Recientes informes revelan aumento devastador de la deforestación mundial
Alarmantes datos entregó el nuevo informe Forest Pathways 2023 de la organización internacional WWF, en el cual se advierte que la humanidad está, en estos momentos, fuera de la ruta para proteger y restaurar los bosques al año 2030, incumplimiento que tendrá impactos catastróficos a nivel mundial.
Los datos de la nueva Evaluación de la Declaración de Bosques muestran que a nivel global la deforestación alcanzó los 6,6 millones de hectáreas en 2022, con una pérdida de bosques tropicales primarios de 4,1 millones de hectáreas. Además, un alarmante 96% de la deforestación mundial tiene lugar en regiones tropicales, y solo Asia tropical está cerca de la senda para alcanzar la deforestación bruta cero.
Por ello, el informe señala que los bosques tropicales están empezando a actuar como fuente de carbono y no como sumidero, bajo la presión de un clima que se calienta, se seca y es cada vez más extremo.
Así, la deforestación y degradación generalizadas y crecientes en las tres mayores cuencas forestales tropicales del planeta (el Amazonas, el Congo y el Sudeste Asiático), podrían provocar una catástrofe climática mundial.
Fran Price, líder de la Práctica Global de Bosques de WWF, lamentó que el mundo «le esté fallando a los bosques, con consecuencias devastadoras a escala global. Es imposible revertir la pérdida de naturaleza, hacer frente a la crisis climática y desarrollar economías sostenibles sin los bosques».
En esa línea, recordó que «desde que se hizo el compromiso mundial de los gobiernos en 2014 de acabar con la deforestación para 2030, se ha perdido una superficie de bosque tropical del tamaño de Dinamarca».
«Estamos en un momento crítico. No necesitamos nuevos objetivos forestales: necesitamos ambición sin concesiones, rapidez y responsabilidad para cumplir los objetivos que ya se han fijado. Es hora de dar un paso adelante», añadió Price.
Otro dato consignado en el informe Forest Pathways 2023 muestra que, en todo el mundo, se destinan al menos 100 veces más fondos públicos a subvenciones perjudiciales para el medio ambiente, que al financiamiento del cuidado y preservación de los bosques.
Sobre este punto, la Evaluación de la Declaración de Bosques revela que, a nivel mundial, sólo se dirigen 2.200 millones de dólares de fondos públicos a los bosques cada año, una fracción insignificante en comparación con otras inversiones globales.
De esto, los pueblos indígenas y las comunidades locales reciben solo una pequeña parte del financiamiento que necesitan para garantizar sus derechos y gestionar eficazmente sus territorios, a pesar de que allí donde los bosques tropicales están bajo su custodia éstos están mejor protegidos, y la deforestación y la degradación son menores.
Estos informes llegan justo antes de la Cumbre de las Tres Cuencas de Ecosistemas de Biodiversidad y Bosques Tropicales, que aparece como otra oportunidad para que los gobiernos presenten una agenda sólida y orientada a la acción, frente a la magnitud de la urgencia. Es imprescindible detener la deforestación, que es una grave amenaza para la región de Latinoamérica y el Caribe, a la vez que debemos avanzar en procesos de restauración de paisajes a gran escala», comentó Trevor Walter, líder de la Iniciativa Transformacional para Restauración de Paisajes de WWF, y coordinador del programa de Paisajes Terrestres de WWF Chile.
Además de pedir que se cumplan las promesas financieras, el informe de WWF Forest Pathways 2023 establece un plan para salvar lo que nos queda de bosques al 2030, con medidas esenciales, entre las que se incluyen:
-Poner fin a las inversiones y subvenciones que perjudican a los bosques, como las subvenciones agrícolas, responsables de la pérdida de 2,2 millones de hectáreas de bosque al año.
-Reformar las normas del comercio mundial que perjudican a los bosques, eliminando de las cadenas mundiales de suministro las materias primas que deforestan y suprimiendo las barreras a los productos respetuosos con los bosques.
-Acelerar el reconocimiento de los derechos territoriales de los pueblos indígenas.
-Hacer el cambio hacia economías basadas en la naturaleza.