El despertar
Cada día vemos con preocupación incierta, que la mal llamada crisis mundial, protagonizada por los poderes económicos mundiales para tener a la población y a los estados bajo su yugo opresor, se está extendiendo como una cadena de dominó imparable, a otros comportamientos sociales. Los representantes del pueblo, con total impunidad, limitan los derechos de las personas adquiridos en muchos años de lucha, dictaminan leyes contrarias a la Constitución sin importarles las consecuencias y se convierten en meros opresores, marionetas sin corazón, que olvidan a quienes les han elegido y se vuelven contra sus propias raíces a sabiendas que ellos jamás serán tocados y que están blindados, tanto sus sueldos vitalicios, como sus numerosas ventajas que por ser político, obtienen de unas leyes votadas en el Congreso por todos los partidos bajo el silencio de los medios de comunicación.
POR: PEDRO POZAS TERRADOS . DIRECTOR EJECUTIVO PROYECTO GRAN SIMIO / ESPAÑA
Pero el grave problema existente, no es este que cualquier persona con visión global, puede intuir y ver con claridad. El pasotismo inesperado de una sociedad ciega, conformista e irresponsable; es el mayor impacto que la crisis ha extendido en las poblaciones, fumigando las mentes, imponiendo el miedo del terrorismo, del paro, de la caída de los bancos, del caos existente en una sociedad que de seguir así puede reventar por alguno de sus extremos.
Este es el fracaso absoluto e inequívoco de nuestros gobernantes, que no han sabido o querido frenar el imperialismo de las multinacionales, verdaderos dueños de un mundo caótico que cada vez se distancia más de los derechos humanos y del respeto a la vida.
La gente del pueblo, la de toda la vida, los llamados plebeyos…somos los que tenemos que pagar a lo largo de la historia de la humanidad los errores de nuestros representantes, que no saben defender la cantera de donde proceden y olvidan por completo que se deben en cuerpo y alma a todos los que democráticamente les han votado para defender sus derechos. Unos derechos por otro lado que quedan sepultados en el lodo de la mentira y corrupción, desde el segundo día en que están gobernando al estilo del feudalismo de antaño. Nada ha cambiado desde entonces. La opresión ha sido disfrazada por la llamada democracia, que solo es un plástico negro que oculta la dictadora económica a la que estamos sometidos sin compasión.
Ya lo vimos en la guerra de Irak, lo estamos viendo en la de Afganistán y lo seguimos viendo en la violación de derechos humanos de la población saharaui y de otros lugares del mundo.
Si ya nos han robado bastante en las bajadas de sueldos, subidas de impuestos, congelación de salarios a los jubilados, ayudas millonarias a bancos que nunca han estado en peligro y que tienen todos los meses beneficios…..ahora resulta que también la prensa escrita parece pedir dinero a las marionetas y éstas, sin dilación, preparan un paquete de medidas para ayudarlas, para salvar a sus propios guerreros que son los que manipulan las mentes de esta sociedad parada en la ignorancia consentida. Y no hacen asco a estas peticiones, prontamente se sacará dinero de donde no lo hay, se recortarán las ayudas sociales y se decretaran leyes que en situaciones normales pasarían meses en ser aprobadas.
Esta es la verdadera situación a la que nos enfrentamos. Y mientras….las multinacionales arrasando la biodiversidad, los políticos (de cualquier signo) consintiendo los abusos desleales contra la sociedad civil, las líderes campesinos que se alzan en su lucha justa por defender sus tierras, silenciados con balas en la cabeza y un tercer mundo cayendo en el silencio de la sin razón, en el más profundo de los genocidios. La iglesia pasotista de problemas sociales, preocupándose de condones y abortos, cuando millones de niños mueren por desnutrición y olvido, cuando la propia iglesia es un estado con ejército y poder que se comporta como todos los demás.
¿Cómo se puede permitir que España no condene las actuaciones de Marruecos contra el pueblo saharaui? ¿Por qué no lo hacen? ¿Por los intereses económicos y acuerdos existentes? ¿Es lícito? ¿Con que derecho? La historia una vez más se repite, el atropello de los derechos humanos cada vez es más frecuente, las dictaduras son más extremistas y mientras los que estamos en esta sociedad privilegiada que nos ha tocado vivir, ignoramos esa otra que sufre en el más absoluto de las soledades.
Quiero creer, que todos los responsables de esta maquinaria infernal, serán castigados a vivir lo que ellos mismos han moldeado, que muerdan la tierra sangrienta de la intolerancia, que sean pateados de sus hogares, que sientan como sus seres queridos son violados, asesinados, que padezcan en sus carnes la tortura física…..quiero creer que ellos, los responsables de estas barbaridades, vuelvan en una segunda vida a sufrir las pinceladas de su propio egoísmo, a sentir lo que no sintieron mientas se fumaban un puro y daban una orden que ocasionaba dolor y muerte.
Y quiero creer, que esta sociedad durmiente, ocupada en saber la vida de sus deportistas favoritos o los entresijos de los “famosos”, parásitos de un mundo distorsionado de la verdad; despierte de su letargo, de su enfermedad senil, de su pasotismo embriagador, de su ignorancia consentida, de sus brazos caídos y sus risas apagadas; y levanten su voz, su voto, su corazón y sus manos en la mayor revolución pacífica jamás realizada por el ser humano, derrotando al poder económico, revolucionando el sistema político, poniendo piedras para el comienzo de una sociedad avanzada en la igualdad, en el respeto a la vida, haciendo honor al significado “humanidad”, borrando las chisteras y sacos de billetes, por la sonrisa un niño en cualquier parte del mundo.
Y quiero creer en la esperanza, en la que juntos, unidos por una misma pasión de libertad y progreso, andemos caminando hacia la verdadera dignidad de las personas, uniendo nuestras manos para forjar un futuro del que estén orgullosos nuestros hijos y las generaciones venideras.