Perú: De la rebelión política a la subversión de la naturaleza
Por Jorge Lora Cam
De acuerdo con la Superintendencia de Transporte terrestre (Sutran) llegaron a ser 33 puntos bloqueados y 99 vías con acceso de forma restringida, incluyendo la Panamericana Sur. Son 18 regiones (de un total de 25) afectadas que podrían incrementarse. La activación de quebradas se da en 68 provincias de las regiones Áncash, Apurímac, Arequipa, Ayacucho, Cusco, Huancavelica, Huánuco, Ica, Junín, Lima, Loreto, Madre de Dios, Pasco, San Martín y Ucayali. En Lima estas lluvias de las partes altas influyen en la activación de quebradas y en el incremento del caudal de ríos Rímac, Chillón, Lurín y otros. 57 de las 60 quebradas de Lima se han activado afectando viviendas, escuelas, centros de salud de barrios populares y marginales. Hasta balnearios como Ancón, Pucusana, Punta Hermosa, Punta Negra , San Bartolo y Santa María fueron declarados en emergencia. Esto no quedará allí, está en marcha la alerta de El Niño Costero, pues en tres meses o menos podrían darse cambios en la interacción océano atmósfera en la región del Pacifico Ecuatorial que se encuentra frente a Ecuador y el norte del Perú, desatando desastres mayores.
La política y nuestros territorios, nuestras aguas, nuestras cuencas.
El problema no son las abundantes lluvias, como parece; aun menos es un castigo divino, como cree el alcalde de Lima. Tampoco se trata de un mero problema administrativo de ausencia de planificación, de uso de suelo urbano o de ordenamiento territorial como dicen los tecnócratas caviares; que si bien son investigaciones que hacen falta y son indispensables para conocer y actuar, ello depende de los objetivos estatales. Estas lluvias mas bien deberían haber sido una bendición, pues el almacenamiento tiene un déficit del 50% por que no habían lluvias antes de estos excesos. Tras este desastre social -no natural- hay un problema mas decisivo y es de origen. El problema es la ausencia de almacenamiemto de aguas por las mineras y su Estado subsidiario. Por lo contrario, la apropiación de las aguas (y territorios) esta legalizada y esta política continuara mientras exista la actual constitución. Las corporaciones mineras, principalmente, se han apropiado de las mejores aguas limpias y evitan gastar en almacenamiento en represas u otras formas de conservar y dar buen uso a las aguas. Los excesos han desbordado los derechos sociales y tenemos mas de 100 ríos contaminados por las mineras y son millones de personas que tomamos agua con metales pesados incluido el uranio. De otro lado, esta minería es la que ha desplazado y obligado a migrar a cientos de miles de habitantes de los andes y hoy buscan lugares donde vivir y trabajar. El 56% de los peruanos viven en zonas periféricas a las ciudades, ocupan causes de ríos que son tremendamente inundables. Esto nos lleva a la pregunta de fondo ¿Qué es el país Perú? Una fuente de riqueza privada, un territorio de saqueadores y narcotraficantes, un espacio para rentistas, un lugar de instituciones corruptas, un punto de inversión y despojo. Pues en ello lo han convertido desde 1990, en un país con mayorías sin derechos, en un Estado colonial sin soberanía y sin interés por el bien común.
Los pueblos prehispánicos lo vieron de la manera opuesta, lo entendieron a la inversa. Sabían del actuar de la naturaleza e interactuaban con ella, había un metabolismo entre los hombres y la naturaleza. Tenían una visión totalizante y a la vez muy detallada de los flujos de las aguas. Frente a la época de grandes lluvias construyeron presas altoandinas para aprovechar las fuentes de agua y controlar su fuerza, iba acompañada de forestación de las partes altas de la cuenca, planificaban la siembra y cosecha de agua mediante las amunas, construyeron sistemas de regadío y de cultivos en andenes para producir alimentos, se cuidaban los ríos, los puquios, los manatiales, montaron acueductos y edificaron canales de piedra que aún perduran como testimonio de un sistema integral acompañado de investigación desde la praxis. Solo pudieron hacerlo por que la concepción que subyace en el sistema es el respetaba a la naturaleza y sus derechos, se dialogaba con ella mediante la observación atenta de sus señas y observatorios solares. La distribución colectiva de partes del territorio se complementaba con la planificación espacial donde los cultivos y viviendas tenían su lugar, las casas se ubicaban en las partes altas, se reforestaban las riberas de los ríos y se manejaban las lomas y los humedales, entre otras muchas acciones.
Si bien los problemas son históricos de larga duración, en el mediano plazo, después de las estafas de Odebrecht que comprometen a varias administraciones gubernamentales desde Fujimori. La Autoridad para la reconstrucción con Cambios, instaurada con Pedro Pablo Kuczynski hace seis años tras los desastres provocados en el norte peruano el 2027por el fenómeno del Niño, después de seis distintos presidentes, solo nos muestran nuevas evidencias de corrupción en el gasto público. Puentes, caminos, escuelas, postas medicas, etc.solo tenían avances del 10% y se derrumbaron. Los cientos de millones de dólares fueron perdidas sin responsables. El gobierno de Reino Unido queda exento de culpa aunque puso en entredicho los proyectos gobierno a gobierno. También ponen en evidencia que hoy en día las universidades y las instituciones no investigan. La información es poder y la desinformación también. El conocimiento ancestral se ha perdido con el colonialismo y el nuevo conocimiento queda oculto en los archivos corporativos y ministeriales, unicamente para el uso empresarial. Los huaycos son un problema multidimensional, pero principalmente político. Y así lo percibe el gobierno impuesto por las FFAA el Congreso y los magistrados. para la dictadura es una tregua que deben aprovechar para legitimarse, sin embargo se avizora un próximo lento renacimiento en el norte, en el centro y la amazonía que se se organizando siguiendo el ejemplo del sur.
De esta manera avanza la crisis y nos preguntamos ¿estamos en CRISIS?, ¿qué tipo de proceso de crisis vive el Perú?, es un tema por debatir. Y lo haremos en una segunda parte. Por ahora veamos cómo responde un régimen político antidemocrático (no como dice Tanaka: democrático-híbrido) frente a esta nueva coyuntura.
Transcurridos más de cien días de la instauración de una dictadura, de la destitución, apresamiento de Castillo, de resistencia y genocidio principalmente en la macro región sur; estamos ante un ejecutivo diseminado en varias instituciones, con objetivos comunes y diferencias entre ellos por la diversidad de intereses privados:
A) El gobierno del congreso, cuyo objetivo único es mantenerse hasta el 20226 con más y más privilegios y sobornos, con sus alas de derecha y seudoizquierda, que continúa criminalizando protestas, fiscalizando a la oposición, aumentado sus privilegios y postergando su salida sin interesarle lo más mínimo las masacres y los desastres propiciados por un Estado antinacional, cada vez más corrupto; abandona la función social y elimina nuevos derechos sociales y políticos. Mientras incrementan privilegios, hacen turismo por el mundo y asisten a reuniones virtuales del Congreso, la Comisión de Constitución del Congreso ha rechazado el predictamen que proponía adelantar las elecciones generales para el 2023. Su función solo es preparar leyes que favorezcan a la gran empresa y para el poder político real. En esta instancia, se han corrompido entre ellos y con los otros ejecutivos, generando acuerdos y desacuerdos cunado cruzan fronteras mafiosas.
B) El gobierno de los militares y de una policía privatizada, representado por el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, la que tiene como interés primordial manejar los narco-negocios, puertos y aeropuertos; las compras de armas, uniformes y alimentos. Son declarados enemigos de la soberanía (sellado con actas de sumisión), encabezado por la marina y su ideólogo y estratega Montesinos, con sus prácticas de sumisión institucional vía gratificaciones-extorsión, cohecho con los narcos, servicios de inteligencia y protección de trasnacionales y políticos corruptos. Mientras se derrumbaba el país ellos están protegiendo sus ganancias con la Operación Orión en el VRAEM. El problema es que solo alcanza para los jefes y entran en contradicción con las tropas maltratadas y expuestas a la muerte. En momentos del actual reparto de las reservas del Banco Central, reclaman una cota mayor. La policía en estado de podredumbre desde que se volvió sicaria del interés privado, asesina sin escrúpulos a los luchadores y ciudadanos que marchan. Hoy gozan de la protección del sistema judicial y principalmente por la Fiscal de la Nación, ilegal desde siempre en toda una vida corrupta.
C) El Gobierno del sistema judicial (Ministerio Publico, Junta Nacional de Fiscales, Tribunal constitucional, Cortes, Poder Judicial, etc.) a través del arma de la ley para permitir la política de la derecha neoliberal, diseñar el tipo de régimen, ajustar las leyes, dar inmunidad e impunidad a criminales y reprimir a los opositores, manejar la carcelería. La elite de magistrados se reparten enormes compensaciones por cumplir con sus tareas, pero no alcanza para los subordinados. La presidenta de Perú, Dina Boluarte, y el primer ministro, Alberto Otárola, no serán interrogados por la Procuraduría ni por los abogados de las víctimas de las protestas, pese a que han sido llamados a declarar en el marco de una investigación por presunto genocidio, homicidio calificado y lesiones graves relacionados con las muertes en las protestas sociales. Jueces Supremos: Sentencia del Tribunal Constitucional afecta independencia judicial y electoral Once jueces supremos titulares, firmaron un comunicado rechazando la sentencia del Tribunal Constitucional a favor del Congreso que, considera una serie de actos políticos del Parlamento libres del control judicial y más bien, permite el control de los organismos electorales. En este sistema hasta los aparentemente dignos fiscales de Lava Jato y Cuellos Blancos ahora son parte de la mafia de la narco Fiscal, cuello blanco.
D) El Gobierno del Gabinete y ejecutivo formal, que recibe órdenes directas del Estado profundo, enquistado en E, pero que en cada ciclo tiene intereses particulares. En el anterior, de Castillo, los aparatos de la derecha bruta asediaron con sus lobistas mercenarios al presidente hasta hacerlo creer que así funcionaba el Estado y había que sacar provecho de esas relaciones. Cayo en la trampa y pagó las consecuencias, ilegalmente, pero ocurrió. El nuevo ciclo es un gobierno de un grupo de poder de los mineros en su conjunto y de otro más reducido de origen judío, el grupo Rosenberg, con su ambición por el litio, la minería y sus intereses en paraísos fiscales con empresas off shore cuyo abogado es Otárola, el sicario de los mineros, con una familia que trabaja para los Rosenberg.[1] Son los administradores que reparten el dinero estatal, son los dueños de los manejos sectoriales que someten a los gobiernos regionales y locales a favor de las corporaciones. Ante los huaicos solo buscan apoderarse de un fabuloso presupuesto por decreto de urgencia, para conseguirlo, el sicario contralor de la República, Nelson Shack, ha propuesto la creación de un Ministerio de Infraestructura con el objetivo de centralizar la ejecución de grandes obras públicas en Perú.
E) Gobierno real, tras bambalinas, de la lumpenburguesía oligárquica colonialista, rentista y extractivista, de los patrones financieros y corporativos trasnacionales y su programa expuesto en la Constitución del 93. Este estado profundo es quien tiene un invariable programa neoliberal de despojo y uso de los ingresos del Estado también para su beneficio. Su carta política es Fuerza popular y sus aliados de Renovación Popular, Avanza País y Alianza Para el Progreso, y que ahora han logrado comprar a sectores de la izquierda institucional, decretando el fin de los partidos. El jefe del gabinete y el Ministro de Economía y Finanzas (MEF) son los mercenarios administrativos de los mineros, su objetivo es continuar con el despojo de minas y aguas a los campesinos andinos eliminando la “permisología”. El titular del MEF señalo cual es su agenda: «Estamos corriendo en eso. Cuando nos tocó ir a Canadá con el premier, tomamos con preocupación lo que decían los inversionistas, que hay un exceso de permisología. Ya el premier convocó al grupo de entidades donde hay mayores problemas para construir una agenda».[2]
Esta derecha esta consolidada, unida en cuestiones estratégicas y pegada con mocos en cuanto a intereses particulares. La izquierda nominal esta aliada con esa derecha o esta moribunda y los luchadores no quieren dejarla resucitar. Solo queda la izquierda popular desde abajo, para la cual no es para nada claro que operando desde el interior del Estado o del aparato de Estado, se pueda fisurar el poder político dominante. Todo parece indicar que el despliegue de fuerza social “organizada” y con perspectivas de ruptura, exterior al Estado es ineludible. Un serio dilema estratégico es cómo hacer posible esa organización y articular el quehacer desde el aparato de Estado con la fuerza gestada desde el exterior del Estado.
La centralización del poder político en el Estado capitalista otorga al poder de la lumpenburguesía una impronta singular. Hoy parecen fuertes, pero estratégicamente, puede producirse mucha fuerza social por parte de clases y sectores dominados en momento específicos que permitirán que el Estado colonial y sus relaciones de poder y dominio condensadas entren en crisis. Pero para ello es necesario que aquella fuerza social gestada cuente con dirección y se proyecte con sentido de cambios profundos. Si aquella fuerza se extravía y sigue dispersa por carecer de orientación rebelde, por más amplia que sea, no logrará más que estremecer, pero no destrabar y destruir los nudos del dominio mafioso del Estado colonial, por lo que los problemas de dirección y sentido de las luchas sociales autodeterminadas con sentido anticolonial, no constituyen asuntos menores en la tarea de poner fin al poder político prevaleciente.
Notas:
[1] Hildebrandt en sus 13, Lima, 17 de marzo 2023
[2] La República 20 de marzo 2023.
Jorge Lora Cam. Doctor en Ciencias Políticas y en Estudios Latinoamericanos (UNAM)
Fuentes: Rebelión
