Manifiesto Ecohumanista. Cambiemos El Sistema - No Cambiemos el Clima
Hay que cambiar el sistema; es necesario y obligatorio la construcción de un nuevo orden mundial en lo político, económico, ambiental y social; que sea humanista y ambientalmente amigable; con sociedades mas lógicas y justas; donde se respeten los derechos colectivos y ancestrales; se privilegie lo ético y moral y se propugne la erradicación del hambre, la pobreza y la exclusión social.
“Nuestra Única Nave Espacial”, convulsiona día a día, no por acción de las fuerzas magnéticas del cosmos sino por la polución de su frágil sistema funcional, forjado evolutivamente a través de miles de millones de años, cuyos estertores estructurales indican una probabilidad metastásica, por acción antropogénica compulsiva.
La Gaia, siente dolorosamente la puntilla hiriente propinada por el hombre, que en su afán por la dominación de la naturaleza y del hombre mismo ha desarrollado un apetito voraz e insaciable que pugna contra la estabilidad del globo terráqueo. Para lograr su cometido ha diseñado estrategias de insatisfacciones humanas que conllevan a un insostenible sistema consumista cuyo leit motive es usar y botar. Es así como la burguesía transnacional sostiene ese modelo expoliador y criminal que somete los pueblos para arrebatarle sus riquezas, sin importar que con ello esté sometiendo nuestra casa común a un estado calamitoso de crisis climática, desertificación, sequias, deshielo de los glaciales y permafrost, inundaciones, derrumbes, esterilidad acuática, enfermedades, hambre, pobreza, exterminio de especies, contaminación de suelos y aire, entre otros muchos trastornos antrópicos que sufre el planeta.
La vida en la Pachamama es inviable bajo el voraz modelo capitalista, identificado por su apetito insaciable de acumulación de poder y riquezas. Sus máximos representantes, verdadero jinetes apocalípticos, cabalgan juntos succionándole la sangre a los pueblos y agrediendo ecológicamente el planeta, creándole una erosión irreversible. Sin que para nada importe la muerte de 36 millones de personas anualmente por causas asociadas al hambre y se aniquilen más de 3.500 especies/año y pongan en peligro de extinción otras tantas.
El Capitalismo, desde todo punto de vista, es inhumano, genera la destrucción acelerada y sistemática del ambiente, hace imposible el acceso al patrimonio natural de los pueblos, crea artificios tecnocráticos y terminologisistas para controlar la materia prima global y alimentos, no propugna la sostenibilidad del planeta, propicia el consumismo, produce innumerables problemas sociales, como la miseria y pobreza, en el 85% de la humanidad. Ese sistema neoliberal funciona por acción del motor de la miseria, cual combustiona con la sangre del pueblo, denominada dinero, tan necesario para la adquisición de bienes y servicios, pero tan escaso y condicionante que convierte a los pueblos en verdaderos esclavos de sus anhelos insatisfechos e inalcanzables, por la misma incoherencia del sistema consumista
Hoy el mundo no resiste tal opresión y se levanta indignado contra el poder hegemónico mundial, declarando su libertad que de manera incondicional le permita vivir viendo, en armonía con el ambiente, con la diversidad biológica, social, criterios, sexualidad, credo, etnia, gustos, sabores, etc.; sin restricciones alimentarias, ni educativas, en paz, con amor y solidaridad, entre los seres humanos.
“……los pobres no tienen lugar en el banquete”. “hemos echado una mirada al siglo del hambre (sXX)…..” ; entonces, ¿es acaso exagerado advertir que los ricos sepan que los pobres acechan los restos de sus festines?” (Pablo VI). Es imperioso detener y cambiar este modelo económico vergonzoso, que encarcela niños por comer de la basura y cobra impuestos a los alimentos que contienen grasas saturadas (llamadas trans y que seguramente provienen de alimentos OMG); hay que desactivar esta bomba de tiempo llamada hambre; hay que derogar el statu quo burocrático imperante; hay detener la vorágine industrial y crucifixión del planeta.
El hambre en el mundo no puede esperar, pues se ha convertido en el problema mas grande que tiene la humanidad, es la forma mas común de morir, el mas ingente problema sanitario, el ecológico mas importante y el económico mas grave; a pesar que se produce 2,5 veces lo que se necesita para que toda la humanidad se alimente y que se arrebata a la madre naturaleza 1,5 veces lo ella produce; sin contar que se ha sustituido la etnobiodiversidad alimenticia por estériles semillas frankesteinianas (monocultivos transgénicos) e impulsado irracionalmente la producción y prolífica reproducción acelerada con esteroide.
El inmoral neoliberalismo económico es una máquina de producción en serie de zombis, a los cuales arrea para que se alimenten de arepas de barro y comida para animales (perrarina, etc.), a la vez que le usurpa sus tierras, roba sus alimentos y mata de hambre, como sucede en las zonas donde se produce la mayor cantidad de alimentos y que más se comen en el mundo (aproximadamente 60% de los cereales a nivel mundial) es donde hay más muertes por acción del hambre.
Hoy el mundo no resiste tal opresión y se levanta indignado contra el poder hegemónico mundial, declarando su libertad que de manera incondicional le permita vivir viendo, en armonía con el ambiente, con la diversidad biológica, social, criterios, sexualidad, credo, etnia, gustos, sabores, etc., sin restricciones alimentarias, ni educativas en paz, con amor y solidaridad, como una característica intuito humanitas.
“…la paz será precaria en tanto 2.000 millones de personas estén sumergido en la miseria….” y mas 5.500 millones en pobreza real. Son las guerras el mecanismo utilizado por los imperios para el dominio de las pueblos; no obstante ello, la voluntad incólume revolucionaria asume la expresión “humanismo o nadie”, sumándole el vital prefijo eco (casa donde vivimos), a la vez que estamos enterrando la barbarie y parteando el ecosocialismo bolivariano; ademas que celebrando, desde ya, el alumbramiento del poder popular, el fortalecimiento del ambientalismo y construyendo un verdadero sistema humanista, lo cual sólo será posible mediante la desaceleración de nuestra huella de carbono.
Hay que cambiar el sistema; es necesario y obligatorio la construcción de un nuevo orden mundial en lo político, económico, ambiental y social; que sea humanista y ambientalmente amigable; con sociedades más lógicas y justas; donde se respeten los derechos colectivos y ancestrales; se privilegie lo ético y moral y se propugne la erradicación del hambre, la pobreza y la exclusión social.
¿Como lograr lo anterior?, con la “construcción del hombre nuevo”, con conciencia ambientalista y revolucionaria; que rechace la división de clases; internalice la “solidaridad por la vida” (Lula); impulse y consagre la etnocultura, el ambientalismo, la organización social solidaria y el conservacionismo de la naturaleza. Debemos pasar de una sociedad de contraste a una comunidad solidaria, justa fraterna y digna.
No cambiemos el clima; renunciemos a todo tipo de violencia contra los ecosistemas, no permitamos el agotamiento de los patrimonios naturales de la humanidad, no seamos cómplice de la exterminación de las especies endémicas y demás patrimonios autóctonos, rechacemos la patentación de la vida y la inmoral sociedad eugenésica comercial (promueve los OMG y su patentación), desaceleremos hasta su mínima expresión la ingente devastación antrópica, que atenta ecológicamente contra el sistema tierra, disminuyamos la huella de carbono, el cambio climático y la desertificación.
Es impostergable migrar del despilfarrador sistema consumista hacia una alimentación sana y uso de lo necesario para vivir viviendo sin agredir nuestro planeta.
Cambiemos las premisas "Usa y Bota" por la Filosofía de las 3R (Reduce, Reusa y Recicla).
El Frente Nacional de Ambientalista Revolucionarios (FRENAR), manifiesta su voluntad de transcender el egoísta modelo capitalista y sumar esfuerzos incansablemente para seguir construyendo el camino que conduce al Socialismo Bolivariano, caracterizado por la Paz, la Solidaridad, el Amor a los seres humanos y a la naturaleza, sin restricciones ni prejuicios. Consciente de lo anterior creemos en un modelo de vida EcoHumanista, como una amalgama inseparable que garantice la permanencia, en el tiempo, de todas las especies, disminuya el consumismo, propugne el bienestar social y privilegie lo ambiental ante el desarrollismo. En tal sentido, nuestro compromiso parte de la posibilidad cierta de poder ayudar a FRENAR:
- El excesivo Consumo de Energía.
- La Desertificación.
- La Polución de Agua y Aire.
- El Calentamiento del planeta.
- El Hambre.
- La Miseria.
- La Pobreza.
- El Burocratismo.
- El Consumo Transgénico.
- La Patentación de la vida.
- La Extinción de especies
- La Proliferación de OMG.
- La Contaminación de Suelo
- La esterilización de océanos y ríos.
Frente Nacional de Ambientalista Revolucionarios (FRENAR)