Nos comemos el mundo






La crisis está reduciendo nuestro crecimiento económico. El Producto Interior Bruto (PIB) de España debería aumentar al menos un 2% al año, como lo está haciendo Alemania, o un 10,5% como lo hace China, pero apenas lo hace un 0,2%. Qué desastre, necesitamos crecer, y crecer, y crecer… ¿Sin límites?
No todos piensan así. La Fundación por la Nueva Economía (NEF) acaba de publicar su informe “Growth isn’t posible” (el crecimiento no es posible), donde evidencia la imposibilidad de lograr un crecimiento económico indefinido basado en el consumo desenfrenado de los recursos naturales de la Tierra. Sus conclusiones tan sólo han sorprendido a los economistas, esos seres tan ajenos a la realidad y a la lógica de lo evidente. Mientras los recursos naturales no sean capaces de crecer a nuestro trepidante ritmo actual de desarrollo, y no lo pueden hacer, el resultado final resulta evidente: nos vamos a comer el planeta.


Por si alguno (político o banquero) no lo entiende, NEF ha creado un corto de animación titulado El hámster imposible, donde se hace un terrorífico símil entre la economía general y un hambriento hámster que acaba devorando el mundo.
El planteamiento es sencillo. Desde su nacimiento hasta la pubertad un hámster dobla su peso cada semana. Si al hacerse adulto este crecimiento no se detuviera, como ocurre con todos los animales, y continuara duplicando su peso, al cumplir el primer año de vida pesaría 9.000 toneladas. Este hámster sería capaz de comerse en un solo día todo el maíz producido en el mundo entero durante un año, y seguiría hambriento.
Hay un motivo por el que las criaturas solamente crecen en la naturaleza hasta alcanzar cierto tamaño. ¿Por qué piensa la mayoría de los economistas y políticos que la economía mundial puede crecer indefinidamente?



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Fuente: Ladyverd.com

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