EEUU: Pando, el bosque clon más grande del mundo, se está muriendo.
Para el visitante desprevenido, Pando no es más que un hermoso bosque de una especie de álamos llamados álamos temblones (Populus trémula). Pero durante unos 14.000 años sus raíces han guardado un secreto genético que lo hace aún más interesante. Pando es un área de 43 hectáreas ubicada cerca de Fish Lake, en Utah, Estados Unidos. Aunque es muy similar a otros bosques, algunos científicos lo consideran "el organismo vivo más pesado del mundo".
Resulta que los 47.000 árboles que conforman Pando están conectados por un sistema de raíces y son idénticos genéticamente. "Todos estos árboles son en realidad un solo árbol", le dice a BBC Mundo el geógrafo Paul Rogers, profesor del Departamento de Ecología de la Universidad Estatal de Utah. De hecho, a Pando se le conoce como "el bosque de un solo árbol" y su nombre en latín significa "Yo me esparzo".
Es decir los miles de individuos que se pueden ver en la superficie, están unidos entre sí en el subsuelo. Como además los análisis demuestran que en el ADN de cada uno se repiten los mismos marcadores genéticos de los demás, se deduce que se trata, en esencia, de un único organismo viviente.
Dicho de otra forma, un solo árbol con varios troncos conectados por una densa e inimaginable red de raíces; tanto que, si el bosque ocupa 43 hectáreas sobre las que se distribuyen 47.000 álamos, y además tenemos en cuenta que, al igual que pasa con los icebergs, las raíces suelen mucho más extensas que las ramas, la extensión subterránea sería aún mayor.
Resulta que los 47.000 árboles que conforman Pando están conectados por un sistema de raíces y son idénticos genéticamente. "Todos estos árboles son en realidad un solo árbol", le dice a BBC Mundo el geógrafo Paul Rogers, profesor del Departamento de Ecología de la Universidad Estatal de Utah. De hecho, a Pando se le conoce como "el bosque de un solo árbol" y su nombre en latín significa "Yo me esparzo".
Es decir los miles de individuos que se pueden ver en la superficie, están unidos entre sí en el subsuelo. Como además los análisis demuestran que en el ADN de cada uno se repiten los mismos marcadores genéticos de los demás, se deduce que se trata, en esencia, de un único organismo viviente.
Dicho de otra forma, un solo árbol con varios troncos conectados por una densa e inimaginable red de raíces; tanto que, si el bosque ocupa 43 hectáreas sobre las que se distribuyen 47.000 álamos, y además tenemos en cuenta que, al igual que pasa con los icebergs, las raíces suelen mucho más extensas que las ramas, la extensión subterránea sería aún mayor.
De hecho, se calcula que el peso total de Pando rondaría las 6.615 toneladas. Una cifra colosal acorde con su edad, ya que tiene unos 80.000 años. Ello supone que este bosque se desarrolló antes de la llegada del Hombre a América y ha conocido otros climas, consiguiendo sobrevivir a todos. Seguramente su particularidad deviene de ahí, una superespecialización evolutiva que le ha permitido imponerse a los incendios e impedir que a su alrededor crezcan coníferas, sus principales competidoras. Pando es macho y su reproducción, asexual. Al principio producía semillas pero hace mucho que encontró una vía mejor: los estolones, brotes a partir de sus raíces que terminan por convertirse en tallos adultos
Asimismo y en ese sentido, es destacable que no se mantiene inmutable sino que sus miembros, si se pueden llamar así, mueren continuamente y se renuevan. Es decir, los álamos que lo componen no son tan viejos como el conjunto porque, según la dendrocronología (el recuento de sus anillos) la media de edad de cada individuo está en 130 años.
Precisamente el tema de la edad es el que centra el interés de los científicos ahora, pues algunos creen que le queda poca vida. Eso no significa que Pando vaya a morir exactamente sino que parte de sus raíces podrían hacerlo, con lo cual muchos de los clones dejarían de estar unidos a sus hermanos; es como si se fuera disgregando en grupos más pequeños. Sólo es una teoría pero, de confirmarse, Pando perdería el liderazgo de tamaño y peso, acaso en favor de otra colonial clonal.
¿Por qué se está muriendo?
Asimismo y en ese sentido, es destacable que no se mantiene inmutable sino que sus miembros, si se pueden llamar así, mueren continuamente y se renuevan. Es decir, los álamos que lo componen no son tan viejos como el conjunto porque, según la dendrocronología (el recuento de sus anillos) la media de edad de cada individuo está en 130 años.
Precisamente el tema de la edad es el que centra el interés de los científicos ahora, pues algunos creen que le queda poca vida. Eso no significa que Pando vaya a morir exactamente sino que parte de sus raíces podrían hacerlo, con lo cual muchos de los clones dejarían de estar unidos a sus hermanos; es como si se fuera disgregando en grupos más pequeños. Sólo es una teoría pero, de confirmarse, Pando perdería el liderazgo de tamaño y peso, acaso en favor de otra colonial clonal.
¿Por qué se está muriendo?
Rogers lideró un estudio que revela que durante los últimos 40 años Pando ha dejado de crecer, y de hecho ha reducido su tamaño.
Algunas imágenes aéreas incluso muestran zonas en las que ya no hay árboles.
Rogers no tiene una cifra exacta de cuán rápido se seguirá reduciendo Pando, pero según él, "en 10 años habrá reducido su tamaño significativamente".
Los álamos suelen vivir entre 100 y 130 años. El problema es que están muriendo sin que haya una nueva generación que los reemplace.
"Es como si fuera una ciudad de 47.000 habitantes y todos tuvieran 85 años", dice Rogers.
De acuerdo a sus investigaciones, la principal causa de que Pando no logre expandirse es que en la zona se ha concentrado una gran cantidad de ciervos y vacas que se comen los retoños antes de que estos logren crecer.
"Debemos comenzar a reducir el número de animales que se están comiendo los árboles", dice Rogers.
"Si este bosque colapsa, todas las especies que dependen de él también desaparecerán".
¿Puede sobrevivir?
Algunas imágenes aéreas incluso muestran zonas en las que ya no hay árboles.
Rogers no tiene una cifra exacta de cuán rápido se seguirá reduciendo Pando, pero según él, "en 10 años habrá reducido su tamaño significativamente".
Los álamos suelen vivir entre 100 y 130 años. El problema es que están muriendo sin que haya una nueva generación que los reemplace.
"Es como si fuera una ciudad de 47.000 habitantes y todos tuvieran 85 años", dice Rogers.
De acuerdo a sus investigaciones, la principal causa de que Pando no logre expandirse es que en la zona se ha concentrado una gran cantidad de ciervos y vacas que se comen los retoños antes de que estos logren crecer.
"Debemos comenzar a reducir el número de animales que se están comiendo los árboles", dice Rogers.
"Si este bosque colapsa, todas las especies que dependen de él también desaparecerán".
¿Puede sobrevivir?
Para Rogers la solución está en ampliar las vallas que protegen algunas zonas de Pando, así como trabajar con los ganaderos para que ayuden a retirar las vacas del área del bosque, e incluso sacrificar algunos de los venados.
La idea, según Rogers, es "darle un espacio de respiro para que Pando se recupere".
"A primera vista es un simple bosque, pero cuando te enteras de que es un solo organismo, se siente genial estar ahí", dice.
"Aprender sobre Pando nos sirve para saber cómo vivir de manera compatible con nuestra Tierra".
Fuente: Redacción BBC News Mundo y https://www.labrujulaverde.com/2015/06/el-organismo-mas-grande-y-pesado-del-mundo - Imagenes: Lance Oditt - Cultura Colectiva News - www.pinterest.es
La idea, según Rogers, es "darle un espacio de respiro para que Pando se recupere".
"A primera vista es un simple bosque, pero cuando te enteras de que es un solo organismo, se siente genial estar ahí", dice.
"Aprender sobre Pando nos sirve para saber cómo vivir de manera compatible con nuestra Tierra".
Fuente: Redacción BBC News Mundo y https://www.labrujulaverde.com/2015/06/el-organismo-mas-grande-y-pesado-del-mundo - Imagenes: Lance Oditt - Cultura Colectiva News - www.pinterest.es