Lanzaron una campaña para constituir la Corte Penal Internacional del Medio Ambiente
La Academia Internacional de Ciencias del Ambiente de Venecia y sus Presidentes Adolfo Pérez Esquivel e Antonino Abrami, han lanzado la campaña mundial para constituir la Corte Penal Internacional del Medio Ambiente, sosteniendo que los desastres ambientales son crímenes contra la humanidad. Para introducir el delito contra el ambiente es necesario modificar los Estatutos de Roma de la Corte Penal Internacional con sede en La Haya, siendo necesario que se apruebe con las 2/3 partes de los países firmantes.
Numerosos desastres ambientales quedan en la total y absoluta impunidad jurídica, como lo acontecido en Chernobyl, Bophal y tantos otros desastres que afectan la vida planetaria. Lo mismo ocurre con las petroleras y empresas contaminantes como la gran minería, los agronegocios, los desmontes de los bosques naturales, la contaminación y uso irracional del agua.
Los recursos naturales son un bien esencial de la humanidad que está en alto riesgo de contaminación y desaparición. Organismos internacionales como la ONU y la FAO, han dado la voz de alarma sobre la necesidad de preservar la soberanía alimentaria y denunciando que por día mueren en el mundo más de 13 mil niños de hambre (UNICEF, Situación Mundial de la Infancia 2008-Supervivencia Infantil, 2008).
La campaña es concientizadora y educativa sobre los bienes y recursos naturales que hoy se encuentran en grave peligro a lo largo y ancho del planeta.
A la convocatoria de la Campaña se han sumado los Premios Nóbel de la Paz Betty Williams, Dalai Lama, Mairead Corrigan Maguire, Shirin Ebadi, Rigoberta Menchu Tum, el Premio Nobel de Literatura, Dario Fo, los escritores Luís Sepúlveda, Roberto Saviano, Gianni Miná, Luigi Ciotti, el Padre Alex Zanotelli, el Presidente del Senegal Abdoulaye Wade, el cantante Claudio Baglione, entre muchas otras adhesiones.
Hacemos un llamado a la comunidad internacional, a las instituciones sociales, culturales, religiosas y políticas, a los centros de investigación científica, universidades, centros de estudiantes, a las comunidades religiosas, sindicatos y educadores, a los Pueblos Originarios y organismos de derechos humanos, a los ámbitos jurídicos, empresariales, artistas e intelectuales y a cada ciudadano y ciudadana para asumir el compromiso en defensa del ambiente y de la vida.
Publicado por Puerta E