara en el reactor 3 una columna de humo que ya ha parado.
Según el organismo, el humo sale de la parte posterior del edificio donde se encuentra el reactor 2, sin que de momento se haya determinado su origen. En este reactor se habían producido a raíz del terremoto fuertes explosiones e incendios. La estructura de contención del reactor está dañada.
Poco antes se había informado de humo gris saliendo de la unidad 3, una de las que causa más preocupación a los expertos, que obligó a evacuar ese área aunque ya ha parado, según la agencia local Kyodo.
De momento no se ha clarificado la causa del humo registrado en los dos reactores, cuya temperatura tratan de rebajar los trabajadores de Tepco, además de militares y bomberos.
Aumento de presión en el reactor 3
Horas antes, habían informado de que la presión en el reactor número 3 había aumentado considerablemente pese a las tareas de refrigeración con camiones cisternas que se estaban realizado.
Los operarios de la planta estaban considerando cómo bajar la presión liberando aire que expulsará a la atmósfera partículas radiactivas. Una técnica similar produjo las explosiones durante los primeros días de la crisis.
Tepco asegura que logrado llevar cables de energía a todos los reactores, incluidos el 3 y el 4, aunque no tendrán todavía electricidad
Los técnicos advirtieron de que la liberación de radiación en esta ocasión sería más grande que en versiones anteriores ya que el combustible nuclear se había degradado más. El proceso podría incluir la emisión de una densa nube de yodo, así como de kriptón y xenón, los tres elementos radiactivos.
Los equipos de emergencia reanudaron este lunes el vertido de agua sobre los reactores 3 y 4. Se calcula que hasta el momento estos equipos han derramado unas 3.700 toneladas de agua marina sobre dichos reactores con el objetivo de rebajar su elevada temperatura y evitar con ello una fusión parcial de sus núcleos.
Por su parte, el primer ministro japonés, Naoto Kan se ha mostrado más optimista que en los últimos días y ha asegurado que la situación de la central "está mejorando gradualmente" gracias al trabajo de los operadores que intentan controlar la central 24 horas al día. Aunque la ONU ha afirmado que la situación sigue siendo "muy seria".
Tepco, además, ha informado que se ha logrado conectar cables de energía a todos los reactores, incluidos los más dañados el 3 y el 4, aunque la energía para bombear el agua al sistema de refrigeración de los reactores aún no está en funcionamiento.
Según la Agencia para la Seguridad Nuclear, se esperaba que hoy llegase electricidad al reactor 2. Una vez tuviera suministro, se pretendía reactivar su sistema de ventilación y algunos aparatos, como los que miden la presión y temperatura del reactor.
Altos niveles de yodo radiactivo
Sin embargo no todo son buenas noticias. Las autoridades han registrado niveles de yodo radiactivo tres veces superior al límite legal en una población situada a 40 kilómetros de la central nuclear de Fukushima, según ha comunicado el Gobierno, que también ha explicado que este hallazgo no implica un riesgo inminente para la salud.
La seguridad nuclear japonesa reconoce el riesgo de que los trabajadores de Fukushima, que tratan de recuperar cierta normalidad en la central nuclear, hayan inhalado partículas radiactivas, aunque aún no han constatado que así se haya producido.
En la localidad de Litatemura, con alrededor de 4.000 habitantes, los niveles de yodo se han situado en los 965 bequerelios por cada kilogramo de agua, frente a los 300 bequerelios por kilo establecidos como límite a partir del cual no es aconsejable beber agua.
Las autoridades han registrado niveles de yodo radiactivo tres veces superior al límite legal en una población
"No hay efectos inmediatos para la salud si el agua se consume de forma temporal", ha declarado un responsable del ministerio de Salud, Shogo Misawa. Sin embargo, "por precaución, recomendamos a los habitantes de la localidad abstenerse" de tomar agua. La prefectura de Fukushima les proporcionará agua potable durante los próximos días.
No es la primera vez que las autoridades detectan un nivel de yodo radiactivo por encima de los permitido. Días atrás, la presencia de yodo radiactivo fue detectada en el agua del grifo en las prefecturas de Tokio, Tochigi, Gunma, Saitama, Chiba y Niigata.
Además, el Gobierno nipón anunció que había niveles elevados de radiactividad en la leche y otros productos agrícolas cerca de la central nuclear de Fukushima, aunque aseguró, a través de su portavoz, Yukio Edano, que la contaminación "no supone riesgo inmediato".
En referencia a la radiactividad advertida en los vegetales cultivados en las prefecturas de Gunma, Tochigi (centro) y Chiba (centro-este), el organismo ha asegurado que no supone una amenaza para la salud, pese a que rebasa los límites normales.
En estas prefecturas, ubicadas al sur de Fukushima, se ha detectado una radiación excesiva en las hojas de espinaca. Así, las autoridades de Gunma han ordenado a las cooperativas locales que interrumpan el envío de productos hortícolas y asuman la devolución de los ya enviados.
El mayor problema está en las espinacas de algunas localidades de Ibaraki (centro-este), que superan 27 veces los niveles legales de radiactividad. Sin embargo, las autoridades han delegado en los gobiernos municipales la decisión de cesar voluntariamente el comercio de alimentos posiblemente contaminados.
Elmundo.es