Los nuevos capítulos de 'Black Mirror', del más al menos perturbador
Se estrena el
próximo 29 de diciembre la cuarta temporada de ‘Black Mirror’ con seis
nuevos episodios que incluyen cuatro que generarán mucha angustia, uno
bastante divertido y otro cargado de sentimentalismo, en el buen
sentido.
MARÍA JOSÉ ARIAS
Black Mirror vuelve
por Navidad y lo hace con una temporada de seis episodios –antes de
desembarcar en Netflix eran de tres– para disfrutar a sorbos, para
paladearlos, repensarlos y quedarse con mal cuerpo después. Porque Black
Mirror mantiene su esencia, esa que le hizo llegar a donde ha llegado y
que la convirtió en una de las series más perturbadoras de la historia
seriéfila reciente.
Charlie Brooker –solo hay un episodio para el que se ha buscado coguionista– elige para cada capítulo un innovador dispositivo tecnológico (o varios) con el que explorar cómo el uso que se hace de algo inventado para ayudar al ser humano puede ser pervertido hasta el punto de convertirse en su peor pesadilla. Y con esa premisa que comparten todas y cada una de las temporadas de Black Mirror explorar así en cada historia un tema. En esta ocasión, la maternidad/paternidad, la venganza, el miedo, el instinto de supervivencia, el morbo y la búsqueda del amor.
Vistos todos los capítulos que componen esta cuarta temporada de Black Mirror, son muchas las cosas que se pueden decir sobre ella. Sin embargo, como lo mejor es que el espectador llegue virgen a la pantalla hasta el próximo 29 de diciembre, aquí va una clasificación libre de spoilers en la que las historias aparecen de la más a la menos perturbadora. El orden en el que se ven puede alterar el sabor de boca final.
1. ‘Black Museum’
¿Hasta dónde puede llegar el morbo del ser humano? Una viajera que va camino de visitar a su padre para en medio de la nada, junto a una gasolinera abandonada. Mientras la batería de su coche se recarga decide entrar en el Black Museum, que abre sus puertas exclusivamente para ella. Una vez dentro, su propietario le ofrece un tour guiado en el que le va mostrando los dispositivos criminales que alberga este siniestro edificio.
La instalación se alimenta de la curiosidad que generan según qué sucesos truculentos y pone a prueba la capacidad del ser humano para causar daño sin consecuencias y vanagloriarse de ello después. Dirigido por Colm McCarthy, está protagonizado por Douglas Hodge y Letitia Wright. Parte de este episodio, el tercero, está rodado en España.
2. ‘Cabeza de metal’
Cronológicamente es el quinto de la temporada, pero Cabeza de metal bien podría haberse situado en el primer puesto de lo perturbador dependiendo de los ojos que lo vean. De lo que no hay duda es de que el dirigido por David Slade es el más angustioso de los seis que componen esta nueva tanda. Una persecución extrema en un territorio inhóspito y abandonado en el que víctima y presa participan en un juego del gato y el ratón sádico y violento.
Algunas de las escenas más desagradables de esta temporada están aquí, en la historia protagonizada por Maxine Peake, Jake Davies y Clint Dyer (Hope Springs). Poco se puede añadir sin desvelar más de la cuenta. Solo que está rodado en blanco y negro y que es, con 40 minutos de duración, el más corto de todos. Aún así, la angustia que genera hace que el tiempo ante la pantalla parezca mucho mayor.
3. ‘Arkangel’
La cuarta temporada de Black Mirror abre con un capítulo dirigido por Jodie Foster que explora los límites del control parental y el libre albedrío de los hijos. ¿Dónde acaba uno y empieza el otro? Marie es una madre que un día, un segundo, pierde de vista a su hija. Durante unos minutos no sabe dónde está y el miedo se apodera de ella.
Como consecuencia de ese instante decide inscribir a su hija en un programa que se basa en el control en todo momento de la situación. Una decisión que marcará para siempre la vida de Marie y Sara como nunca lo hubieran imaginado. Arkangel está protagonizado por Rosemarie Dewitt, Brenna Harding y Owen Teague.
4. ‘Cocodrilo’
Posiblemente Cocodrilo sea el eslabón débil de la temporada, el episodio más flojo. Lo que Charlie Brooker plantea en esta historia dirigida por John Hillcoat y rodada en Islandia tiene que ver con un dispositivo capaz de explorar los recuerdos humanos. Ese es su elemento tecnológico inquietante.
Aunque en realidad no va de eso, si no de las consecuencias de hurgar en ellos, de lo que se puede encontrar y cómo buscando algo se tropieza con otra cosa peor. De eso y de lo que puede llegar a ser capaz de hacer alguien para mantener su situación privilegiada tapando un error del pasado. En el reparto, Andrea Riseborough, Andrew Gower y Kiran Sonia Sawar.
5. ‘U.S.S. Callister’
En este caso lo perturbador viene de la idea de plantearse hasta qué punto alguien puede dar rienda suelta a sus fantasías de venganza cuando se encuentra en un mundo que no es el suyo. U.S.S. Callister es uno de los mejores capítulos, y también el más divertido, de esta temporada. Sobre todo por un ambientación que recuerda al universo Star Trek que encantará a los fans de la saga estelar y por su puesta en escena.
Dirigido por Toby Haynes y coescrito por Williams Bridges –este es el único capítulo que no ha guionizado en solitario Brooker–, es el más largo (1 hora y 16 minutos) y el que deja un mejor sabor de boca. Algo que no suele pasar en Black Mirror. Es ideal para verlo el primero o el último. En el orden facilitado por Netflix es el sexto. También es el que tiene más caras conocidas. Lo protagonizan Jesse Plemons, Cristin Milioti, Jimmi Simpson y Michaela como parte de la tripulación del U.S.S. Callister.
6. ‘Hang the DJ’
San Junipero solo hay uno, pero si hubiese que elegir un equivalente en esta temporada, podría ser este, el cuarto capítulo, con Tim Van Patten en la dirección y Georgina Campbell y Joe Cole como protagonistas. Ellos dos son Amy y Cole, una pareja con mucha química a la que el sistema al que se han apuntado les empareja durante 12 horas.
“Debería ser una locura antes del sistema” dice ella en un momento de su cita. Se refiere precisamente a eso, a ligar, a emparejarse, a enamorarse, a encontrar a la persona perfecta… Hang the DJ explora la búsqueda del amor en un entorno sistematizado en el que un programa te dice con quién salir, cuándo y durante cuánto tiempo.
Fuente: Publico.es
Charlie Brooker –solo hay un episodio para el que se ha buscado coguionista– elige para cada capítulo un innovador dispositivo tecnológico (o varios) con el que explorar cómo el uso que se hace de algo inventado para ayudar al ser humano puede ser pervertido hasta el punto de convertirse en su peor pesadilla. Y con esa premisa que comparten todas y cada una de las temporadas de Black Mirror explorar así en cada historia un tema. En esta ocasión, la maternidad/paternidad, la venganza, el miedo, el instinto de supervivencia, el morbo y la búsqueda del amor.
Vistos todos los capítulos que componen esta cuarta temporada de Black Mirror, son muchas las cosas que se pueden decir sobre ella. Sin embargo, como lo mejor es que el espectador llegue virgen a la pantalla hasta el próximo 29 de diciembre, aquí va una clasificación libre de spoilers en la que las historias aparecen de la más a la menos perturbadora. El orden en el que se ven puede alterar el sabor de boca final.
1. ‘Black Museum’
¿Hasta dónde puede llegar el morbo del ser humano? Una viajera que va camino de visitar a su padre para en medio de la nada, junto a una gasolinera abandonada. Mientras la batería de su coche se recarga decide entrar en el Black Museum, que abre sus puertas exclusivamente para ella. Una vez dentro, su propietario le ofrece un tour guiado en el que le va mostrando los dispositivos criminales que alberga este siniestro edificio.
La instalación se alimenta de la curiosidad que generan según qué sucesos truculentos y pone a prueba la capacidad del ser humano para causar daño sin consecuencias y vanagloriarse de ello después. Dirigido por Colm McCarthy, está protagonizado por Douglas Hodge y Letitia Wright. Parte de este episodio, el tercero, está rodado en España.
2. ‘Cabeza de metal’
Cronológicamente es el quinto de la temporada, pero Cabeza de metal bien podría haberse situado en el primer puesto de lo perturbador dependiendo de los ojos que lo vean. De lo que no hay duda es de que el dirigido por David Slade es el más angustioso de los seis que componen esta nueva tanda. Una persecución extrema en un territorio inhóspito y abandonado en el que víctima y presa participan en un juego del gato y el ratón sádico y violento.
Algunas de las escenas más desagradables de esta temporada están aquí, en la historia protagonizada por Maxine Peake, Jake Davies y Clint Dyer (Hope Springs). Poco se puede añadir sin desvelar más de la cuenta. Solo que está rodado en blanco y negro y que es, con 40 minutos de duración, el más corto de todos. Aún así, la angustia que genera hace que el tiempo ante la pantalla parezca mucho mayor.
3. ‘Arkangel’
La cuarta temporada de Black Mirror abre con un capítulo dirigido por Jodie Foster que explora los límites del control parental y el libre albedrío de los hijos. ¿Dónde acaba uno y empieza el otro? Marie es una madre que un día, un segundo, pierde de vista a su hija. Durante unos minutos no sabe dónde está y el miedo se apodera de ella.
Como consecuencia de ese instante decide inscribir a su hija en un programa que se basa en el control en todo momento de la situación. Una decisión que marcará para siempre la vida de Marie y Sara como nunca lo hubieran imaginado. Arkangel está protagonizado por Rosemarie Dewitt, Brenna Harding y Owen Teague.
4. ‘Cocodrilo’
Posiblemente Cocodrilo sea el eslabón débil de la temporada, el episodio más flojo. Lo que Charlie Brooker plantea en esta historia dirigida por John Hillcoat y rodada en Islandia tiene que ver con un dispositivo capaz de explorar los recuerdos humanos. Ese es su elemento tecnológico inquietante.
Aunque en realidad no va de eso, si no de las consecuencias de hurgar en ellos, de lo que se puede encontrar y cómo buscando algo se tropieza con otra cosa peor. De eso y de lo que puede llegar a ser capaz de hacer alguien para mantener su situación privilegiada tapando un error del pasado. En el reparto, Andrea Riseborough, Andrew Gower y Kiran Sonia Sawar.
5. ‘U.S.S. Callister’
En este caso lo perturbador viene de la idea de plantearse hasta qué punto alguien puede dar rienda suelta a sus fantasías de venganza cuando se encuentra en un mundo que no es el suyo. U.S.S. Callister es uno de los mejores capítulos, y también el más divertido, de esta temporada. Sobre todo por un ambientación que recuerda al universo Star Trek que encantará a los fans de la saga estelar y por su puesta en escena.
Dirigido por Toby Haynes y coescrito por Williams Bridges –este es el único capítulo que no ha guionizado en solitario Brooker–, es el más largo (1 hora y 16 minutos) y el que deja un mejor sabor de boca. Algo que no suele pasar en Black Mirror. Es ideal para verlo el primero o el último. En el orden facilitado por Netflix es el sexto. También es el que tiene más caras conocidas. Lo protagonizan Jesse Plemons, Cristin Milioti, Jimmi Simpson y Michaela como parte de la tripulación del U.S.S. Callister.
6. ‘Hang the DJ’
San Junipero solo hay uno, pero si hubiese que elegir un equivalente en esta temporada, podría ser este, el cuarto capítulo, con Tim Van Patten en la dirección y Georgina Campbell y Joe Cole como protagonistas. Ellos dos son Amy y Cole, una pareja con mucha química a la que el sistema al que se han apuntado les empareja durante 12 horas.
“Debería ser una locura antes del sistema” dice ella en un momento de su cita. Se refiere precisamente a eso, a ligar, a emparejarse, a enamorarse, a encontrar a la persona perfecta… Hang the DJ explora la búsqueda del amor en un entorno sistematizado en el que un programa te dice con quién salir, cuándo y durante cuánto tiempo.
Fuente: Publico.es