Bali / Indonesia¿Por qué todas las escuelas del futuro deberían ser como esta?
La Green School de Bali, en Indonesia, es un proyecto verdaderamente único que desde el 2008 se ha planteado como un modelo de sustentabilidad integral. Mientras que ya existen visiones ecológicas en otras escuelas, la de Bali posee un modelo de educación innovador, integral y con un enfoque completamente verde. Sus características podrían ser replicadas en otras partes del mundo, y también pueden funcionar como un referente para las escuelas del futuro.
En este espacio se imparte educación para niños desde maternal, hasta jóvenes de preparatoria. Es una escuela ecológica que funciona como institución sin fines de lucro y las ganancias sirven para la mejora y mantenimiento del proyecto. Se trata de una institución ejemplar que nos cuestiona, a los demás países, si nuestra disciplina escolar está bien orientada.
La construcción es responsiva con el medioambiente
La conciencia ambiental está tomando cada vez más peso, y uno de sus pilares es la idea de la sustentabilidad. Ésta implica ser capaz de aprovechar el medioambiente sin sobreexplotarlo, con vistas a que los recursos no se extingan y de forma equitativa entre todos los seres vivos que lo necesitan, incluidos los seres humanos. La sustentabilidad llama al consumo de lo local y lo orgánico. En este sentido la construcción, el diseño arquitectónico y el urbanismo deben contemplar un equilibrio con el entorno y el uso de materiales ecológicos.
En el caso de la escuela ecológica de Bali, la impresionante estructura que la alberga está hecha de bambú, lodo y plantas locales y está situada en plena selva; esto es importante porque es muy beneficioso para los niños tener mucho contacto con áreas verdes. Como núcleo del diseño está el concepto de “permacultura”, es decir, construir a través de la simulación o la continuación de las formas y patrones encontrados en el entorno natural.
La permacultura permite a las edificaciones funcionar armoniosamente con el entorno y no ser disruptivas para las vidas de la flora y fauna o para los ciclos naturales. Esto significa también producir la energía necesaria para sobrevivir y tratar los desechos que produce la vida cotidiana dentro de un esquema ecológico. La Green School de Bali cuenta con paneles solares, captación de agua de lluvias, centro de manejo de desechos, filtración de aguas residuales y elaboración de composta, entre otras tecnologías y procesos mediante los cuales sus integrantes se aseguran de mantener verdes todas sus acciones.
Están educando para la autosuficiencia
Sustentabilidad también significa procurar la autosuficiencia; es decir, poder producir lo que uno necesita para sobrevivir, sin depender de agentes externos. Mientras que en países como México se está abandonando el campo y no parece haber estrategias para reactivarlo, la respuesta de la escuela ecológica de Bali es administrar y trabajar, con ayuda de todos los alumnos, un huerto interno que sirva como método de aprendizaje y que, efectivamente, provea de ciertos productos a los miembros de la comunidad escolar.
Forman agentes de cambio conscientes del entorno ambiental y social
Para luchar por el entorno, debemos regresar al imaginario un reconocimiento fuerte de que la vida social es comunitaria y que los movimientos de una sola de las partes afectan al todo. Y sólo confiando en que todos nos vamos a cuidar unos a otros, podemos reintegrar lo comunitario al centro de nuestras vidas cotidianas. Cada uno de nosotros debe incentivar esta reflexión entre los miembros de nuestras comunidades.
Están conscientes del contexto actual y actúan en presente
Es muy importante para las iniciativas como la de esta escuela ecológica reconocer el contexto actual; especialmente, sus dificultades. Se trata de dejar de enunciar los grandes problemas planteando las soluciones evidentes y, en su lugar, reconocer que a cada uno le toca resolver un pequeño fragmento de lo que ocurre globalmente. Sólo podemos hacer un cambio a la vez, y no podemos llevarlo a cabo si ignoramos que en el mundo entero se están gestando conflictos sociales y catástrofes ambientales.
Además, hay que actuar en presente. Hay que actuar ya. Este principio se manifiesta en la Green School constantemente, pues les preocupa mucho que sus alumnos realicen prácticas y los incentivan a proponer y llevar a cabo proyectos e investigaciones útiles constantemente. Por otro lado, el proyecto es holístico e integra la misma visión verde en todas sus partes, desde el diseño ecológico del edificio hasta el constante cuidado a la salud de todos los miembros de la comunidad.
Se saben plurales
Por último es importante recordar que nuestras comunidades son cada vez más plurales, más diversas, pero que si nos articulamos desde lo comunitario, podemos generar cambios sin ignorar las necesidades y potencialidades de cada sujeto. Abrirse a la multiculturalidad es sólo el primer paso.
Fuente: https://ecoosfera.com/medio-ambiente/por-que-todas-las-escuelas-del-futuro-deberian-ser-como-esta/