Celebrando conquistas en torno a las represas en Brasil y las fumigaciones en Argentina.
Desde A Planeta nos sumamos a las celebraciones de activistas y personas afectadas en Brasil y Argentina. En Brasil, principalmente promovida por el MAB, Movimiento de los y las Afectadas por Represas de Brasil, se aprobó la Política Nacional de Derechos de las Poblaciones Afectadas por Represas (PNAB). Esta Ley es la consecución de más de 40 años de lucha... Por otro lado, los y las vecinas autoconvocadas de Sastre, en Santa Fe, consiguieron que se materialice una demanda antigua: una demarcación de exclusión de 1000 metros alrededor del pueblo para la fumigación de cultivos.
Celebrando la nueva Política de Derechos de las Poblaciones Afectadas por Represas
Después de más de 40 años de lucha, este martes 14 de noviembre de 2023 el MAB, Movimiento de los y las Afectadas por Represas de Brasil consiguió que el estado de Brasil reconozca a las personas afectadas en su legislación. Ese día el Senado Federal de Brasil aprobó la Política Nacional de Derechos de las Poblaciones Afectadas por Represas (PNAB). La victoria representa el logro más importante en la historia de la lucha del MAB y de los afectados por las represas en Brasil. La decisión vino precedida de una nueva movilización del MAB, de una Jornada de Lucha en Brasilia, la capital, para presionar y mostrar una vez más la necesidad de una ley así.
Brasil debido a su extensión, a su riqueza hídrica pero sobre todo a la adopción de políticas desarrollistas y que buscaban el rápido beneficio, multiplicó la construcción de represas en su vasta geografía. Esto se realizó sin tener en cuenta los ecosistemas, ni mucho menos los impactos indirectos, y tampoco los impactos a comunidades que fueron desplazadas y perdieron sus hogares y medios de vida. Más de 24.000 represas fueron construidas, algunas de ellas mastondóticas. Las personas afectadas, mientras, se contabilizan en un millón, aunque, como nos muestran todos los desastres recientes, las indirectas suman otros millones.
Desde el inicio de esta política desastrosa, el MAB tuvo como objetivo el aglutinar a las personas afectadas para así hacer fuerza. Su lucha se remonta a todos esos años y en casi todos los rincones y ríos de ese gran país, demostrando todo este tiempo no sólo una convicción innegable y honesta sino también una gran organización en la que participan desde la base esos miles de personas afectadas. Sin duda, esta nueva ley es el fruto de esa tenacidad, de esa honestidad y de esa solidaridad y cooperación entre las personas afectadas. Por ello, tras muchos años de seguir y compartir su lucha, aquí no queda más que felicitar al MAB y a todas las personas afectadas por la conquista.
Esta ley es también el resultado de un nuevo gobierno que no lo es tanto, y la apuesta y contribución del MAB también a su materialización. Es nuevo porque viene después de los tristes gobiernos de Temer y Bolsonaro. Pero no tanto porque el PT y Lula ya estuvieron antes en el gobierno. Debemos recordar que Lula también, pese a ser su razón principal el socializar la riqueza, compartió también esa política desarrollista. El fue el principal impulsor de proyectos terribles como el de Belo Monte. Sin embargo, desde que se inició la conspiración para desbancar al PT del gobierno, el MAB apoyó y contribuyó así a esta nueva victoria. Ese apoyo se correspondía a la rectificación en política energética e hídrica y en un reconocimiento inequívoco de las personas afectadas por las represas.
El cambio de propuesta también se reflejo en la vuelta de Marina Silva, que, precisamente abandonó el Ministerio de Medio Ambiente en 2008 en la anterior legislación (2003 a 2011) por discrepancias en materia ambiental. El nuevo gobierno ha incidido en retomar las políticas climáticas, y recuperó muchos de los órganos veladores del medio ambiente y de los pueblos indígenas desmantelados por su predecesor. No hay que olvidar, que si bien Brasil sufre un deterioro ambiental constante debido a su riqueza, en los últimos años del gobierno Bolsonaro esta se había acentuado, pues este entendía que todo ecosistema existía para ser explotado y producir beneficios (en teoría, para el país, pero todas sabemos que son para unos pocos).
Desde que se inició este nuevo gobierno, han existido crisis internas en materia ambiental, pero desde un inicio se ha mostrado propositivo con situaciones extremas como las provocadas con la minería en Roraima, en la Amazonía y en todo el país. Pero también se han intensificado las multas por deforestación y otros delitos ambientales. Ahora, esta nueva ley ratifica la confianza del MAB y también demuestra ese cambio de concepción política. Desde aquí esperamos que ese cambio se plasme en más políticas, pero sobre todo que las leyes aprobadas son respetadas y utilizadas.
Hasta ahora, la legislación brasileña definía el concepto de personas afectadas por represas. No existen directrices que establezcan derechos en casos de rotura u otros desastres, ni reglas para prevenir abusos. La nueva Política Nacional de Derechos de las Poblaciones Afectadas por Represas (PNAB) establecerá quiénes son las poblaciones afectadas por las represas (PAB), cuáles son sus derechos, las formas de reparación y crea programas específicos y mecanismos de participación de las personas afectadas para monitorear e implementar la política de derechos.
En la PNAB, las empresas responsables de los proyectos deberán financiar un programa centrado en los derechos humanos y dirigido a las poblaciones que viven en los territorios afectados. También estipulará los daños a considerar para que personas y comunidades sean asistidas, desde la pérdida de propiedad a la depreciación de bienes inmuebles, daño a la capacidad productiva, privación o deterioro dela calidad del agua y la pérdida de fuentes de ingresos. También proporcionará compensación en casos de desplazamiento y pérdidas inmateriales. Esta compensación tendrá en cuenta “la diversidad de situaciones, experiencias, vocaciones y preferencias, culturas y especificidades de grupos, comunidades, familias e individuos”. Las empresas también estarán obligadas a financiar acciones dirigidas específicamente a grupos vulnerables.
La PNAB tuvo un amplio apoyo en la Cámara y fue aprobada por unanimidad en el Senado Federal, sin votos en contra, lo que demuestra lo necesaria que se percibe después de tantos años de vacío legal. En su comunicado «El MAB reconoce y agradece la extraordinaria solidaridad y apoyo de organizaciones aliadas, líderes populares, personalidades, investigadores, docentes, líderes religiosos, autoridades y amigos del Movimiento, que siempre han estado sumando esfuerzos por la aprobación de la PNAB».
Pero sin duda esta victoria se debe a todas las personas afectadas y a todas las personas involucradas con MAB, a todos y todas las activistas que están ahí día a día luchando por sus derechos. A todas ellas se acuerda el MAB y se lo dedica, especialmente «a quienes cayeron en la justa lucha de los afectados, a las víctimas de los derrumbes de represas y de los desastres climáticos».
En ese agradecimiento el MAB incluye una mención especial al movimiento internacional. Y haciendo gala de la solidaridad y el internacionalismo que le caracteriza, en un momento tan crítico y doloroso el MAB dedica esta conquista «especialmente al pueblo de Palestina, que es víctima de invasiones y ha sido afectado por la guerra injusta del imperialismo» (a este respecto citar también otro gesto solidario del pueblo organizado brasileño, como son las 2 toneladas de alimentos que el MST ha enviado a Gaza. Se plantean enviar 100 toneladas).
1000 metros de exclusión para fumigaciones en Sastre
La Corte Suprema de Justicia (CSJ) de Santa Fe falló a favor de los vecinos autoconvocados de Sastre y declaró una zona de exclusión de 1000 metros alrededor del pueblo para la fumigación de cultivos.
Sastre una ciudad de 7.000 habitantes, y una de las poblaciones con mayor índice de casos de cáncer en la región de Rosario por fumigaciónes con glifosato en los cultivos de soja, maíz y trigo. En la provincia de Santa Fe, esta campaña de noviembre 2023 se prevé la simbra de 1.050.000 Has de soja. Tres años después la Corte Suprema de esa provincia confirmaba el fallo judicial de primera instancia de 2020 que luego dio lugar a un reclamo colectivo.
Estás fumigaciones se realizan desde tractores con largos dispersores o mosquitos que les llaman. Estos provocan que el glifosato se extienda por todo y envenene también a la población.
En 2014 la zona de exclusión era de meros 100 metros, pero los consecuencias eran manifestas con casos de cánceres y linfomas. Entonces empezaron a coger firmas. Los productores agrícolas accedieron a aumentar dicha zona de exclusión tan sólo a 200 metros. Luego a 400. Cuando los concejales intentaron llevarla a 500 metros montaron en cólera: hubo sesiones municipales con más de 50 camionetas 4×4 fuera. Hay que explicar que la municipalidad actuaba en concordanza con los señores rurales. Debemos recordar que las Madres de Ituzaingó consiguieron una distancia de exclusión de 2,5 kilómetros.
La comunidad afectada no cedió a las presiones. Una de las fórmulas más visual y certera fue el mapeo de cánceres: en un mapa de la localidad colocaron puntos rojos en cada domicilio en el que residía una víctima de cáncer. En 2017, en un estudio de la Universidad Nacional de Rosario, Sastre resultó el lugar con mayor índice de casos de cáncer en la región.
En 2018 el caso de Zoe, una niña que con dos años presentó un linfoma, «despertó conciencias», como informa Patricia Chaina en Página 12. Esta niña vivía frente a los campos donde había pasado el mosquito fumigador. Entonces se presentó un reclamo judicial como “amparo ambiental colectivo”. Pero la hostilidad desde los agro-señores aumentó. Identificaban a los firmantes de la denuncian, y presionaban. Por ejemplo, si algún firmante estaba contratado por la municipalidad lo despedían. En enero fueron incluidos en la causa e hicieron que cayera.
Entonces la causa pasó al Juzgado de Civil y Comercial. Ahí el Juez Duilio Hail escuchó a los y las demandantes. Este juez fue el que dictó la sentencia de 1000 metros asesorado por el fiscal Carlos Stegmayer. Stegmayer ya consiguió que el área de exclusión para fumigaciones en dos barrios de la localidad de Rafaela se incrementará hasta los 800 metros.
La Municipalidad de Sastre, nuevamente, demostró no querer proteger a sus ciudadanos y recurrió la decisión considerándola inconstitucional, pero ésta fue ratificada el 7 de noviembre. La causa tiene un fuerte fundamento en la protección de la vida, la salud de las personas y el ambiente e invoca el principio precautorio. También incorpora numerosas pruebas reunidas como voces de expertos, informes científicos y territoriales y la normativa ambiental vigente.
El glifosato es uno de los ingredientes activos del herbicida Roundup. Monsanto lo introdujo en 1974. Bayer compró Monsanto en 2018. En 2015, la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer de la Organización Mundial de la Salud (OMS) concluyó que la substancia es «probablemente carcinógena para los humanos». Sin embargo, el número de personas afectadas anualmente por pesticidas en el mundo se eleva a la terrorífica cifra de 385.000 millones.
El uso del glifosato está muy unido al cultivo de soja, sobre todo la transgénica que es resistente a éste. La conciencia sobre las consecuencias del glifosato ha crecido en los últimos años en Argentina, pese a la oposición a modificaciones del agronegocio. En 2021 se utilizaron más de 600 millones de litros de pesticidas en Argentina, con las consecuencias humanas y ambientales que comentamos. En la provincia de Chubut está prohibido su uso desde 2020, y el pasado agosto se aprobó que el prohibirlo totalmente en la provincia de Misiones desde 2025. En Alemania también planean prohibir completamente su uso para fines de este año, 2023.
Celebramos esta decisión también con la comunidad de Sastre, y agardecemos su lucha en condiciones tan hostiles. Esperamos ahora que esta decisión siente precedente para otros casos y para futuros litigios que impulsen otras comunidades afectadas por las fumigaciones. Y que sirva para la erradicación total del uso de herbicidas químicas y de la agricultura industrial.
Fuente: https://aplaneta.org/2023/11/17/celebrando-conquistas-en-torno-a-las-represas-en-brasil-y-las-fumigaciones-en-argentina/