Costa Rica prohíbe la caza
Esta iniciativa es un precedente histórico que demuestra que es totalmente factible prohibir la caza comercial y deportiva, así como la posesión de especies silvestres
Costa Rica, uno de los países con mayor biodiversidad a nivel mundial, acaba de aprobar la Ley de Conservación de la Vida Silvestre, en la que se prohíbe la caza comercial y deportiva de especies silvestres, además del tráfico y de la posesión de éstas como mascotas. Ecologistas en Acción considera que una medida así sería perfectamente, no ya viable, sino necesaria.
Esta iniciativa es un precedente histórico que demuestra que es totalmente factible prohibir la caza comercial y deportiva, así como la posesión de especies silvestres, y lo hace a partir de una iniciativa legislativa popular que ha mostrado también el alto grado de madurez y de concienciación de la población.
Ecologistas en Acción considera que una medida así sería perfectamente, no ya viable, sino necesaria en España, un país en el que el grupo de presión cinegético, de la mano de los criterios más economicistas y antiambientalistas, está imponiendo por encima de la sensibilidad social un modelo de caza intensivo y agresivo que no duda en mantener prácticas crueles y masivas, en privatizar espacios naturales para la caza o en trasformar el medio natural con cercas, tiraderos y caminos, para masacrar millones de animales sin defensa posible.
Un país donde también hay un notable descontrol en la posesión de especies de fauna que está alimentando el tráfico ilegal y dando lugar a la introducción de especies invasoras en nuestros ecosistemas.
Precisamente ahora, España sufre una ola procinegética en las Administraciones que amenaza con cambiar las leyes de conservación de la naturaleza y de los espacios protegidos, incluidos la de los parques nacionales, para ofrecer más privilegios a la caza, en particular, a una élite de gestores y propietarios de terrenos cinegéticos y a las federaciones. Incluso se llega al delirio de subvencionar la caza en las escuelas, como está ocurriendo en Castilla y León.
Una vez más Costa Rica demuestra que son posibles medidas avanzadas de preservación de la naturaleza, ya lo hizo cuando en la década de los setenta del siglo XX creó su red de Parques Nacionales, que ocupan el 12 % de la superficie nacional. Y cuando en a partir de 1995 desarrolla el Sistema Nacional de Áreas de Conservación que abarca todo el territorio nacional.
La ley aprobada certifica el poder que sigue teniendo la ciudadanía movilizada, pues fue presentada en el Congreso avalada por más de 175.000 que respaldaron una iniciativa de la Asociación Preservacionista de Flora y Fauna Silvestres (Apreflofas). Asimismo, se ha aprobado a pesar de la oposición de varios partidos políticos.
También demuestra que realmente existe un modelo de gestión profundamente respetuoso con la biodiversidad, el cual es igualitario para todos los seres vivos y relaciona el medio natural con el socioeconómico. Se respetan los derechos de todos, humanos y no humanos, y se fomenta el turismo de naturaleza entre otras actividades económicas, beneficiando al conjunto de la población y no solo a unos pocos. Además se atienden situaciones singulares, en este sentido, se exceptúa de la prohibición la caza con fines científicos, de subsistencia y de control de poblaciones, así como la pesca.
Sin embargo, esto es sólo el comienzo, ahora queda lo más importante: la puesta en práctica y el control de la Ley. Para ello está previsto aplicar si es necesario duras sanciones. También deberán desarrollarse evaluaciones exhaustivas de los casos excepcionales de caza científica, de subsistencia y de control para evitar engaños, y considerar la pesca como otra tortura para los animales.
Queda camino por recorrer pero la iniciativa ya está en marcha y es esperanzadora y demostrativa. Anima a la lucha y a la defensa del medio natural y de las especies que nos rodean.